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Cómo hacer el diario de River Song (Doctor Who) for dummies

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Este blog es tan literario que hoy vamos a aprender a hacer el diario de River Song que sale en Doctor Who. ¿Por qué hacer otro más si ya hay miles en internet y hasta en youtube? Bueno, porque casi todos los que encontré y con los que me guié son increíblemente tardados, complicados y empiezan de cero: haciendo el cuaderno. Cómo supondrán, yo no tenía ni recursos ni paciencia y mucho menos habilidades para hacer una libreta desde cero así que improvisé bastante y el resultado me quedó bastante decente. Definitivamente se parece al diario de River Song.

¿Qué van a necesitar?

  1. Una libreta, tipo francesa. La mía es delgada, de 90 hojas, pero mientras más gordita, mejor. 
  2. Cartón no muy grueso, el de las cajas de cereal funciona perfectamente.
  3. Pintura color azul TARDIS.
  4. Pinceles.
  5. Pegamento, el que quieran. 
  6. Cutter y mucha paciencia.
  7. Fijador para el cabello. 

Instrucciones



Primero y lo más importante, es medir el tamaño de su libreta donde van a pegar las piezas de la TARDIS. Cada libreta es diferente, así que mídanla y tracen un rectángulo del tamaño que les da en el cartón o caja de cereal. Dentro del rectángulo van a dibujar el diseño de la puerta de la TARDIS más o menos así: 

No, nestlé no me pagó product placement.
Yo primero tracé el diseño con azul, sin hacer ninguna separación entre las piezas y después, con rosa mexicano, tracé las lineas de corte, dejando separaciones entre cada pieza. En mi caso fueron de 2mm, pero si se les dificulta pueden hacerlas un poco más grandes. Después viene la parte más pesada: cortar. Primero corté el cuadro grande de cartón solito y después, usándolo como molde, corté otro igual para que las piezas fueran más gruesas. Después corté pieza por pieza del cartón marcado con un cutter y, usándolas como molde, las volví a cortar otra vez del otro cuadro de cartón Sí, lo corté todo dos veces.



Después hay que pegar las piezas para que se hagan gruesas, las originales con las segundas que cortamos. Si creen que todavía no tiene forma nada, simplemente pongan las piezas encima de la libreta para asegurarse de que les haya quedado todo del tamaño correcto.

¡TARDIS desconstruida!
¡TARDIS no desconstruida!
Ya nos aseguramos que lo que estamos haciendo tiene forma, así que ahora a la parte divertida. ¡A pintar! Hay que pintar todas las piezas color azul TARDIS y la libreta también. Para quitarle la marca, el precio y hacerla ver un poco más rústica.



Después hay que pegarlo todo. Yo, por cierto, hice solo la tapa de enfrente, porque es la que va a lucir, pero si tienen tiempo y pintura pueden hacerlo para los dos lados. Para pegar, empiecen por las piezas de afuera y después las de adentro, es más fácil calcularlo todo. Si no pega bien o no se fija, siempre pueden poner la libreta abajo de dos libros muy gordos (en mi caso, Tormenta de Espadas y Danza de Dragones) hasta que fijen bien. Después de que todo pegue, recuerden corregir las imperfecciones con la pintura que les haya sobrado.


Si quieren que el lomo tenga aspecto de libro viejo, pueden cortar más piezas en el cartón. Yo usé tres para darle un aspecto un poco antiguo:



Ahora sí, ya sólo queda el final, que es para lo que vas a usar el fijador para el cabello. A una distancia prudencial, después de que la pintura esté bien seca, rocías todo el cuaderno con fijador para que la pintura ya no se caiga y le dé, además, un aspecto brillante. Y voilá!, tienes tu libreta como River Song sin que Amazon te haya sacado un ojo de la cara. Aquí mi resultado final:





Footnotes in Gaza, Joe Sacco | Reseña

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Sinopsis: Rafah, a town at the bottommost tip of the Gaza Strip, is a squalid place. Raw concrete buildings front trash-strewn alleys. The narrow streets are crowded with young children and unemployed men. On the border with Egypt, swaths of Rafah have been bulldozed to rubble. Rafah is today and has always been a notorious flashpoint in this bitterest of conflicts.
Buried deep in the archives is one bloody incident, in 1956, that left 111 Palestinians dead, shot by Israeli soldiers. Seemingly a footnote to a long history of killing, that day in Rafah—cold-blooded massacre or dreadful mistake—reveals the competing truths that have come to define an intractable war. In a quest to get to the heart of what happened, Joe Sacco immerses himself in daily life of Rafah and the neighboring town of Khan Younis, uncovering Gaza past and present. Spanning fifty years, moving fluidly between one war and the next, alive with the voices of fugitives and schoolchildren, widows and sheikhs, Footnotes in Gaza captures the essence of a tragedy.

Desde que vi las novelas gráficas Palestine, me interesó el trabajo de Joe Sacco. Esta fue la primera novela gráfica de su autoría a la que le pude poner las manos encima y con más de cuatrocientas páginas, lo que la vuelve todo un tocho de novela gráfica. LO VALE. Sacco, en plena guerra, en vez de escribir sobre la guerra, va en busca de una historia más vieja, una historia que podría sólo pasar a la Historia con mayúsculas como una lista de muertos, o más que como una lista, una simple cantidad. Algo que se escribiría más o menos así: "En tal día de tal mes de 1956 murieron tantos palestinos". Punto. No más. Joe Sacco anda tras esa historia, buscando afectados, preguntando a la gente. 


Y casi toda la gente, en el mejor de los casos, reacciona incrédula. ¿Por qué anda tras esa historia cuando en ese momento les están derrumbado sus casas? ¿Por qué no escribe (o en este caso, dibuja) de lo que está pasando en ese momento? Pero no. Sacco va en busca de la historia que quiere, la de 1956, al tiempo que cuenta como es la vida en Rafah, ese pequeño pueblo en la Franja de Gaza, y hace notar lo comunes que son los funerales de mártires, las casas derrumbadas por israelís, los muertos de un día sí y un día también. Primero, tengo que admitir que no sabía nada o casi nada de la Franja de Gaza cuando empecé a leer aquí, del conflicto Palestina/Israel también sabía poco, muy poco. Y lo que sabía era por comentarios de Facebook que decían que los judíos tenían bien merecido el holocausto por lo que estaban haciendo en Palestina de gente que cree que las tragedias se comparan y se justifican con otras, así que no se puede decir que mis fuentes sean fiables.

Hablando en específico de este libro, por supuesto que lo recomiendo si les interesa saber un poco más. Me hubiera gustado que Sacco buscara más pluralidad de voces para su historia (léase, no acudir a las mujeres sólo cuando era el último recurso), pero en general está bien contada. Junta el pasado con el presente y lo hace bien. Habla de como depura las historias y cómo comprueba que quizá le estén diciendo la verdad. Sin embargo, con todo eso, reconoce que no se siente con derecho a juzgar los recuerdos de la gente, por más falsos que sean, porque ellos parecen recordarlo como si de verdad hubiera ocurrido ayer. Ocurre en uno dos casos, en los que alguna persona aseguro haber hecho algo, huído de alguna manera, haber visto morir a alguien. Y luego ni siquiera sus familiares lo confirman. 


Sobre la historia no tengo nada que criticar. Pasó y así la recuerdan, así que, igual que Sacco, ¿quién soy yo para meterme con los recuerdos de la gente? Pareciera que Footnotes In Gaza es uno de esos trabajos hechos específicamente para dejarte pensando que el mundo es una mierda, pero creo que no. Al menos no desde la perspectiva que lo pone el dibujante y escritor. En su tiempo en Gaza hizo amigos y creo lazos y nos deja ver eso en su historia. Yo, finalmente, por interés, busqué algunas imágenes para darme una idea de dónde demonios estaba ubicada la historia, y aunque me gustaría decir que me sorprendí, la verdad es que no. 




Bueno, después de una ligera sequía de libros y reseñas, este es el último libro que he leído y que, por supuesto, merecía una reseña en condiciones, aunque presiento que no le interesará a mucha gente. Aun así, por el increíble trabajo periodístico... ¡recomendado!

2x1: Amélie Nothomb | Reseñas

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Estoy intentando ponerme al corriente con las reseñas y fracasando, porque tengo muchísimas pendientes, pero bueno, por lo mientras, voy con una de mis escritoras predilectas. La única advertencia es que tengo estas reseñas tan atrasadas que son libros que leí el año pasado, pero que igual recomiendo. Por algún lado tengo que empezar a ponerme al corriente, ¿no?


La nostalgia feliz


Sinopsis: «Todo lo que amamos se convierte en una ficción. De las mías, la primera fue Japón.» Con esta estimulante frase Amélie Nothombabre La nostalgia feliz. Anuncia una nueva entrega de sus ficciones autobiográficas. En la novela la belga retoma el hilo de Ni de Eva ni de Adán, la narración de un idilio de juventud de su sosias literaria con Rinri. Dieciséis años más tarde, Nothomb acepta la invitación de una televisión francesa de regresar a su país natal. Allí no sólo se reencontrará con Rinri, sino también con su niñera, Nishio-san. El Japón de Nothomb son sus orígenes y un Shangri-La literario. Un país al que pertenece pero que le es extranjero: o sea, un oxímoron, como también parece serlo el título de la novela. El lugar en el que nació, y en el que se crió durante sus primeros cinco años, pero en el que, como hija del embajador belga, crecería inmersa y traspasada por una peculiar mixtura cultural. Y esto dota a su vital y melancólica prosa de una descacharrante lucidez. «Lo que has vivido», escribe Nothomb en el delicioso arranque de su nueva novela, «te deja una melodía en el interior del pecho: ésa es la melodía que, a través del relato, nos esforzamos en escuchar.» Gocemos con esta nueva partitura, pues sin duda suena muy bien.

Este libro marca la vuelta a Japón de Amélie. La verdad es que no lo recomiendo si no han leído antes Estupor y Temblores, que es la historia de sus peripecias trabajando en una empresa japonesa y Ni de Eva ni de Adán, que es su historia de amor muy particular. Este libro evoca continuamente a esos y es muy fácil que se pierdan si no los han leído. Además de que traba de la nostalgia que Amélie siente por japón y que yo encontraría imposible de entender si no hubiera leído primero los otros dos. Estupor y Temblores lo leí tan sólo unas semanas antes de este, pero mis aventuras con Ni de Eva ni de Adán ya son viejas, como de hace tres años y este libro, para mí, significó irme acordando poco a poco de todo lo que ya había leído.

Es un libro divertido, donde Amélie se encuentra con sus raíces y se sorprende de lo diferente que es el lugar donde nació y creció. Esa frase que abre el libro,  «Todo lo que amamos se convierte en una ficción. De las mías, la primera fue Japón», deja muy claro con lo que nos vamos a encontrar después: un intento de remembranza, a veces casi desesperado, todo un esfuerzo de Amélie para recordar cosas, como ese jardín de infancia que no le suena conocido pero en el que sabe que estudió. De las cosas que más me gustan de la escritora es, precisamente, que en su amor a Japón, no lo idealiza ni lo vuelve algo perfecto. Al contrario, lo critica. Critica sus amores, al mismo tiempo que nos deja ver el profundo amor que le tiene a Japón, sobre todo al Japón de sus recuerdos. 

Muy recomendado. De lo que me ha parecido mejor de esta autora son sus libros autobiográficos y este, por supuesto, no se queda atrás. 

Higiene del asesino


Sinopsis: Al anciano Prétextat Tach, premio Nobel de Literatura y acérrimo enemigo de las entrevistas, sólo le quedan dos meses de vida. Al hacerse pública la noticia de su próximo fallecimiento, en plena guerra del Golfo, periodistas de todo el mundo solicitan un encuentro con el novelista. Sólo cinco lograrán su propósito; los cuatro primeros serán víctimas de la arrogancia y capacidad destructiva de un genio decidido a vengarse del mundo despreciándoles y sometiéndoles a toda clase de humillaciones. La última entrevista, plagada de sorpresas, resolverá el enigma de tanta amargura con un violento y despiadado interrogatorio por parte de los dos duelistas dialécticos. El descubrimiento de un terrible secreto y un desenlace espeluznante, constituyen el colofón de esta historia sombría que se fundamenta en la magis­tral brillantez de los diálogos. Primera obra de Amélie Nothomb,Higiene del asesino dio a conocer el talento de su autora al manejar la crueldad, el cinismo y la ambigüedad para construir una atmósfera tan irrespi­rable como literaria.

Prétextat Tach es una persona, en todos sentido, horrible. De esas personas que nos escandalizamos en la vida real sólo por su existencia. Es un obeso mórbido cuyos hábitos alimenticios le causan arcadas a casi cualquiera, un escritor que está convencido que nadie lo ha leído de verdad, porque si lo hubieran hecho ya todos se hubieran suicidado, que se cree más inteligente que todo el mundo, pedante, que odia a los periodistas, a las mujeres (sus cuerpos, su existencia, todo) y que por alguna razón ha decidido dar cinco entrevistas antes de morir. Ya lo dije, es una persona horrible, asquerosa. Pero como personaje salido de la pluma de Amélie, es increíble, perfectamente formado.

El libro es un libro divertido, sí, pero necesitas armarte de paciencia. Tiene un humor bastante cínico y además, hasta antes de la quinta entrevista, la estructura es muy parecida. Las entrevistas empiezan parecido, con cada periodista convencido de que logrará lo que los anteriores no lograron, lo que nadie ha logrado y se cubrirá de gloria por ser capaz de entrevistar a semejante... engendro. No tengo otra palabra para describirlo. Pero todos, allí y allá, cometen errores: dejan ver sus vulnerabilidades, hacen preguntas que no deberían haber hecho, se escandalizan. Y Prétextat Tach aprovecha eso para humillarlos una y otra vez. 

Hasta la quinta entrevista. No les voy a desvelar más para no desvelar el libro, pero si diré que es un libro que, ante todo, se basa en los diálogos y en la rapidez para contestar que tiene el escritor, en su cinismo, su arrogancia y su odio hacia prácticamente todo lo que existe en el mundo. Incluidos sus lectores. Un libro pequeñito, recomendado, evidentemente


Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff | #LCSoManyBooks

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Sinopsis: This morning, Kady thought breaking up with Ezra was the hardest thing she’d have to do.
This afternoon, her planet was invaded.
The year is 2575, and two rival megacorporations are at war over a planet that’s little more than an ice-covered speck at the edge of the universe. Too bad nobody thought to warn the people living on it. With enemy fire raining down on them, Kady and Ezra—who are barely even talking to each other—are forced to fight their way onto an evacuating fleet, with an enemy warship in hot pursuit.
But their problems are just getting started. A deadly plague has broken out and is mutating, with terrifying results; the fleet's AI, which should be protecting them, may actually be their enemy; and nobody in charge will say what’s really going on. As Kady hacks into a tangled web of data to find the truth, it's clear only one person can help her bring it all to light: the ex-boyfriend she swore she'd never speak to again.

No tenía planeado leer Illuminae en el futuro cercano, pero era lo único que me llamaba de verdad en las propuestas del maravilloso club de lectura en inglés So Many Books, así que voté por ese y tuve la suerte de que ese fue el que saliera elegido. Tengo que decir que todo lo que sabía del libro era exactamente esto: ciencia ficción juvenil, guerra en el espacio. Por leer, no había leído ni la sinopsis. Y como de todos modos ya lo iba a leer, tampoco la leí hasta hace exactamente dos minutos que fui a buscarla para ponerla aquí. Lo sé, soy una lectora magnífica

Bueno, vamos a la sección de las quejas... digo, a la reseña. Al principio parecía que me estaba gustando y ayer le di la increíble cantidad de dos estrellas en Goodreads, así que me preguntaron por qué, porque al principio hablaba bien de él (no maravillas, sólo no estaba deseando lanzarlo por la ventana, lo cual ya es todo un logro cuando se trata de mí leyendo distopias o cosas de ciencia ficción escritas hace poco). Así que vamos a empezar por... la edición del libro digital. 


Me voy a cagar en los maquetadores. Porque me imagino que el libro físico es una chulada por lo que pude ver, pero ya que hicieron un excelente trabajo haciendo ese libro, hicieron que un mono maquetara el ebook. Al menos eso me imagino que hicieron, porque se cagaron en todos los estándares posibles a la hora de maquetar. Me imagino que en los lectores como tabletas, celulares o básicamente cualquiera que no sea kindle funciona más o menos, pero la plataforma más grande es Amazon. Y se les ocurrió la brillante idea de poner el texto blanco y el fondo negro. No sé si sepan, pero los lectores kindle no detectan los cambios de color en el fondo, pero sí en los de las letras. ¿Resultado? Un montón de partes en blanco en todo el libro. La mitad no las leí y me dediqué a asumir que pasaba. Cuando al final de verdad no me estaba enterando de nada me dediqué a subrayar el texto y leerlo en los recortes a ver si me enteraba de más. Después de todo lo que sufrí para terminar de leer el libro tengo ganas de buscar a la persona que maquetó el ebook y quemarle la casa. Tiene un lugar reservado en el infierno.

Lo que dije, preciosidad en físico.
Ahora imagínenselo en ebook
Ahora, pasando ahora sí al trabajo de los autores... La historia. Cuando el libro dice "The Illuminae Files" no miente, literalmente son archivos (todavía me encuentro gente que cree otra cosa): informes, e-mails, transcripciones de entrevistas, "transcripciones" de lo que ocurre en las cámaras de seguridad y archivos de una máquina con inteligencia artificial. Lo original del libro es que consigue contar una historia basándose sólo en eso. En serio, la cuenta. Con sus muchas fallas, pero le reconozco que cuenta la historia y que tiene idea de cómo contarla.

Pero bueno, hablando de los personajes, el formato no ayuda en lo más mínimo. Tampoco la cantidad de relleno que hay. El relleno no es un problema hasta pasado quizá el treinta por ciento del libro, porque todo lo que hay antes nos enseña a entender a los dos protagonistas, pero después, antes del clímax, hay hojas y hojas y hojas de relleno de personajes que no conocemos y directamente no nos interesan porque el formato del libro nos da poco espacio para conocerlos. Los protagonistas, Ezra Mason y Kady Grant, son los que tienen mayor espacio para desarrollarse y eso porque nos los presentan al principio en la transcripción de una entrevista donde van contando como llegaron hasta allí. Por sus reacciones, podemos ir adivinando cosas sobre ellos. El formato en el que están escritas esas entrevistas obliga a los dos autores a mostrarnos la personalidad de sus personajes no a abusar de las explicaciones o de informarnos las cosa. Ese es, al menos, un punto a favor


Pero sigamos, por favor, ahora con los problemas del formato del libro. Exceptuando a los reportes de la máquina de inteligencia artificial de la nave ALEXANDER, algunos reportes de cámaras de vigilancia y otras cosas, no nos enteramos de las cosas hasta después de que estas ya pasaron. Es decir, nos cuentan la historia y no nos la muestran. No saben como odio eso. Lo odio tanto que estoy planeando ir a buscar a Kaufman y a Kristoff con un cartel que diga "show, don't tell". Que sí, entiendo el formato y que es sumamente original, pero de nada sirve que tu formato sea lo más original y adornado del planeta si no puedes sostener completamente una historia o, como en este caso, vuelves aburrida por momentos una historia por no aprovechar bien tus recursos.

La historia tiene romance. Agradezco que no sea del tipo "chico conoce chica", sino "chico y chica cortaron la misma mañana de la tragedia y ahora están confundidos". Los autores lo intentan, de verdad, parece que lo intentan, se nota el esfuerzo, pero si lo único que tienes para desarrollar tu romance son conversaciones de chat..., no estás muy bien. Apenas si se notan los sentimientos entre los dos. Ezra sale mejor parado, el chico, pues por alguna razón sus "diálogos" me suenan menos robóticos que los de Kady, la chica. El romance parece tener razón de ser, pero está tan mal desarrollado que acaba siendo una plasta para los personajes. 

Y ahora... en serio, este libro podría haber sido épico. Y no lo es. Me encantan los conflictos morales y este libro los tiene, al menos durante las primeras dos terceras partes, a rabiar. La nave, ALEXANDER, donde todo es más militar y donde está Ezra, tiene una computadora o algo por el estilo, que básicamente es inteligencia artificial y empieza a tomar decisiones bastante... raras. Los superiores lo ocultan e intentan aparentar normalidad. Además, hay una enfermedad que se está extendiendo de la que nadie sabe nada. Los conflictos morales se manejan perfectamente hasta prácticamente el final, cuando los autores mandan todo a la mierda, tiran un poco del deux-ex-machina y lo arreglan todo de maravilla... bueno, dejan unos cuantos muertos para que no se les viera el morro muy obvio.


Anoten, niños: frases bonitas no salvarán mi libro si antes tenía conflictos morales cojonudos y hago que la mayoría desaparezcan mágicamente. En, creo que ya acabé. Sí, creo que ya.

¿Recomiendo el libro? No sé. Podría haber sido épico. A mucha gente aún le parece épico. Tiene naves espaciales, inteligencia artificial, una hacker y una enfermedad que vuelve zombie a la gente. El formato es original, pero quizá no es lo más adecuado para la historia, el romance está metido con calzador y el final está más desaprovechado que nada. No lo recomiendo mucho, la verdad.

Recuento de los daños | Febrero 2016

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Este mes leí menos. En mi caso no quiere decir que leí poco, sólo quiere decir que leí menos que otros meses. Como todos los meses, diré que no tengo un giratiempos ni una TARDIS, pero que me encantaría tenerlos porque me ahorraría mucho tiempo e incluso podría dormir más las noches que me desvelo. Todo ventajas con los giratiempos y las TARDIS. Así que sin más, paso a contarles de lo que leí este mes.

Como entrenar a tu dragón, Cressida Cowell


Lo leí/escuché en inglés. El libro es bastante infantil y muy poco parecido a la película, pero que el audiolibro lo haya grabado David Tennant con ese acento suyo tan escocés (y luego ponga acento vikingo cuando hablan los personajes) le suma muchos puntos, además de que el final es precioso, perfecto y bastante poético... y a pesar del tono de todo el libro, bastante poco infantil. Eso sí, Astrid aquí no existe, Toothless no es exactamente el Toothless que conocemos y Hiccup es... bueno... se parece al de la película, pero tampoco tanto. Si lo van a leer porque vieron la película tienen que mentalizarse a lo siguiente: la película que le hizo Dreamworks es un fanfic. A pesar de todo, es entretenido y recomendable. Si acabo la saga, le haré una reseña, que ahora mismo no creo. 

Men Explain Things To Me, Rebecca Solnit


El libro no ficción del mes. En este caso fue un libro bastante corto cuyo valor más importante radica en el  ensayo que le da título al libro y, además, uno que habla de la violación normalizada. El resto realmente no son tan interesantes y en conjunto, aunque todo tiene su valor, parece que pegaron el libro muy a fuerza o lo unieron, vaya. No me acabó de convencer en conjunto, pero algunas cosas sí me sorprendieron y me parecieron increíblemente acertadas, sobre todo, como ya dije, al principio. No le he hecho reseña aún porque no sé de donde sacarme la reseña, pero planeo, si no una reseña, si escribir algo relacionado con este libro en el blog donde colaboro, La hora del té.

Footnotes in Gaza, Joe Sacco


No sé ni cómo realmente leí este tochaco. No suelo contar los comics ni las novelas gráficas en los recuentos de lectura, pero este, por su tema y sus más de cuatrocientas páginas narra el día a día en Gaza mientras Joe Sacco va buscando una historia que ha pasado desapercibida hasta ahora que ocurrió en 1956, cuando varios soldados israelís mataron a hombres palestinos. Pueden ser sólo nombres en una lista de muertos, pero Joe Sacco quiere la historia entera, de alguna manera decirnos que las listas de muertos tienen historias detrás y que los daños colaterales no son tan colaterales para algunos. Los palestinos, sin embargo, aunque comparten su historia, reaccionan con incredulidad, le piden que en vez de ese incidente casi olvidado cuente otra historia, la que está pasando en ese momento. Pero Joe Sacco es persistente. Si les queda alguna duda de que lo recomiendo, les pongo aquí la reseña.

La más densa tiniebla, Antonio Malpica


Este libro es más una excusa para re interpretar los cuentos de Hans Christian Andersen que otra cosa, pero la verdad es que es una perfecta excusa y se le perdona por lo bueno que resulta. Algunos cuentos son reconocibles si conoces aunque sea un poco a Hans Christian Andersen... y otros no. La verdad es que me faltan muchos de sus cuentos por leer, porque yo soy más de los hermanos Grimm y de Perrault, pero la verdad es que estos son perfectos. La re interpretación que les da Malpica es más retorcida y oscura, a la que las ilustraciones le ayudan perfectamente. Puede parecer un libro para niños... no, de hecho, es un libro para niños publicado por el Naranjo. Pero lo vale. Lo vale completamente. Y además todo adulto debería leer libros para niños alguna vez en su vida para recordar lo bonitos (o no, como en este caso) que son los cuentos de hadas.

Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff


Decepción del mes. Y el mes pintaba tan bien... pero bueno, supongo que no se puede evitar que a veces los libros te decepcionen. En este caso, la culpa más bien fue de la maquetación del ebook que está hecha con las patas y el final, porque todo el resto tenía un potencial impresionante, tanto que el libro podía haber sido épico y no lo fue. Hay quien dice que podría ser épico si tan sólo no fuera young adult, pero creo que no es exactamente lo correcto: podría haber sido épico si no acabara callendo en los tópicos young adult. Me da mucha pena por el libro, pero bueno, ya veremos cuando salga el siguiente si me decido a darle una oportunidad... quizá mejore, quizá no. Pero la historia tiene un terrible potencial desaprovechado. Para las dudas, la reseña, por supuesto.

El Cuentacuentos, Antonia Michaelis


Creo que tendré que decir, sin temor, que este fue el mejor libro de todo el mes. Me queda pendiente el análisis porque como en casi todo libro hay cosas que me chirrían y la moralidad en este es demasiado gris, turbia como chapopote. Sin embargo, para ser una historia que parte del cliché de la chica buena y curiosa y el chico aparentemente malo, es un libro que golpea en la cara a todos los que usan y abusan de ese cliché, destroza la frase "el amor lo puede todo", nos demuestra que no podemos arreglar a la gente ni con cariño y que, por supuesto, Anastacia Steele y Christian Grey no existen. Los personajes son increíblemente reales, humanos, creíbles a pesar de la historia. La narración de Michaelis es muy poética en algunas partes y sobre todo, tiene un tinte de melancolía, como si estuviera anunciando que algo no va a salir bien. Tengo la reseña pendiente, ya ahondaré en el asunto cuando la escriba. 

Colaboraciones


En PlusbitsMx:
En La hora del té:

El cuentacuentos, Antonia Michaelis | Reseña

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Sinopsis: Anna y Abel no podrían ser más diferentes. Ambos tienen diecisiete años y están en su último año de secundaria, pero mientras que Anna vive en una bonita casa vieja de la ciudad y proviene de una familia acomodada, Abel, el traficante de drogas de la escuela, vive en un gran edificio de concreto, similar a la torre de una cárcel en las afueras de la ciudad.

Leí algo en una reseña en goodreads cuando acabé el libro que me hizo darme cuenta hasta que punto este era un libro triste e iba más o menos así: "Hay historias sobre gente que se sobrepuso a tragedias y superó sus traumas. Esta no es una de ellas. También hay historias sobre como el amor lo puede todo. Tampoco es una de ellas." Digo que iba más o menos así porque estaba en inglés y ahora no recuerdo exactamente las palabras que usaba, pero es completamente cierto. Este es un libro que destroza completamente esa tesis que dice que el amor lo puede todo y nos demuestra que como humanos somos mil veces más complicados que el blanco y el negro, porque entre el blanco y el negro hay muchos grises, razones y por qués y a veces nos cuesta racionalizar las cosas. En fin, me estoy echando esta parrafada porque antes de que lo empezara a leer Alejandra (del canal Sputnik), ya me había dicho que quería comentar una escena conmigo, sobre todo desde una perspectiva de género. Me dio curiosidad y lo leí también porque había hablado muy bien de él. Así que lo compré en un impulso y a los cinco días lo había terminado (o antes, realmente no me fijé).

Bueno, voy a empezar y como dijo Jack el Destripador, vamos por partes.

Esta vez, en vez de empezar por los personajes como siempre, voy a partir de la prosa de Antonia Michaelis. El libro tiene una atmósfera que desde el primer momento se siente melancólica y de algún modo, nostálgica. El inicio involucra a un muerto, así que eso te da la pista del ritmo de la novela, el tema y la constante atmósfera trágica que rodea a los protagonistas. Todo esto está perfectamente manejado porque Michaelis combina la realidad con los cuentos y en los dos, hay algo melancólico presente la mayor parte del tiempo. Aun cuando la mayoría de las situaciones no son trágicas, tenemos la constante idea de que los personajes están viviendo la tragedia de su vida y que el cuento que cuenta Abel no es un cuento con final feliz, sino con un final totalmente funesto. Las metáforas no son esas metáforas gastadas y re gastadas que ya nos sabemos de memoria y Michaelis imprime algo poético en sus palabras.

Así van a acabar cuando lo terminen
Si sigo hablando de cómo está narrado el libro me dirán que me pagaron para hacerlo, seguro. O quedaré como una reseñadora totalmente ridícula. Una de dos y como no quiero que ninguna de las dos pase, iré directamente a mi parte favorita de casi toda reseña y de analizar los libros y re analizar los libros: los personajes. Tenemos un elenco muy grande y empezaré, por supuesto, por los protagonistas. Sin duda, humanos. Tienen conflictos morales, algunos muy complicados que trataré más abajo y son contradictorios, como humanos, aunque quizá a un nivel bastante lejos de lo aceptable. Sin embargo, Michaelis no los juzga, me pareció a mí, ni para bien, ni para mal. Los deja ser, contar su historia, justificarse o no hacerlo y los deja cometer errores.

Ese alejamiento que tiene la escritora de sus personajes le suma al libro porque obliga irremediablemente a pensar. Siempre he defendido la idea de que las cosas no están en los libros porque sean buenas, correctas o ejemplos a seguir. Y este es uno de esos libros con los que hay que tener mucho cuidado porque nadie pinta la línea de lo moralmente correcto y creo que muchas críticas le cayeron a este libro porque se cree que todo lo que nos presenta y nos arroja a la cara es, justamente, algo "correcto" o "justificable"; entre comillas, porque, como digo, la moralidad de los personajes es gris completamente.

Antonia Michaelis
Entre los secundarios tenemos a Micha, la hermana de Abel, una niña. Algo que me ocurre muchas veces cuando veo a personajes de tan corta edad que tienen tanta importancia en la trama de un libro es que los escritores tienen muchos problemas para construirlos de manera creíble. Micha no es perfecta, pero aparenta la edad que tiene. Obviamente, al ser criada casi enteramente por Abel y vivir el entorno en el que vive, esa mentalidad  despierta que tiene resulta muy creíble.

Gita, de entre los amigos de Anna, es mi favorita. Para Anna, es la voz de la razón (y que razón tiene casi todo el tiempo), pero también esconde algo que no debería y lo hace para proteger a Anna. Esa lealtad es increíble. Muchos escritores no se fijan tanto en las relaciones de amistad de sus personajes, relaciones que muchas veces que en nuestra vida son mil veces más duraderas que el romance (y que todo buen romance está basado en una buena amistad) y Gita es precisamente una buena amiga. Hannes se desdibuja un poco entre el resto de los personajes y Bertil, el último, definitivamente, no lo consideraría yo un amigo. Hay una dinámica entre él y Anna que me dejó bastante mal sabor de boca, porque Bertil me causó miedo casi desde su segunda o tercera aparición: tiene conductas controladoras y suele creer que Anna debería quererlo porque él le ayuda y se preocupa por ella. Bertil es justamente esa persona que cree que los favores se pagan con amor y es tan real que seguramente mucha gente lo encontrará terriblemente real.

Los padres de Anna son extraños, distintos... No parecían padres, quizá. Pero los vemos siempre desde la perspectiva de Anna que está en una época complicada, así que no me pareció tan mal. Después tenemos a los antagonistas que no son realmente antagonistas, sino que para Abel representan todos los obstáculos que tiene que sortear para poder quedarse con Micha. Abel tiene diecisiete años y no puede mantener a su hermana, pero así no la quiere en las manos de una familia de acogida como la que tiene su vecina, que sólo se dedica a acoger niños por el dinero que le da el estado o en las manos de su padre biológico o la casa de sus familiares lejanos a los que, literalmente, el destino de Micha les da igual. Eso vuelve antagonista a un trabajador social que sólo intenta hacer su trabajo. Anna, desde su propia visión, es mucho más indulgente, pero Abel lo condena sin ninguna clase de perdón en sus cuentos y es allí donde nos damos cuenta de que los dos personajes son diferentes piensan diferente con base en sus circunstancias y que Micahelis, distanciándose de ellos, lo muestra muy bien.


La trama es muy simple: Micha tiene que abandonar su isla, sortear mil peligros para proteger su corazón de diamante y llegar a tierra firme. Al menos, ese es el cuento que le cuenta su hermano. Abel quiere quedarse con ella, protegerla de todos los peligros pero tiene diecisiete años y muchos problemas para llegar a fin de mes. Tiene un poco de dinero gracias a lo que los servicios sociales le dan a su mamá, la única materia que se le da bien es Alemán y en la escuela le llaman el mercader polaco porque vende drogas. Por lo demás, Anna no tiene ni idea de qué hace, pero sí mucha curiosidad. Anna es el contrario: buena chica, buena alumna, vive dentro de una burbuja y quiere desesperadamente salir de ella, así que Abel es su manera de salir de la burbuja y tropezarse con el mundo real. La trama parte del cliché (o parece partir de él): chica buena e inocente y chico malo, pero como dicen, mejor que parta de un cliché a que llegue a él y en este caso lo destroza. El amor no lo puede todo y nos damos cuenta en una parte cuando Abel le dice a Anna "no trates de hacer de mí lo que no soy". Y es cierto: las cosas realmente jodidas no se arreglan con amor de dos días.

Abel Tannatek me recordó a uno de mis personajes (Randall Bennett en Acónito y Verbena) porque los dos tienen a alguien a quien proteger cueste lo que cueste. Y la cantidad de cosas que están dispuestos a hacer son casi infinitas. Me recordó lejanamente, porque hay algo en lo que definitivamente no se parecen, pero la verdad es que los dos están jodidos y corriendo de sus errores hasta que estos los alcancen. Siempre me llamó la tensión que la gente que leía la historia apoyaba a Randall mientras que yo me dedicaba a tejer la telaraña de sus errores que iban a acabar alcanzándolo quisiera o no. Y un poco así es Abel Tannatek: hay momentos en los que sientes que no puedes evitar apoyarlo, sobre todo al principio, pero no puede huir eternamente de todo lo que ha hecho.

Definitivamente recomiendo el libro, sé que no a todo el mundo le va a gustar, pero lo recomiendo. Porque me hizo pensar y pensar tanto que voy justo a la parte que sólo pongo en unas cuantas reseñas: la de los spoilers. En este caso, me voy a spoilear muy chungamente todo así que de verdad les recomiendo que huyan ahora. si tienen interés en leer el libro.


SPOILERS. INTENTÉ USAR BOTÓN DE SPOILERS PERO NO FUNCIONÓ ASÍ QUE QUIEN AVISA NO ES TRAIDOR.

En la historia, la violencia sexual es una constante. Abel asegura que Rainer, el pare biológico de Micha, es un pederasta. No lo dice tan cual: lo da a entender sutilmente, lo más sutilmente que puede. Durante muchas páginas nos puede parecer que es sólo producto de su imaginación, pero él está totalmente seguro y esa es de hecho, su excusa para mantener a Micha alejada de él. Volveré sobre el tema un poco más adelante, pero bueno, por hacer un punto y empezar en alguna parte, esto parecía lo adecuado.

Hay un momento en la novela que representa un punto de inflexión para Anna y para nosotros como lectores. Ella lleva tiempo pensando que a la mejor es Abel quien ha perpetrado los asesinatos (el de Rainer y el del trabajador social) y llega un punto donde se dice algo así:
«[...] Un disparo en la nuca y una dentellada mortal en el cuello. Todo coincide. ¿Y si estoy besando a un asesino? Y qué si es así. Un asesino, un lobo, un padre, un inocente, un cuentacuentos.»
Siempre que empieza a dudar de Abel, acaba aterrizando en su fase de cuentacuentos, porque es la que menos miedo da, pero también la que le cuenta toda la verdad escondida en los cuentos. Quizá porque es la parte de Abel que más se puede entender y con la que más puede empatizar. Sin embargo, el punto de inflexión es un punto de shock, cuando van a la playa a ver si el asesino del trabajador social vuelve sobre sus pasos y Anna empieza a intimar con él. Empieza. Lo remarco en negritas porque Anna volverá sobre ese punto una y mil veces, justificándose y justificándolo (a Abel), intentando encontrar una explicación a cosas que sencillamente no la requieren. Abel se niega, le advierte cosas. Sin embargo, hay un punto que Anna misma se da cuenta que hay algo que en Abel hace click. Y lo que empieza como una interacción totalmente normal acaba en una violación.


Odio las violaciones gratuitas. Esta no lo parece. No se siente así. te deja preguntándote por qué Abel es de esa manera o por qué le advirtió a Anna. Irremediablemente, te hace preguntarte si ha pasado antes. Antonia Michaelis, como autora, no dice ni pío. Se limita a dejarnos con los pelos de punta, porque jamás romantiza la violación y nos describe perfectamente el estado de Anna y lo hace de manera tan sutil que no suena vulgar nada. Es ya después que Anna vuelve sobre sus pasos una y otra vez que nos damos cuenta que hay algo mal en Anna, también. No sé que piense la autora. No sé si piense como Anna, me da igual. Porque Anna vuelve sobre sus pasos intentando explicarse e intentando perdonar lo imperdonable, explicar lo inexplicable. La voz de su conciencia que toma la forma de Gita le dice una y otra vez que ella no tiene ninguna culpa, que lo que hizo Abel es imperdonable. Y lo es. Sin embargo, pasamos un capítulo entero viendo a Anna explicándose e, indirectamente, culpándose. 

Hasta que lo perdona porque ella cree que lo ama. No se puede amar a nadie en tan poco tiempo, pero ella, como personaje, está convencida de que lo que está haciendo está bien. Es un tema delicado porque podría dar la sensación de que se está justificando una violación. Anna sin duda lo está haciendo (porque es algo que Abel ni siquiera se atreve a hacer) pero... ¿el libro? No parece. El libro lo pone así, tal cual, pero no nos dice que ese sea un comportamiento deseable, ni siquiera entre líneas. Ni siquiera lo justifica.

Después, mientras la historia sigue, acabamos descubriendo porque Abel merodea en los bares y parece que en realidad no vende droga o por qué estaba tan seguro de que Ranier era pederasta. Bertil es quien se encarga de destaparlo todo ante toda la escuela, cometiendo un error y descubriendo el secreto que Gita no dijo desde un principio para no lastima a Anna. Abel necesita dinero y si ni siquiera las drogas le dejan ese dinero, se dedica a apretar los dientes, o dicho vulgarmente: de prostituto con hombres mayores. No tiene nada que ver con su orientación sexual, simplemente lo hace porque necesita dinero y porque, como ya dije arriba, esta dispuesto a todo con tal de proteger a Micha y darle la vida que él no tuvo. 

A Anna se lo explica, al menos como lo entiende él. Anna es, finalmente la única a la que le cuenta la verdad. Ranier, el padre de Micha no parece haberle hecho daño a su madre. Pero a Abel sí lo encontró sólo y, como dice Abel, si Ranier nunca le hubiera hecho eso, años más tarde, a los quince, no se le habría ocurrido apretar los dientes. Cuando dije allá arriba que había historias de gente que había sufrido tragedias y se había sobrepuesto a ellas, pero que este libro no era uno de ellos, me refería a Abel, a Anna. Porque Abel convive directamente con sus demonios sin buscar ayuda y Anna hasta los perdona en la creencia de que está haciendo lo correcto. Los dos son tan contradictorios y tan humanos que llega un punto en que los entiendes, pero no quieres ser como ellos.  

Como dije arriba, Abel le dice toda la verdad a Anna, aunque sea en medio de cuentos. Le dice donde está su madre, que lleva semanas "de viaje": en el bosque donde florecen las anémonas. Y efectivamente, allí está Michelle y descubrimos por fin el principio del libro. Michelle está muerta porque se cortó las venas sin preocuparse por sus hijos y Abel sólo la mantiene viva para cobrar el dinero, para que no lo molesten demasiado. Cuando Anna descubre esa pequeña verdad, también se da cuenta de otra: dónde está el arma. Abel también se lo dijo. Finalmente, Abel es un asesino, un lobo, también ha violado a Anna y él mismo se ha sometido a vejaciones por mantener a Micha; es, además, un perfecto hermano mayor para Micha y un cuentacuentos. ¿Cómo es posible que sea la misma persona? Es una persona dañina, que acabará dañando todo a su alrededor y creo que incluso él lo sabe. Anna no, Anna siempre intenta separarlo. Al final le dice que elije quedarse no con el asesino, sino con el cuentacuentos, pero es imposible separarlos: son la misma persona. 

Creo que Abel lo sabía. Y por eso se dispara antes de que puedan ponerle la mano encima. La última frase que Anna le dirige es algo así como: "Lo amó hasta el final". Pero el amor no lo puede todo: lo que está jodido, jodido está y no se va a arreglar. El cuentacuentos es, finalmente, un libro con la moralidad turbia, que no se puede aceptar así como va y que, finalmente yo acabé analizando hasta la saciedad como se han dado ya cuenta en esta biblia. Muchas gracias por leer. Este libro me destrozó el kokoro.



Challenger Deep, Neal Shusterman | Reseña

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Sinopsis: Caden Bosch is on a ship that's headed for the deepest point on Earth: Challenger Deep, the southern part of the Marianas Trench.
Caden Bosch is a brilliant high school student whose friends are starting to notice his odd behavior.
Caden Bosch is designated the ship's artist in residence, to document the journey with images.
Caden Bosch pretends to join the school track team but spends his days walking for miles, absorbed by the thoughts in his head.
Caden Bosch is split between his allegiance to the captain and the allure of mutiny.
Caden Bosch is torn.
A captivating and powerful novel that lingers long beyond the last page, Challenger Deep is a heartfelt tour de force by one of today's most admired writers for teens.

No, no se lo están imaginando. Esa sinopsis es muy rara. Sin embargo, es justo lo que necesitan para empezar a leer un libro tan raro como este. El protagonista, Caden Bosch es quien nos narra la historia, hablándonos de tú a tú, confundiéndonos como le place. Es uno de esos libros con un narrador no confiable en el que tenemos qué descubrir qué está pasando nosotros solitos y entender al personaje (o intentarlo). ¿Por qué Caden Bosch está en una nave muy rara que se dirige al lugar más profundo de la tierra, Challenger Deep? Creo que si llegan al libro como llegué yo, esa va a ser su primera pregunta tras leer la sinopsis. Entre los capítulos en la nave, donde hay una cocina blanca, los marineros son muy extraños y el capitán hace preguntas extrañas, papeleo y parece que todo lo habla en acertijo. Lo mejor es ir leyendo sin pretensión alguna, para que la historia se descubra a sí misma y no estar buscando una explicación desde el primer momento. Este es un libro que es experto en estamparte las cosas en la cara en el momento en que menos te das cuenta.

Lo sé. Es un libro que puede ser difícil de empezar. Lo tenemos dividido en dos, la vida de Caden en la nave y su vida normal y en un principio, no podían ser más diferentes. En una todo parece demasiado fantástico o surrealista para ser verdad y en la otra todo parece, a simple vista, demasiado normal, demasiado rutinario, de esas vidas en casas de los suburbios, con un carro, un perro y vecinos entrometidos. No hay nada de fantástico en eso. Caden dibuja y, junto con sus dos mejores amigos, planea desarrollar un videojuego. Sin embargo, la palabra clave para unir los dos mundos es algo que ya dije: parece. En la primera escena en su casa, Caden le dice algo a su padre que es extraño. Bueno, al principio no. Le dice que cree que hay un chico en la escuela que lo quiere matar. Sus padres y todos los lectores llegamos a la misma conclusión, a la escuela a la que va Caden hay un bully que se dedica a atormentarlo. 

Pero no. 

Estamos equivocados. 

Lo raro del libro empieza cuando su padre empieza a interrogar a Caden y descubre que en realidad él y el otro chico, que todos creemos que es un bully, no han cruzado una palabra en la vida y no tienen ningún motivo para acusarlo de eso. ¿Caden está mintiendo? Y mientras tanto... ¿cómo llegó a la nave? Empezamos a preguntarnos como de esa escena a las otras escenas, las que ocurren en la nave, en el mar, hay una conexión. ¿A la mejor hay algo fantástico en el libro y no nos hemos dado cuenta? Pero la historia empieza a avanzar. Y mientras que unas preguntas se resuelven, las interrogantes empiezan a hacerse mayores cada vez. ¿Saben por qué creo que Challenger Deep es un buen libro? Porque no deja una sola pregunta sin responder. Y a pesar de eso, no es un libro que nos explique las cosas, sino que lo pone todo de una manera más sutil: en vez de explicarlo todo, nos lo muestra. Vemos de primera mano los pensamientos de Caden y a veces intenta explicarnos por qué es así o por qué sus padres son como son por medio de escenas que le son conocidas. No asume que le vamos a creer, no, nos muestra la evidencia. Pero, como ya dije, es un narrador muy poco confiable y las conclusiones las tenemos que sacar nosotros.

Neal Shusterman con su hijo, Brendan
Me gustaría contarles otras mil cosas de este libro pero no quiero. No es sólo por no hacer spoiler, sino porque parte de la magia del libro es descubrir el núcleo conforme uno va aavanzando, no que se lo cuenten a uno antes de empezar. Lo único que puedo decir es que no, Neal Shusterman no se volvió loco y sí, todo el libro tiene sentido. Están todos los cabos bien atados y el final es redondo y sobre todo, realista e inteligente. Los personajes que rodean a Caden en uno y otro mundo son personajes que son humanos, con todos sus errores, defectos, incoherencias, pero también muchas virtudes y razones para que uno como lector se encariñe con ellos. Lo raro de los diálogos tiene su propia explicación. No es que no sean naturales. Es que lo son. Pero tenemos que entender en qué contexto y por qué. 

Mi interés por esta novela nació cuando le arrebató el National Book Award en la categoría middle-grade a una obra tan genial como Nimona y a una obra tan profunda como The thing about jellyfish. ¿Qué podía tener este libro para ganarle a esos dos libros tan impresionantes? Después de leerla lo entendí. Y si quieren conocer un poco más a Neil Shusterman, uno de los escritores en los que más confío cuando quiero leer libros juveniles contemporáneos, les dejo este discurso que a la mejor les puede contar un poco más del libro... pero también, y tengan cuidado, puede contárselos entero.

Mis 10 personajes femenimos (literarios) favoritos

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Ya va a ser el día de "¿Por qué no hay un día del hombre?" (sí lo hay, también busca la equidad de género), o sea, el Día Internacional de la Mujer. Mañana. 8 de marzo. Que, como espero que mucha gente sepa, no es el día de festejar a "lo más bonito que Dios nos dio", o "la creadora de vida" o cualquier otra de esas cosas que sólo resalte los atributos físicos de la mujer o el hecho de que las mujeres son las que se embarazan. El Día Internacional de la mujer nació gracias a un terrible accidente. En marzo de 1908, marzo miles de obreras textiles marcharon en Nueva York al grito de "¡Pan y rosas!" demandando un mejor salario y mejores condiciones. Apenas un año siguiente, 140 obreras murieron calcinadas porque estaban encerradas en la fábrica donde trabajaban en condiciones inhumanas. El día internacional se proclamó en 1910. La ONU empezó a conmemorarlo en los años setentas y tiene como eje principal la igualdad de género.

Hoy no voy a dar lecciones de historia. Eso ya lo haré mañana, que planeo hablar del tema en otro blog. Hoy no. Hoy voy a contarles de personajes femeninos que me parecen admirales. No sólo los denominados "personajes fuertes", no, personajes de todos tipos, reconociendo la diversidad. Porque hay quien cree que los personajes para ser interesantes tienen que ser mujeres empoderadas, feministas, pero no demasiado, independientes en todo sentido... No es así. No somos un sólo modelo de mujer. Así que aquí traigo sólo diez, tan diferentes entre sí que las diez me gustaron. El top ten no está ordenado, en realidad, no me gusta más la última ni menos la primera o... bueno, ni siquiera son diez, estoy haciendo trampa.

1. Hermione Granger, Harry Potter


Me voy a la cama antes de que cualquiera de ustedes piense en otra idea de que nos maten, o peor; que nos expulsen.
Yo soy un poco Hermione. Solía tener las prioridades así de volteadas. Soy tan ñoña como ella, tengo ese pelo de estropajo chino y me encanta leer. Cuando era niña adoraba que en un libro saliera alguien con un cabello tan caótico como el mío y que fuera tan ñoña. Me hacía sentir que un día podría vivir grandes aventuras. No sé si las estoy viviendo, pero sí que amo lo que he hecho con mi vida y como he logrado que, escribiendo, mucha gente me escuche. ¿Cómo Hermione no me iba a gustar?

2.. Violetta R. Schmidt, Diablo Guardián



La locura es aquella enfermedad que sólo nos amenaza cuando ya sus uñas se han alojado en las entrañas, de modo que pelear contra ella es también despedazarnos el vientre, oprimirnos los pulmones, perder el miedo a la muerte como se pierden la inocencia y el amor
Nunca me voy a cansar de recomendar este libro. Nunca. Jamás. Aunque Violetta sea tan diferente a mí que nadie entiende por qué me gusta ese libro.

3. Nuria Fuentes, El disco del tiempo




Nuria Fuentes soy yo. Nuria Fuentes. 20 años. Estudiante de ingeniería en informática. Lo recuerdo como si fuera ayer, cuando tenía 12 años, Hi5 y curiosidad por todas las novelas del Barco de Vapor que mencionaran la cultura griega. Ya pasaron ocho años y cuando volví a abrir el libro me di cuenta de que me había convertido en alguien muy parecido a Nuria Fuentes. Así que después de tantos años sólo puedo recomendar el libro, decirles que no hay personaje como ella y que ha sido un gusto ser parte del misterio del Disco de Festos.

4. Todas las mujeres del ejército rojo, La guerra no tiene rostro de mujer



Aquí estoy haciendo la primera trampa del top ten. Porque para empezar estas mujeres no son personajes ficticios, son tan reales que algunas todavía viven (pocas). Son tan reales que Svetlana Alexiévich las buscó una a una para preguntarles su historia y dejarla plasmada para la eternidad en un libro.

5. Catherine Earnshaw, Cumbres Borrascosas


Tengo el mismo interés de casarme con Edgar Linton como de ir al cielo, y si mi hermano no hubiera humillado a Heathcliff de esa manera, no hubiera pensado en ello. Sería una humillación para mí casarme con Heathcliff; sin embargo él nunca sabrá cuanto le amo, y no es porque sea guapo, Nelly, sino porque hay más de mí en él que en mi misma. De lo que sea que nuestras almas estén hechas, la suya y la mía son lo mismo, y la de Linton es tan distinta como la luz de la luna del rayo y la helada del fuego.
Aquí no podía faltar mi clásico favorito, obviamente. Ni la mujer más caprichuda sobre la faz de la tierra. Catherine. Lista pero caprichuda, manipuladora como nadie. Uno de los personajes que más me han sorprendido en toda mi vida.

6. Fux, Reckless



Fux es una cambiaformas que prefiere que la piel de zorro le robe los años, al menos al principio. En el primer libro de Cornelia Funke prefiere vivir bajo la piel de zorro a enfrentarse al mundo como la mujer que es. Es un personaje que evoluciona tanto, sufre tanto, vive tanto, que siempre me ha parecido maravilloso.

7. Nuria Momfort, La sombra del viento


Hay peores cárceles que las palabras.
Hay cosas que no voy a olvidar del libro de Carlos Ruíz Zafón. Una de ellas es la cantidad tan brutal de adjetivos que tiene. La segunda es lo absurdo que me parecía el personaje de Clara. Lo tercero es lo mucho que me gustaban Nuria Momfort y Julian Carax.

8. Anaíd y Selene Tsnoulis, La guerra de las brujas



Esta es la segunda trampa que hago en el Top Ten porque estoy poniendo a dos mujeres, madre e hija, que no pueden ser más diferentes y más increíbles. Anaíd es tímida, pero poderosa y decidida; lo que le falta de impulsiva lo tiene Selene, que es espontánea, divertida y sobre todo, diferente.

9. La mujer que escribió la biblia, libro del mismo título



Esta mujer no tiene nombre. Sabemos que es fea, la mujer más fea sobre la faz de la tierra como nunca existió otra igual y que está casada con Salomón. También sabemos que tiene una virtud que no tiene nadie más: sabe leer y escribir. Y, por supuesto, que mientras escribe la biblia se pregunta por qué Dios y no Diosa, porque Dios es viejo y barbón y no joven. Y por supuesto, que en vez de expulsar a Adán y Eva del paraíso los dejó conocer el amor y causó un revuelo en la corte de Salomón. 

10. Clara del Valle, La casa de los espíritus


En casi todas las familias hay algún tonto o un loco, hijita —aseguró Clara [...]—. A veces no se ven porque los esconden, como si fuera una vergüenza. Los encierran en los cuartos más apartados, para que no los vean las visitas. Pero en realidad no hay de qué avergonzarse, ellos también son obra de Dios.

#BustleReads Challenge: Leer con diversidad

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Hace tiempo leí que alguien decía que los libros muchas veces forman parte de cómo pensamos y de quienes somos, aunque no nos definen por completo y si sólo leías autores que eran hombres blancos heterosexuales del primer mundo que estaban en la tumba o tenían un pie en ella, a lo mejor tenías que buscarte algo de variedad. No porque los hombres blancos heterosexuales del primer mundo que estaban en la tumba no fueran buenos (aguante Steinbeck y Kafka), sino porque los enfoques y las maneras de contar una historia nunca serían las mismas. Así que aunque yo siempre procuro darle una variedad brutal a mis lecturas, mi balanza, al menos, siempre e inclina más hacia un país que hacia otros. Sí. Estados Unidos. Darte cuenta de que sólo estás leyendo a Estadounidenses o que parece que sólo estás leyendo estadounidenses no ayuda mucho cuando lo que quieres es justamente lo contrario, así que vengo a animarlos a que se atrevan a hacer ese Challenge conmigo y a que lean con más diversidad. Lean a mujeres y a hombres de otras culturas, lean a las mujeres que lograron ser parte de los clásicos, lean escritores africanos, asiáticos y de medio oriente. Lean rusos, alemanes, polacos, italianos. Lean a gente que vive en islas. Lean latinoamericanos. Lean de todo. 

El Challenge que está propuesto en la página tiene sugerencias para cada una de sus veinte categorías, que, como verán, no son muchas (EJEM). Aun así, no importa si sólo leen un libro para una sola categoría de todo el reto. Lo importante es darle diversidad al asunto y leer cosas que, de otro modo, no leerías.


Categorías


1. Un libro escrito por una mujer de menos de 25 años.
2. Un libro de una historia no-occidental (refiriéndose a sudamérica, africa, asia...). Footnotes in Gaza, Joe Sacco.
3. Un libro de ensayos. Bad feminist, Roxane Gay,
4. Un libro sobre una cultura indígena.
5. Un libro antes de ver la película.
6. Un libro juvenil de un autor de color. Challenger Deep, Neal Shusterman.
7. Un libro que tenga lugar en el medio oriente.
8. Un libro sobre las mujeres en la guerra.
9. Una novela gráfica escrita por una mujer.
10. Un libro obre un inmigrante o refugiado en los Estados Unidos (aunque yo lo dejaré en general).
11. Lee un libro para niños en voz alta (aunque sea para ti).
12. Relee tu libro favorito de tu infancia.
13. Las memorias de una persona que se identifique como LGBTQIA.
14. Un libro post-apocalíptico escrito por una mujer.
15. Una novela feminista de ciencia ficción.
16. El primer libro de una serie que nunca has leído.
17. Un libro que tenga lugar en África, escrito por un autor africano.
18. Un libro traducido (al inglés).
19. Una colección de poesía contemporánea.
20. Un libro escrito por una mujer modernista.

La más densa tiniebla, Antonio Malpica | Fotoreseña

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"Deja de comprar libros infantiles, me salen más caros y no te duran nada"
―Mi mamá

Sinopsis: ¿Qué orilló a Karen a pararse en el borde del viejo pozo frente a la casa del señor Ander a pesar de todo lo que se decía de él? Que tenía pacto con el diablo… Que en realidad era un espectro… Que su casa conducía al inframundo… Cuando Karen resbaló al interior, supo que nadie la había visto caer y que jamás sería encontrada. Por eso lloró desconsoladamente. Entonces escuchó que alguien le hablaba desde la oscuridad. “Sólo tienes dos opciones: vivir o morir”, dijo la voz de ultratumba. A partir de ese momento, Karen será llevada a un inquietante mundo donde la tenebrosa imaginación del señor Ander le mostrará que el mayor terror de todos surge siempre del lugar menos pensado.

La más densa Tiniebla, como ya había dicho yo por allí, es sólo una excusa para reinventar algunos de los cuentos de Hans Christian Andersen y aquí aparece desde la princesa que sintió un chicharo debajo de doce colchones y el patito feo que en esta historia no es un patito. Y el libro es una excusa tan buena para reinventar cuentos clásicos que es un trabajo excepcional. La historia sigue a Karen y al señor Ander después de que Karen caiga al pozo que está cerca de la casa donde ella y su familia pasan las vacaciones. Cuando Karen cae, el señor Ander le dice que tiene la elección más fácil de su vida puesto que sólo tiene dos opciones: o vivir o morir.

La verdad es que este libro sería muy poco sin sus ilustraciones, las ilustraciones mantienen el ritmo, le dan un toque mucho más perverso a algunos cuentos y le dan al libro la fuerza que necesita. Me gustaría ponerles aquí todas las ilustraciones en foto pero tampoco se trata de dejarlos sin nada para cuando lo vayan a leer: las sorpresas tienen que prevalecer. Así que he seleccionado algunas para enseñárselas con la reseña  y que vean la preciosidad de libro que editó el Naranjo (no, no me patrocinan, ya me gustaría a mí).

Finalmente, he de decir que, pese a lo corto de esta reseña, recomiendo el libro a todos aquellos amantes de los cuentos clásicos que quieran una reinvención, todo hay que decirlo, mil veces retorcida, de estos. Muy recomendado, sobre todo si les gustan los libros infantiles. Y recuerden que los libros infantiles, aunque se llamen infantiles, no tienen edad.







Persona Normal, Benito Taibo | Reseña

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Sinopsis: Una grandiosa e increíble aventura para ser todo... excepto normal.
Tenía un par de padres divertidos y jóvenes, llenos de sueños y de planes. Pero a mis doce años, cinco meses, tres días y dos horas y cuarto, aproximadamente, me quedé sin ellos
Desde que el tío Paco se hizo cargo de él, Sebastián ha vivido aventuras increíbles: tuvo un encuentro inesperado con un enorme felino, conoció a uno de los últimos vampiros que viven en el DF; frente a su casa vio a un mítico personaje saltar de la góndola en la que viajaba, para rescatar a una joven de una inundación; consiguió un mapa estelar para un pobre extraterrestre perdido en la Tierra, sobrevivió el embate de un enorme monstruo marino, peleó al lado de los sioux para defender su territorio de los colonizadores? ¿Qué pasa con Sebastián? ¿Acaso no es una «persona normal»?


Este libro me dejó con una sola sensación. Cuando lo acabé (o más, bien, cuando descubrí que más o menos las últimas quince páginas o más eran sólo una nota que hablaba de libros que ya conocía) y lo cerré tuve ganas de agarrar y con toda mi paciencia (o sea, bastante poca) ir con Benito Taibo, escritor al que aprecio bastante, estampárselo en la cara y decirle "no mames". Había escuchado cosas buenas de él, que era un libro increíble para los amantes de la lectura y que te cambiaba la vida. Primero que nada voy a ir con la gente que me dijo que era un libro que cambiaba la vida para pedirles el dinero que me gasté en él porque juro que yo le tenía buena fe al libro. Más que buena, ¡buenísima!

Benito Taibo
¿Exactamente cuál es mi problema con este libro si a casi todo el mundo le ha gustado? Pues... ¿cuál no es mi problema con este libro? No sé por donde empezar. Hay muchos. Pero bueno, como por algo tengo que empezar, empezaré por... ¡la voz narrativa!

Cuando empieza el libro, Sebastián tiene doce años. Y nos está narrando lo que le va pasando a lo largo de casi toda su adolescencia. Bueno, un libro con un narrador en primera persona tiene que hacerte creer que efectivamente la voz del narrador es la del personaje y que suene natural en tu cabeza. Sebastián a los doce años es Benito Taibo en el presente. No te lo crees que sea un adolescente... bueno, casi adolescente, ni porque se te aparezca la Virgen de Guadalupe a jurártelo. No me vale la excusa de que Sebastián es muy maduro para su edad, no; maduro podrá ser, pero doce años sigue teniendo

El libro es un libro que continuamente habla de libros. Aunque en vez de darle variedad se va por el canon de la literatura occidental, que sinceramente se vuelve muy aburrido después de un rato. Justo lo dije en mis entradas pasadas: leer a hombres blancos heterosexuales (en su mayoría) que ya están en la tumba (en su mayoría) no tiene nada de malo, pero hay más peces en el mar y libros en la tierra. Además que es un libro que tiende a alimentar el ego de la gente que se cree superior por leer y la única edad a la que eso está bien es en la adolescencia. Pero no, en serio, leer no hace a nadie más especial o más inteligente. Es algo maravilloso y te enseña muchas cosas, pero de ahí a sentirte bastante superior como Sebastián a sus compañeros de secundaria hay un trecho. Y de ahí a pintarlo como una actitud deseable o correcta hay otro. 


No sé si les he dicho porque John Green me parece un escritor pésimo, pero si no lo he dicho lo digo ahora: es incapaz de ser imparcial, en cada página aparece, saludándote desde una esquina y dándote su opinión sobre casi todo. Algo parecido hace Benito Taibo, que parece que en todos los capítulos quiere darte una lección moral cuando realmente es algo que no le corresponde al libro: ni a este ni a ninguno. El trabajo de los libros no es darte las conclusiones, es dejarte saltar a ellas como puedas. Pero bueno, a la mejor hay a quien le gusta esto, yo no juzgo. El problema de este libro es que no tienen ninguna clase de núcleo, sus escenas no tienen otro propósito más que el que darte una lección por vez, así que la historia avanza a trompicones sin tener interés en llegar a alguna clase de final o tener un hilo conductor que vaya a alguna parte. 

Por lo demás, es un libro que está muy bien escrito, pero que esté bien escrito no es el mérito de ningún libro: se supone que todos lo están. Hilar las palabras en oraciones que suenen podrá ser complicado, pero más complicado es unirlas para contar una historia con algo de profundidad, con un núcleo bien definido y para dejarte saltar a las conclusiones tú solito. En fin, como conclusión, sólo se me ocurre decir que este libro sí me decepcionó bastante y aunque los personajes en su mayoría son agradables, el libro no le ayuda mucho. 

Las (pobres y olvidadas) comillas angulares

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Hace tiempo escribí del uso de la raya (o guion largo) en los diálogos, así que después de que me preguntaran y que me diera cuenta de que las comillas angulares están cayendo completamente en el olvido, vengo a hablar de ellas y de sus usos. Mi fuente, como siempre, es la Ortografía 2010 de la RAE (apoyada por las 2005) y no soy lingüista, ni correctora de estilo, así que me veo en la necesidad de poner la siguiente advertencia.

ADVERTENCIA PARA NAVEGANTES: No soy una erudita de la lengua española, sólo una ñoña que revisó toda la Ortografía de la RAE para aprender a puntuar. Soy humana y, como tal, tengo errores.

Ahora sí... ¡empecemos!


Las comillas son un símbolo doble y se usan diferentes en español: las comillas angulares, también llamadas latinas o españolas (y son estas: «», nada de signos de mayor y menor que: << >>), las inglesas, a.k.a las del teclado ("") y las comillas simples. La RAE recomienda por activa y por pasiva el uso de las comillas angulares en primera instancia en textos impresos «», recomendando dejar las otras para cuando se quiera entrecomillar un texto dentro de un texto que ya va entrecomillado, por ejemplo, algo así: 
«Antonio fue el que me dijo: "Vaya 'cacharro' se ha comprado Julian"».

Se usan como jerarquía: primero angulares, luego inglesas, luego simples. Todo muy sencillo, al parecer. Entonces ¿por qué hay un montón de gente que no las sabe usar? Bueno, es que no están en el teclado normal que usamos, tampoco en las máquinas de escribir. De hecho, si la gente conoce su existencia es por los libros y porque casi siempre (salgo alguna edición rarita hecha a la inglesa a.k.a las ediciones del Fondo de Cultura Económica) se usan para delimitar los pensamientos de los personajes y todo texto que necesite ir entrecomillado. ¿Cómo las obtenemos en el teclado? 

En Mac (y probablemente Linux):
  • Comilla angular de apertura («): Shift + Alt + { 
  • Comilla angular de cierre (»): Shift + Alt + }
En Windows: 
  • Comilla angular de apertura («): Alt + 174
  • Comilla angular de cierre (»): Alt + 0171
Ahora sí, ya que saben como demonios obtenerlas (y si no funciona, hagan uso del copy&paste o la técnica que se les ocurra) vamos a ver su uso en las narraciones específicamente, no me meteré con citas ni nada por el estilo. Primero, las comillas siempre siempre van pegadas al primer caracter de la oración y al último. Algo así. El siguiente caracter después de las comillas latinas va separado, a menos de que sea un signo de puntuación.
Ejemplo:
«Todo fue un desastre» fue el veredicto.
«Todo fue un desastre», pensó Juan.
Así NO:
«Todo fue un desastre»fue el veredicto.
« Todo fue un desastre » fue el veredicto.
«Todo fue un desastre» , pensó Juan.
Para marcar los pensamientos hacemos casi lo mismo que en los diálogos. De hecho, yo he visto un par de maneras de hacerlo. Que son así:
«Todo fue un desastre», pensó Juan; «todo nos salió mal».
«Todo fue un desastre ―pensó Juan―; todo nos salió mal».
Ahora las voy a explicar las dos para que no se confundan, pero según mi entendimiento (y el de los correctores de estilo de la mayoría de las novelas que conozco) las dos son correctas. En la primera, se usan las comillas en todas partes, con las reglas que ya vimos: pegadas a las oraciones de los pensamientos, con los signos de puntuación después de ellas (ponerlos antes es un error, así se ponen en inglés, nada más) o pegados a la acotación del narrador. En la segunda, en la acotación del narrador en medio del pensamiento, se usan guiones largos (o rayas) como en los diálogos normales. En este caso, igual que en los diálogos, las rayas van pegadas a la acotación del narrador y los signos de puntuación van después.

Pueden usar el modo que deseen, pero... ¡POR FAVOR!, usen la misma forma durante todo el texto. No se ve ni bien, ni elegante, ni estético que estén saltando de una a otra. En realidad este era un tutorial bastante pequeño porque no abarqué más usos de las comillas angulares, pero ya saben, si tienen dudas (y yo sé responderlas) con mucho gusto las respondo aquí abajo. Y si quieren que hable más de puntuación, también se aceptan ideas aquí debajo.


Borderlands/La Frontera, Gloria E. Anzaldúa | Reseña

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Sinopsis: First published in 1987, "Borderlands" has become a classic in Chicano border studies, feminist theory, gay and lesbian studies, and cultural studies. Anzaldua, a Chicana native of Texas, explores in prose and poetry the murky, precarious existence of those living on the frontier between cultures and languages. Writing in a lyrical mixture of Spanish and English that is her unique heritage, she meditates on the condition of Chicanos in Anglo culture, women in Hispanic culture, and lesbians in the straight world. Her essays and poems range over broad territory, moving from the plight of undocumented migrant workers to memories of her grandmother, from Aztec religion to the agony of writing. Anzaldua is a rebellious and willful talent who recognizes that life on the border,"life in the shadows,"is vital territory for both literature and civilization. Venting her anger on all oppressors of people who are culturally or sexually different, the author has produced a powerful document that belongs in all collections with emphasis on Hispanic American or feminist issues.

Desde que leí a Sandra Cisneros (Caramelo y La casa en Mango Street) he estado buscando desesperadamente literatura chicana. No mexicana. No, chicana, escrita en inglés y publicada en inglés por inmigrantes en Estados Unidos. Preferentemente de chicanos, mexicanos, pero cualquier inmigrante está bien o hijos de migrantes, me da exactamente igual. Gloria E. Anzaldúa es Texana de sexta generación, dice el libro; su familia ya estaba allí cuando Texas era aun territorio mexicano, antes de que declarara su independencia en uno de los gobiernos de Santa Ana, antes de que se anexara a Estados Unidos y los blancos arrasaron con las tierras de los mexicanos, relegándolos para siempre. Nació siendo mexicana y americana a la vez, de una cultura que ya no era la mexicana que habían conocido sus antepasados, pero que tampoco es estadounidense. Ella misma lo dice en las primeras páginas del libro:
This land was Mexican once,
was Indian always
and is.
And will be again. [...]
The U.S-Mexican border es una herida abierta where the Third World grates against the first and bleeds. And before a scab forms it hemorrhages again, the lifeblood of two worlds merging to form a third country — a border culture.
Gloria E. Anzaldúa
Borderlands/La frontera es un libro de identidad, la pérdida de ella y su búsqueda. Está dividido en varias partes, pero al menos yo lo dividí en mi cabeza en dos grandes pedazos. La primera mitad, más o menos, son ensayos. Todo el resto son poemas de Gloria E. Anzaldúa. El libro entero está escrito en spanglish y hay muchas cosas que no tienen traducción (aunque pequeños pedazos en los poemas sí que tienen una traducción al final) lo que da una pista al público al que va dirigido: a los mismos chicanos y mexicanos. De todo el libro, prefiero a la Gloria ensayista y, de los poemas, prefiero a la Gloria que los escribe en español. Sin embargo, tengo que decir que a pesar de los altos y bajos del libro, es magnífico. 

¿Por dónde empiezo? Gloria se usa a sí misma (y a sus conocidos) para analizar la cultura de la frontera, la de Texas. De como no son ni mexicanos ni americanos. De como su español tiene acento y su inglés también y toda su vida han escondido uno u otro según con quien hablan o a quien se dirigen. Habla de como sus maestros los castigaban por ser demasiado mexicanos: hablar español. De como su madre sufría cada que hablaba inglés como inmigrante porque decía que nunca encontraría trabajo y de cómo se ha visto discriminada por los mismos mexicanos al usar su acento chicano. 

Coatlicue
Anzaldúa dice cómo los mexicanos son más espirituales que los estadounidenses, cosa en la que sinceramente no estoy tan de acuerdo. Creo que cada quien es diferente y es un mundo y nosotros como cultura no nos escapamos de eso. Pero aprovecha esa espiritualidad para analizar la identidad que llevamos los mexicanos, con la influencia de Coatlicue, la madre tierra de los Aztecas que dio a luz a Huitzilopochtli (el dios de la guerra) después de embarazarse con una pluma, de la Malinche, una de las esclavas que le regalaron los tlaxcaltecas a Hernán Cortés y que fue una pieza importante en la conquista y, finalmente, como mexicanos, de la Virgen de Guadalupe, la otra cara de Tonantzin, un título azteca que significa Nuesstra Madre Verdadera y que se le daba principalmente a Coatlicue y a Cihuacoatl (la Mujer Serpiente). Quizá me sentí identificada porque así atea como soy he oído a la gente renegar de la Malinche toda la vida y he presenciado la veneración que se le tiene a la virgen de Guadalupe.

Es una lástima que siento que Anzaldúa teme dar conclusiones certeras, pero me gusta el análisis que hace. Usa todo para analizar su propia cultura, a la que llama "a border culture" (una cultura de la frontera) y a situarse a sí misma en ella, como mexicana, lesbiana, como chicana, como estadounidense. Lo mismo hace con su lengua y sus raíces. Más arriba ya dije que Gloria menciona en cierta parte del libro que su mamá se horrorizaba al oírla hablar inglés con acento mexicano porque decía que le sería imposible conseguir trabajo. Tiene una cultura que siempre se ve forzada a caminar entre dos idiomas y ninguno es de ellos: el inglés lo hablan con acento, el español también. 
Deslenguadas. Somos las del español deficiente. We are your linguistic nightmare, your linguistic aberration, your linguistic mestisaje, the subject of your burla. Because we speak with tongues of fire we are culturally crucified. Racially, culturally and linguistically somos huérfanos —we speak an orphan tongue
La cultura, la lengua y la identidad son una gran parte de lo que escribe y presenta Anzaldúa en este libro. Es casi todo el libro, aunque también aprovecha para hablar de ella misma y su escritura y de su sorpresa la primera vez que vio a un Chicano publicado y se convenció de que ella también podía lograrlo. Sus poemas siguen la misma línea y ocupan poco más de la mitad del libro. Pero si no les gustara la poesía y aun así les interesara el tema del libro, les aseguro que el libro lo vale todo sólo por sus ensayos y sus análisis. 

Desfile del Cinco de Mayo en Houston, Texas. 2013.
Anzaldúa, sin glorificar su cultura, también hace notar el machismo existente entre los mexicanos y lo que les han enseñado: "calladita te ves más bonita". También, ¡por fin!, hace notar que la palabra machismo viene del inglés, al menos para ellos, y que para sus padres, ser macho no era algo malo: significaba ser fuerte para poder proteger a sus esposas y a sus hijas. La connotación negativa llega después, con el feminismo y los movimientos de liberación. Deja claro que las mujeres ya no quieren ser protegidas, sino andar a la par de los hombres

Libro recomendado, sobre todo para los mexicanos. lo leí en inglés (desconozco su el libro está traducido), pero el libro entero está en spanglish: tiene expresiones mexicanas (norteñas en su mayoría) en todas y cada una de las páginas, recordándonos que, antes que cualquier otra cosa, Gloria es Chicana. Muy recomendado. Aquí abajo dejo la versión de Ensable Youak de La llorona, la canción que da comienzo a la segunda parte del libro.

Como (no) escribir una novela young adult

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Ya era tiempo de volver a publicar mis recetas para el éxito inmediato escribiendo libros (en general malos). Después de la novela fantástica, las distopías y las novelas románticas probablemente ya están nadando en dinero si intentaron algunas de mis recetas mágicas. Si no son ricos a estas alturas es porque no quieren o porque su dignidad los cagó a palos (o porque no escriben en inglés, eso también puede ser). Así que si quieren ser aun más ricos y famoso o ninguna de mis anteriores recetas para el éxito inmediato los convenció, vengo a dejar una más. ¡Novelas Young Adult! Un género que últimamente es cada día más famoso y que seguramente los dejará en la fama más absoluta y total. Como siempre, todo esto es sátira. No tendría que decirlo, pero hay gente con el sentido del humor en el trasero. 


1. Primero necesitas un protagonista que será también el narrador. Si no quieres escribir en primera persona porque esos narradores están muy vistos desde Stephenie Meyer y tu estás escribiendo un libro malo, pero nunca tan malo como Crepúsculo, pues que el narrador sea en tercera persona, pero siempre desde el punto de vista de tu protagonista. Chico o chica, no importa. Sólo recuerda que tienen que cumplir una serie de características elementales: tener pocos amigos y no ser muy populares (bonus points si desprecian chicos populares), ser "muy maduros" para su edad, y algún hobby extraño, como por ejemplo recordar las últimas palabras que dijo gente famosa o hacer anagramas todo el tiempo. Bonus points si además de eso se califican como raros y son extremadamente tímidos. Bonus points si les gusta el rock de los setentas.

2. Vas a necesitar más elenco, claro que sí. Para empezar, un amigo o par de amigos tan raros como tu protagonista. Que se hagan llamar por apodos extraños, sean de alguna minoría, sean gays o transexuales. Mejor si son los dos últimos, así te las puedes dar de escritor diverso e inclusivo, no importa que la personalidad esté basada completamente en su raza, su género o su orientación sexual y que eso esté mal. Tú eres diverso e inclusivo, punto, no importa que parezca que lo estás haciendo por cubrir una absurda cuota. Para el resto del elenco puedes tener personajes grises que a nadie le importa y un par de padres que no digan ni una línea o digan una sola durante toda la novela. ¿Qué hacen? Nadie sabe. Mejor si están de viaje, así nadie molesta a tu protagonista.


3. Este es quizá el punto más importante así que pon mucha atención: necesitas un interés amoroso. Sí. Es necesario. Chico o chica, según corresponda al sexo y orientación sexual de tu protagonista. También necesita cubrir unas características muy puntuales: ser raro. Esa es la principal, necesita decir cosas enigmáticas, guardar un secreto, tener una familia disfuncional. Quizá basta con que sea un chico que es incapaz de leer un libro o una chica que se aparece a las dos de la mañana en tu recámara para que le ayudes con algo. Que sé yo, escribe lo que quieras. También debe ser "más maduro" para su edad y filosofar cada dos minutos, incluso durante una cena informar en los tacos. Se ganará más a tu público si dice cosas profundas sobre la muerte, el olvido, el destino o el azar, no importa lo metidas con calzador que estén.

4. Demonios, ya vas muy avanzado en la planeación y todavía no tienes trama. Bueno, pues yo tengo una buena noticia: ¡la trama no es necesaria! Lo único que tienes que hacer es poner a tus protagonistas a hacer cosas, hablar de cosas profundas y a veces, cuando te sientas inspirado, darles pequeños conflictos y problemas. ¿Que tu novela tenga un núcleo? No, no es necesario. Demasiado complejo.


5. Lo que sí tiene que tener tu novela es una relación amorosa bien desarrollada. A los adolescentes no les gustan esas tonterías del insta-love, así que procura que se vea realista (lo más realista que sea posible mientras tus protagonistas hablan de la muerte, el olvido, el destino o el azar) y que sea una relación sana, donde no haya maltrato. También procura desaparecer los problemas de los dos protagonistas cuando se confiesen su amor, como si el amor lo solucionara todo. Bonus points si escribes una escena donde se acuesten o lo insinúen.

6. Deja un final abierto, pero no tan abierto. En general que parezca satisfactorio, porque si no tienes una trama muy fuerte, sólo a personajes haciendo cosas en lugares, no lograrás conseguir un descenlace muy cerrado. Cierra con una reflexión del o la protagonista o algo así mientras se prepara para ir a una cita con su amor y ve todos sus problemas literalmente desaparecidos. Queda bien, es tierno, y tus lectores te lo agradecerán. Si no quieres seguir ese modelo, siempre puedes quitar lo de la cita, pero dejar lo demás. 

7. Publica y espera el dinero. No te preocupes: llegará. También recuerda que en algunos casos tu dignidad puede venir a cagarte a palos, pero eso es completamente normal



Día internacional de la poesía (ft. mini-reseñas)

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¡Feliz día mundial de la poesía! A los mexicanos, también, feliz puente, porque hoy hace muchos, muchísimos años, no se exactamente cuantos, nació Benito Juárez. Hoy vengo a hablar de ese género que, después de los libros de autoayuda, tiene menos popularidad (me estoy inventando el dato según un estudio imaginario que hice en la universidad patito de mi casa, por si quieren saber de donde me lo he sacado) que nada. Tipos de poesía hay muchos, pero la gente siempre suele huir de ella. De hecho, yo tenía una sección en el blog dedicada a la poesía (Hablemos de poesía) que tuve que clausurar y dejar así, cerrada, por simple y sencilla falta de interés


Hoy vengo de nuevo a jurarles que la poesía no es tan mala, que no es malo leerla y no entenderla, porque la poesía no se entiende casi nunca a la primera. Decirles que se lee rápido, para ver si al menos consigo meterles algún poema en los ojos. Contarles que hay muchos tipos de poesía: hay poesía que rima y poesía que no, hay poesía para niños, para grandes. Hay sonetos, como los de Sor Juana. Hay poesía confesional, como la de Sylvia Plath. Hay poesía antigua y contemporánea. Hay cantares antiguos y poesía más nueva. Hay poesía hasta de la era pre hispánica, porque el trabajo de Nezahualcóyotl  y otros poetas Aztecas sobrevive hasta nuestros días. Hay poesía para elegir, pues y, aunque toda se llame poesía, ninguna se parece.

Vengo a hablarles de cuatro libros de poesía que me gustan bastante y que, por supuesto, recomiendo. Les dejo unas mini-reseñas, bastante pequeñas, para ver si por algún milagro del Dios en el que no creo y de Quetzalcoátl (en el que tampoco creo, pero al menos era una serpiente emplumada) alguien se interesa en ellos. 

Veinte poemas de amor y una canción desesperada, Pablo Neruda


Siempre hablo de ellos porque fueron los primeros poemas que fui capaz de leer enteros sin dormirme. Lo sé, no es la mejor frase para empezar una pequeña reseña sobre poemas. La mayoría conoce el poema 20 y ese poema que comienza más o menos así "me gustas cuando callas porque estás como ausente" (un verso que no me encanta y no me parece lo más romántico del mundo), sin embargo, los otros dieciocho y especialmente la Canción Desesperada suelen ser rápidamente olvidados. Sin embargo, debo decir que cada uno de los veinte poemas de amor y la canción desesperada valen la pena, si quiera por conocer a Pablo Neruda y para que dejen de dedicar ese "me gustas cuanta callas porque estás como ausente" a todas horas y en todas sus relaciones.

Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
El río anuda al mar su lamento obstinado.
Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, oh abandonado!
Neruda fue el único poeta que conocí o sea mi favorito a falta de otros durante mucho tiempo, hasta que Benedetti y Sabines me cayeron en la cara demostrandome que los poemas no necesitaban ser sólo de amor (y que podían hablar de la censura, de la muerte y hasta ser graciosos). Sin embargo, por todo lo que fue, Neruda siempre estará presente en mi corazoncito.

Chicana Falsa, Michelle Serros


Este fue un descubrimiento nuevo y sin duda más contemporáneo. Llevo tiempo buscando literatura chicana, sobre todo si es literatura que ahonde en la identidad de los chicanos (mexicanos nacidos en Estados Unidos) y Michelle Serros, que murió hace unos años, expresa perfectamente su identidad y sus problemas en este libro de poemas. Habla de los estereotipos con los que ha vivido y ha sido marcada toda la vida, de cómo pocos la apoyaron cuando quiso ser escritora, de cómo su familia es muy complicada, porque su tía fulanita no le habla a menganita, pero igual las dos van a las fiestas y a los funerales así que hay que evitar que se sienten a menos de veinte asientos de distancia. Y de los mejores poemas es un poema corto donde cuenta como la confundieron con una mujer de limpieza en un gimnasio y tuvo que enseñar el carnet para que le creyeran.

Estos poemas son poemas muy sencillos y no necesitas drogarte para entenderlos, como a Baudelaire, por ejemplo. Lo digo precisamente porque me han dicho varias veces que no leen poesía porque "no la entiendan". Y con este libro, que además es pequeñito, les aseguro, no van a tener ese pequeño problema.

Recuento de Poemas, Jaime Sabines


Sabines es mi referente en poesía. No creo que deje de serlo pronto. El día que lo oí declamar en Youtube No es que muera de amor, muero de ti, amor, de amor de ti... etcétera etcétera, se volvió mi favorito. Podría decir que se me cayeron las bragas, pero eso suena con mucha falta clase y los mexicanos no decimos bragas jamás. Pero sí. Sabines se volvió mi favorito de favoritos, mi referente en poesía, el poeta del que me aprendí la mitad de los poemas para ser la ñoña que los puede decir (que no declamar) en casi cualquier parte. Podría escribir No es que muera de amor de memoria y nada más se me olvidaría donde van las comas. Más o menos así me enamoré de la poesía de Sabines.

Después de años de leerlo y releerlo, alguien me regaló su recuento de poemas, un libro donde junta y hace una selección de casi toda su obra. Desde los poemas más cortos hasta los más largos, los más famosos y los menos. Los más graciosos y los más trágicos. Así que si se preguntan porqué siempre recomiendo a Sabines ya tienen la respuesta. Él es mi favorito.

No es que muera de amor, muero de ti.
Muero de ti, amor, de amor de ti,
de urgencia mía de mi piel de ti,
de mi alma, de ti y de mi boca
y del insoportable que yo soy sin ti.

Soy vertical pero preferiría ser horizontal, Sylvia Plath


Este es el penúltimo libro de poesía que he leído últimamente. Tenía una cita pendiente con Sylvia Plath. Alguien me dijo que después de leerla tendría que consolarme con nutella o cortarme las venas y no se equivocaba. Todo en la poesía de Plath es trágico. Sylvia Plath se suicidó el 11 de enero de 1963, asfixiándose con gas. Ted Hughes, con quien estuvo casada se convirtió, a su muerte, en el editor de su legado. La poesía de Plath es poesía confesional y fue una de las poetas originales en el movimiento. Cuando lees sus poemas, no hay duda de por qué. El primero de esta pequeña recopilación, que habla de la maternidad, es el más obvio. Plath no la retrata como un milagro, sino por momentos lo hace como una carga, una deformación, algo que no todos desean. La recomiendo al último porque creo que es una mujer a la que hay que leer en inglés (aunque yo no lo he hecho). De hecho, siempre he sentido que al traducir la poesía, esta pierde algo para siempre. Las traducciones nunca serán iguales

La recomiendo porque me impresionó mucho. Me dejó un sabor de boca extraño, que pocos poemas me habían dejado antes. Así que en este intento de mini-reseña, les recomiendo especialmente la poesía de Plath. 

A long way gone, Ishamel Beah | Reseña

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My new friends have begun to suspect I haven't told them the full story of my life.
"Why did you leave Sierra Leone?"
"Because there is a war."
"You mean, you saw people running around with guns and shooting each other?"
"Yes, all the time."
"Cool."
I smile a little.
"You should tell us about it sometime."
"Yes, sometime."
Traducción (made in Nea)
Mis niegos amigos han empezado a sospechar que no les que contado la historia completa de mi vida.
―¿Por qué dejaste Sierra Leona?
―Porque hay una guerra. 
―Te refieres... ¿has visto personas corriendo con armas y disparándose los unos a los otros?
―Sí, todo el tiempo.
―Cool.
Sonrío un poquito.
―Deberías contarnos acerca de eso algún día. 
―Sí, algún día.
Sinopsis: This is how wars are fought now: by children, hopped-up on drugs and wielding AK-47s. Children have become soldiers of choice. In the more than fifty conflicts going on worldwide, it is estimated that there are some 300,000 child soldiers. Ishmael Beah used to be one of them.
What is war like through the eyes of a child soldier? How does one become a killer? How does one stop? Child soldiers have been profiled by journalists, and novelists have struggled to imagine their lives. But until now, there has not been a first-person account from someone who came through this hell and survived.
In A Long Way Gone, Beah, now twenty-five years old, tells a riveting story: how at the age of twelve, he fled attacking rebels and wandered a land rendered unrecognizable by violence. By thirteen, he'd been picked up by the government army, and Beah, at heart a gentle boy, found that he was capable of truly terrible acts.
This is a rare and mesmerizing account, told with real literary force and heartbreaking honesty.

Ishmael Beah
Quiero contarles algo sobre Sierra Leona. La mayoría habrá oído del país porque es un país africano en donde hubo una guerra muy sangrienta en donde peleaban niños armados con AK-47s hasta arriba de drogas, comandados por gente que les decía que era la única manera de vengar a sus familias o a sus muertos. O la mayoría sabrá que existe un país que se llama Sierra Leona porque allí hay diamantes. O ni eso. La verdad es que solemos englobar a Africa como un sólo país casi siempre, o a sus habitantes como un sólo tipo de personas.

Sierra Leona es un país relativamente joven. Obtuvo su independencia en 1961, como muchos otros países africanos. En 1992, después de años de inestabilidad política y descontento de los tenme, que no veían con buenos ojos a los criollos en el gobierno, hubo un golpe de estado y empezó la guerra. El Frente Unido Revolucionario, compuesto principalmente por personas de los grupos étnicos de los temnés, se levantó en armas y todo el país entró en caos. Ishamel Beah cuenta la historia, pero no se detiene mucho en ella porque después de todo la guerra es la guerra, dan igual los motivos que hayan llegado a ella. La gente muere, se cometen atrocidades y, si hablamos de África especialmente, los niños acaban cargando armas y luchando como soldados.


Ese fue el destino de Ishamel Beah, también. Tira de sus recuerdos y escribe. Recuerda lo que vio y como lo vio. Recuerda el miedo de la gente, a su familia, de la que se vio separado. A su hermano, con el que sobrevivió bastante tiempo hasta que los rebeldes los obligaron a separarse. Los amigos que encontró mientras estuvo solo y que después se unieron con él a las fuerzas rebeldes. Los muertos ocurren página tras página sin que Ishmael pueda ponerles nombre, pero si les pone cara y sufrimiento. Las muertes se vuelven algo personal en el libro porque sabes que ocurrieron en alguna parte de verdad y alguien las guardó para siempre en sus recuerdos sin poder olvidarlas para poder vertirlas en este libro.

Ishmael habló en un congreso de la ONU sobre los niños soldados y cómo no eran un caso perdido. Se usó de ejemplo para demostrar que podían ser rehabilitados. En su libro se puede notar la frustración que sintió (quizá aun siente) cuando en todas las aldeas le daban la espalda solo por ser un niño. Como no importaba que no tuviera un arma en las manos, de todos modos lo consideraban peligroso. No sé él, pero para mí eso sólo me llevó a pensar que, poco a poco, sin darle opciones, lo empujaron hasta las fueras rebeldes que se aprovecharon de la desaparición de su familia y de su hermano para asegurarle que podría vengarlos y lo convirtieron en un soldado. La historia es desgarradora. Va desde que la guerra tocó personalmente a la puerta de su casa hasta su huída de Sierra Leona, cuando la guerra volvió a estallar después de que él hubiera dejado un centro de rehabilitación. Decidió que era suficiente cuando vio morir a su tío y supo que no podía quedarse allí o iba a morir. 

Freetown
La estructura del libro cambia conforme el libro avanza. Ishmael Beah empieza a contar la historia cronologicamente, como la recuerda. Nos adelanta algunas cosas y algunas escenas, pero la historia va cronológica más o menos hasta su tiempo como niño soldado, donde parece que hace un salto abrupto y va intercalando las escenas como las va recordando. Es el tiempo más confuso, quizá porque abusó de las drogas para poder soportar la guerra, la pelea y sobreponerse a lo que estaba haciendo y lo que los demás estaban haciendo. A long way gone es un libro difícil precisamente porque sabes qué es una historia real y que los que van a sufrir no son los que empezaron la guerra. Ellos estaban hasta arriba y probablemente sólo murieron hasta el final o fueron enjuiciados (aunque después del segundo conflicto a algunos se les garantizó el perdón); los que más sufrieron la guerra fueron los campesinos, los pobres, las mujeres, los niños. 

Este es, al final del día, un libro necesario. Porque por más que nos hablen de los conflictos africanos y lo mucho que sufren los niños en las filas de los ejércitos, nunca sabremos exactamente lo que significa ser un niño soldado. Ishamel Beah sí lo sabe. Él estuvo allí y consiguió escapar. Definitivamente recomiendo el libro porque, libros como este, hay pocos.

Las comas son amigas, no comida (I)

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Me decidí a hacer esta serie de entradas porque todo el mundo me preguntaba por comas. Al parecer si corriges autores en Twitter con fotos de tu kindle haciendo notar que ni el autor, ni el corrector de estilo, ni el traductor tienen idea de como poner las comas, el mundo asume que eres una persona que debe saber ponerlas (buena deducción, pequeños Holmes). Así que con toda la paciencia del, mundo me pondré a compilar todos los usos de las comas que están en la RAE, for dummies y con explicaciones varias. Sólo les voy a recordar una cosa: un texto es 10% ortografía, redacción y buena gramática... y el otro 90% es contar una buena historia, hacer buen uso de las ideas, ordenar bien tus ideas y saber exponer tus puntos. ¡Nunca lo olviden!

ADVERTENCIA PARA NAVEGANTES (por si todavía es necesaria): No soy una erudita de la lengua española, sólo una ñoña que revisó toda la Ortografía de la RAE para aprender a puntuar. Soy humana y, como tal, tengo errores. Mis fuentes son la Ortografía 2010 y 2005 de la RAE. Pueden consultar la 2005 aquí.

Así que ¡empecemos! 


¿Que son las comas? Las comas son unos bellos signos de puntuación (,) que indican que existe una breve pausa dentro del texto; así, al leer, no nos quedamos sin aire o hacemos pausas innecesarias. Como quien dice, las comas son amigas, no comida, ¡no olvides ponerlas! La cosa está en cómo saber dónde ponerlas. No se vale ponerlas en todas partes porque vamos a, hacer, más, pausas. Creo que con esa aberración que acabo de poner se entendió mi punto. Tampoco se vale no ponerlas porque nos vamos a quedar sin aire intentando leer en voz alta y hasta nuestro cerebro se va a cansar. 

Así que vamos a empezar hoy por lo fácil. ¡Las enumeraciones! (sí, voy a hacer con el orden de la RAE lo que me de la gana). La coma siempre separa los elementos de una enumeración, siempre que estos no sean complejos y no contengan ninguna coma en su interior. También deben tomar en cuenta que el último elemento de la enumeración, al llevar conjunción (y, e, ni, o, u) no lleva coma. El ejemplo sería algo así:
Así es correcto:
Fuimos al mercado y compramos mangos, papayas, plátanos y melones.
Así no es correcto:
Fuimos al mercado y compramos mangos papayas plátanos y melones.
Fuimos al mercado y compramos, mangos, papayas, plátanos, y melones.
Fuimos al mercado y compramos mangos, papayas, plátanos y, melones.
Otros ejemplos correctos:
Puedes traer las cucharas, los tenedores o los vasos.
No me gustaron los camarones, los pescados ni los ostiones.
Si ya quedó claro, podemos seguir. Hay enumeraciones que no llevan conjunción al final. Eso no quiere decir que estén mal. En algunos casos, ponemos enumeraciones incompletas y dejamos un "etcétera" al final, entonces, antes del etc hay una coma. También, en vez del etcétera podemos usar puntos suspensivos para indicar la pausa o, simplemente, en algunos recursos narrativos, dejamos toda una enumeración con comas. ¿Algunos ejemplos? ¡Claro, aquí debajo!
Toda la familia vino a mi boda: mis padres, mis hermanos, mis tíos, primos, etc.
Compramos de todo para la casa: sillas, sillones, lámparas, platos, floreros, cuadros...
Toda ella transmite paz: sus ojos, su boca, su sonrisa, su rostro.
Siguiendo con enumeraciones, en una oración (u oraciones subordinadas) se separan todos los elementos gramaticales equivalentes: léase verbos, objetos directos, sujetos, objetos indirectos, etcétera. Todo se hace exactamente igual que en las enumeraciones: si el elemento final va introducido con una conjunción (y, e, o, u, ni), no lleva coma.
Ejemplos:
Llegué, vi, vencí.
No te olvides de cerrar la puerta, apagar la luz y guardar las llaves.
Se preocupaba por todo: por sus hijos, por su trabajo, por su salud...
Ahora, mi siguiente tema favorito y también uno de los básicos. ¡Los vocativos! Las comas siempre, siempre y cuando siempre, es siempre y sin ninguna excepción, aislan a los vocativos. Todos se encierran entre comas. TODOS. Pero por si les estoy hablando en chino, ¿qué es un vocativo? Preguntémosle a la RAE.

vocativo, va
Del lat. vocatīvus.
1.adj. Gram. Dicho de una expresión nominal: Que se usa en función apelativa; p. ej., Pepe en Pepe, ven un momento, por favor. U. t. c. s. m.
2.adj. Gram. Apelativo. Uso vocativo.

En resumen es cualquier manera de referirse a un interlocutor. Y sí, siempre, siempre, y cuando digo siempre, es siempre, se aisla con comas. ¡SIEMPRE! ¿Quedó claro? 

Así es correcto
Pepe, ven a cenar ya.
No se olviden de lavarse las manos, niños.
Tienes que saber, muchacho, que tu madre fue una gran mujer.
Así NO es correcto:
Pepe ven a cenar ya.
No olviden lavarse las manos niños.
Tienes que saber, muchacho que tu madre fue una gran mujer.
Tienes que saber muchacho, que tu madre fue una gran mujer.
Tienes que saber muchacho que tu madre fue una gran mujer.
Aquí viene una pequeña excepción con las conjunciones. Como a muchos les habrán dicho en la primaria, nunca va una coma después (o antes) de una conjunción, como y, o, ni, e, u. Pero, ¿qué pasa cuando hay un vocativo después de una conjunción? ¿Explota el mundo y nos morimos todos? No. La solución es simple: encerrar el vocativo con comas, porque como seguramente recordarán, ya los machaqué durante dos párrafos con que el vocativo siempre va encerrado con comas. Así que un os ejemplos (ambos correctos) quedarían tal que así:
Diviértanse y, niños, no se olviden de recoger sus juguetes.
Diviértanse, niños, y no se olviden de recoger sus juguetes.
Ahora, sigamos por lo fácil. Todas las interjecciones o locuciones interjectivas tales como bah, ay, ¡ay de mí!, ¡ay mis hijos!, eh y un largo etcétera, se encierran en comas. SIEMPRE. Todas. Igual que en los vocativos. SIEMPRE. Lo pongo en mayúsculas y dos veces por si acaso, pero creo que estoy haciendo entender mi punto, ¿cierto? No es necesario otro gif. Bueno, a los ejemplos:
Así es correcto:
Éramos muy pobres, ¡ay mis hijos!, nunca tuvieron lo que querían.
Bah, no es nada importante.
No sé que voy a hacer, ¡ay de mí!
Así NO:
Éramos muy pobres ¡ay mis hijos! nunca tuvieron lo que querían.
Bah no es nada importante.
No sé que voy a hacer ¡ay de mí!
Es muy importante hacer notar que las comas siempre van afuera de los signos de exclamación, nunca adentro. Nada de poner "Éramos muy pobres, ¡ay mis hijos,! nunca tuvieron lo que querían". Es incorrecto. Puede parecer que estoy exagerando. Pero no, les aseguro que no estoy exagerando: lo he visto. 

Muy bien, sigamos. Se pone una coma para separar el sujeto de su complemente cuando el verbo no se pone por haber sido mencionado con anterioridad o se sobreentiende. Bueno, lo que acabo de decir, traducido, es que cuando no vamos a poner un verbo, hay que separar las dos partes de la oración con una coma. Para que se entienda mejor, ejemplos:
Ejemplos:
Pedro tenía diez años; Paco, ocho.
Los adultos mayores, por aquella puerta.
Diez por cinco, cincuenta.
Es de lo más sencillo, así que creo que no es necesario ahondar más en ese uso. Mi única recomendación es que si no están seguros de que lo que están escribiendo es correcto, lo lean en voz alta y, después, si siguen sin estar seguros pongan el verbo o le pregunten a alguien. Mucho en el uso de las comas es adivinar o agarrar experiencia. Pero bueno, a lo que sigue. 

La RAE dice que es conveniente escribir coma antes de excepto, salvo y menos. He llegado a la conclusión de que cuando la RAE dice eso es que es más que conveniente y que lo mejor es que casi siempre se ponga. O sea que aquí los ejemplos serían lo siguientes:
No me gusta nada la cultura China, excepto la comida.
El bibliotecario siempre estaba disponible, salvo los miércoles porque iba a ver a su esposa al hospital.
Puedes hacer lo que quieras, menos saltar en la cama.
Por hoy ya me ha quedado bastante larga la entrada, así que he decidido cortarlo aquí y seguir en la que sigue. Si tienen dudas muy específicas sobre estos usos, aquí debajo. Si tienen dudas sobre el uso de las comas en general, aquí debajo, para considerarlas en futuras entradas. Y si les gustó... pues ya saben: este blog se alimenta de comentarios. Sobre todo, si les fue útil y conocen a alguien a quien también le sería útil leer esta entrada, les agradecería mucho, pero mucho que la compartieran. ¡Esperen las siguientes!


Las comas son amigas, no comida (II)

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Antes de seguir con las comas, les voy a contar un secreto. La RAE es descriptiva, no prescriptiva. O sea que recoge la manera en que hablamos o que cree que hablamos (amigovio era para la generación anterior, chicos, llegaron tarde) y no nos está obligando a nada. Sin embargo, por muy descriptiva que sea y no te esté poniendo una pistola en la cabeza para que pongas las comas, por favor quiero hacer una petición: PONLAS BIEN. Esto es sólo para tener una buena convivencia y que nadie malinterprete lo que estás diciendo, las comas pueden hacer una gran diferencia cuando quieres decir algo. Ahora si, vamos a seguir con las comas. 

  
¿En donde me quedé? Se escribe coma antes de pero, mas, aunque, sino (que) en oraciones coordinadas adversativas. En cristiano eso quiere decir que dos oraciones son contrarias o presentan puntos contrarios. ¿Cuándo se pone la coma? Siempre, por supuesto. (Y por favor, por favor, nunca pongan "pero aunque" o "mas aunque" porque suenan a pleonasmo).
Así se hace:
Trabajamos el sábado, aunque era feriado.
Haz lo que quieras, pero ten cuidado.
No fuimos al restaurante italiano, sino que cenamos en casa.
Queríamos llegar temprano, mas no pudimos porque Juan llegó tarde,
Así NO se hace:
Trabajamos el sábado aunque era feriado.
Haz lo que quieras pero ten cuidado.
No fuimos al restaurante italiano sino, al francés.
Queríamos llegar temprano mas, no pudimos porque Juan llegó tarde.
Siguiendo el mismo tipo de oraciones, para no perder el hilo, la coma se pone cuando tenemos oraciones consecutivas introducidas por así que, conque, de manera que... y ectétera. En cristiano la cosa quiere decir que son oraciones que siguen a otra. En general sirven para exponer argumentos.
Así que hace:
Prometiste ir conmigo, así que ahora no salgas con excusas.
Julia estudió mucho para su examen, de manera que obtuvo una buena calificación.
Así NO:
Prometiste ir conmigo así que ahora no salgas con excusas.
Julia estudió mucho para su examen de manera que obtuvo una buena calificación. 
Ahora voy con un tema más complicado, así que me voy a tomar mi tiempo en explicarlo. Incluso la RAE gasta más de dos líneas en explicar esto. Se pone come ante oraciones causales o lógicas, también llamadas "de enunciación". Creo que todos sabemos que las oraciones causales exponen la causa de algo. Si ha llovido, el suelo se moja, y el suelo está mojado porque ha llovido (o hubo un tsunami, qué sé yo). Entonces, el ejemplo es el siguiente: Ha llovido, porque el suelo está mojado

Sin embargo, las causas reales o puras no van con coma... El ejemplo es El suelo está mojado porque ha llovido Se preguntarán cuáles carajos son las causas reales o puras, pero no se preocupen: a veces yo también me pregunto donde va cada ejemplo. La RAE intenta explicar la diferencia, pero como es su costumbre no la explica en un idioma que una persona no experta en gramática pueda entender. De todos modos pego la explicación para hacer sobre esa mi explicación for dummies.
La diferencia entre un tipo de causales y otro es que las causales propiamente dichas expresan la causa real del hecho enunciado en la principal (El suelo está mojado porque ha llovido: la lluvia es la causa real de que el suelo esté mojado), mientras que las lógicas o explicativas no introducen la causa real de lo expresado en la oración principal, sino el hecho que permite al que habla afirmar o enunciar la oración principal (Ha llovido, porque está el suelo mojado: lo que me lleva a afirmar que ha llovido es que el suelo está mojado).
A ver, ahora, en un intento de traducción a cristiano, la cosa va así: La causa real es... la causa real. En serio, no se me ocurre una manera de explicarlo. Yo lo hago de una manera muy intuitiva. La causa real es la obviedad, estás diciendo algo que es real aquí y en China, o sea, que se consideraría válido en las dos partes. La causa lógica o explicativa puede ser sólo válida para ti, estás exponiendo el hecho que te permite llegar a la conclusión de tu oración principal. ¿Ya? ¿No he perdido a nadie? Mi consejo con este tipo de comas es que lean en voz alta lo que escriben, lo piensen y lo pongan como mejor les suene, finalmente, no todos somos expertos en poner comas y a veces hasta a mí se me van. Ahora respiren hondo, juro que por este post no pondré más cosas en chino mandarín.


Siguiendo, se escribe coma para separar los dos términos de las construcciones no sólo..., sino (también). Creo que está sencilla la cosa, pero igual les pongo ejemplos del asunto.
Así es:
Lo que dijo me sorprendió no sólo a mí, sino a todos los que estábamos en ese momento en el lugar.
Así NO:
Lo que dijo me sorprendió no sólo a mí sino a todos los que estábamos en ese momento en el lugar. 
Cuando el orden de las oraciones se invierte... en cristiano, por ejemplo, cuando objetos directos o indirectos anticipan su aparición. También cuando fijamos un tiempo en una narración antes del verbo de la oración. Me deben están mirando como si hablara en chino, así que seré consiente y se los explicaré con ejemplos.
Pescado, no suelo comer mucho (el objeto directo va antes).
En aquellos últimos días de verano, el ambiente era mucho más melancólico (los días de verano es el cuándo en la oración). 
 En las oraciones compuestas (léase que hay dos oraciones y una depende de la otra), cuando la subordinada está antes. Si la subordinada va después la coma no es necesaria. Ejemplos, ¿claro?
Si vas a salir, avísame. 
Aquí, "avísame" es la oración principal. Para identificarlas, puedes pensar en cuál tiene sentido sola y cuál no. "Si vas a salir" no tiene sentido si la ponemos sola porque sentimos que algo falta; está el si condicional.
Aunque no le creas nada, Ana tiene razón.
"Ana tiene razón" es la principal, puede estar sola y no nos va a sonar extraño. En cambio, "aunque no le creas nada" es subordinada porque tiene el aunque. No tiene sentido si está sola, debe de haber algo con lo que la podemos contrastar. Y así pueden analizar estos casos para saber donde necesitan coma y donde no la necesitan.

Pasando a un tema más sencillo, se escribe coma delante de los siguientes enlaces: esto es, es decir, a saber, pues bien, ahora bien, en primer lugar, por un/otro lado, por una/otra parte, en fin, por último, además, con todo, en tal caso, sin embargo, no obstante, por el contrario, en cambio y otros similares.
Ejemplos:
Pues bien, nos vamos mañana de vacaciones y no el domingo.
Quería ir con Angélica a la fiesta; sin embargo, Angélica no va a ir y no quiero estar sola.
Queríamos ir de viaje a Chiapas para ver la naturaleza pero, por otro lado, el clima es demasiado húmedo.
No puedo ir hasta la ciudad; además, no me apetece nada manejar.
También va coma cuando hay adverbios o locuciones adverbiales que modifican a toda la oración y no solo a uno de sus elementos, como efectivamente, generalmente, naturalmente, por regla general, etc. Léase, advervios que no modifican directamente al verbo sino que tienen efecto en toda la oración. 
Ejemplos:
No tengo automóvil; naturalmente, no puedo ir a la fiesta si no habrá transporte.
Generalmente, el primer día no hay clases: los estudiantes pueden conocer la universidad libremente.
Efectivamente, no llegaré hasta muy tarde.
Por regla general, todos nos vestimos de etiqueta en las fiestas.
Ahora, ya para acabar por esta vez, un uso sencillo; se pone coma después de las siguientes expresiones introductorias: en cuanto arespecto de, con respecto a, en relación con, con referencia a, a tenor de, etc. También se pone coma frente a expresiones tales como: en ese caso, a pesar de todo, para eso, etc. Si tienen duda sobre si poner o no una coma frente a una expresión de ese tipo sólo tienen que leer en voz alta lo que escribieron haciendo una pausa y sin hacerla. Ahora, unos cuantos ejemplos.
Ejemplos:
En cuanto a Armando, no quiero volver a verlo.
Con respecto a la junta, quedo todo arreglado.
En ese caso, nos quedamos en casa.
A pesar de todo, hemos decidido irnos de vacaciones.
Ya saben que las preguntas van aquí debajo y que todavía continuaré en otra entrada, pues los usos de las comas son muchísimos. De hecho, son el signo de puntuación más complicado a mi gusto. Bueno, preguntas sobre estos usos específicos (o los de la entrada pasada), aquí debajo, sobre otros, también, dudas que siempre los hayan torturado porque en ningún lado encuentran la respuesta, también. Intentaré responder todo lo que sepa con ejemplos, como siempre, y explicaciones. Si les gustó  la entrada, compártanla y si no, también (a sus enemigos).

Las comas son amigas, no comida (III)

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A lo mejor si a la mitad no me doy cuenta de que la entrada está quedando kilométrica esta es la última parte en la que les daré lata con las comas. A lo mejor, pero no estoy segura. Recuerden que las comas son cosas muy importantes porque ponerlas o no ponerlas es la diferencia entre decir una estupidez o no decirla. Queremos que todo el mundo nos entienda, ¿no? Bueno, entonces, manos a la obra, tenemos trabajo que hacer. 


Uno de mis usos preferidos para las comas (sí, soy tan ñoña que tengo favoritos) es el siguiente: las comas se usan para delimitar incisos. La mayor parte de las veces (no todas) este uso se puede alternar con raya o con paréntesis, pero como hablamos de las comas... se usa así: se pone una coma antes y una después del inciso, no importa lo que haya atrás o delante del inciso, sea conjunción o no lo sea, vocativo o no, lo que sea: el inciso se delimita por comas. Hay incisos de muchos tipos, que son los que vamos a ver hoy.

Por ejemplo, podemos empezar por las aposiciones explicativas. Para que no me digan que hablo en chino, les explico: una apocisión es una construcción de elementos gramaticales y si es explicativa, quiere decir que incluye información adicional aclaratoria. Pongamos un ejemplo:
Yo podría escribir: María no tiene dinero, ¿puedes prestarle?
Pero por ejemplo, podría querer explicar que María es mi hermana menor.
Entonces, el inciso quedaría así:
María, mi hermana menor, no tiene dinero, ¿puedes prestarle?
Ahí, la aposición es "mi hermana menor" y como podemos ver, está rodeada por comas.
Más ejemplos de aposiciones explicativas:
Edimburgo, ciudad de Escocia, fue el lugar que visité cuando estuve de viaje.
Carlos V, rey de España, es muy famoso.
Moctezuma Xocoyotzin, huey tlatoani de los Aztecas, recibió a Cortés.
Continuemos con las explicaciones: los incisos también pueden ser adjetivos explicativos u oraciones adjetivas explicativas. Todos sabemos que los adjetivos calificativos nunca van separados por comas (El perro bonito, el gato viejo, etc, etc), pero los explicativos, que nos dicen cómo se encontraba el sujeto cuando ocurrió cierta acción en vez de describirnos al sujeto, sí. 
Ejemplos:
Los ratones, derrotados, dejaron de buscar queso por toda la casa. (Se explica que todos los ratones estaban derrotados, de ahí que ya no buscaran más queso).
Si queremos poner la oración sin comas tendría otro sentido:
Los ratones derrotados dejaron de buscar queso por toda la casa. (Decimos que de todos los ratones, sólo los derrotados, que no son todos, dejaron de buscar queso por toda la casa).  
En ese ejemplo podemos ver que muchas veces es gramaticalmente correcto ponerlo de las dos maneras, con o sin comas. Pero en ambos casos estamos explicando o diciéndole a nuestros lectores cosas diferentes, así que tenemos que tener claro que es lo que vamos a transmitir para no caer en errores.

Volviendo a los incisos: estos también pueden ser expresiones accesorias que no tienen ninguna vinculación o propósito explicativo en la oración en la que se insertan. Muchas veces se usan en la poesía, si es que no les suenan de ninguna parte.
Ejemplos:
Llegó a casa, dime tú su no es para matarlo, con todos sus amigos y sin avisar.
Tus caderas, ¡que delicia!, son lo mejor que me ha pasado en la vida.
Y después a la RAE le dio flojera seguir clasificando (bueno, probablemente no) y dijo que era considerado inciso cualquier otra clase de comentario, explicación o precisión a algo dicho
Ejemplos:
Toda la familia, incluida mi cuñada, estaba de acuerdo con lo propuesto.
Un buen hombre, según decía un célebre escritor, era fiel a sus principios.

Ya voy a acabar... casi (y esa sólo me la creo yo). Ahora, se escribe coma antes de una palabra que se acaba de mencionar cuando se repite para introducir una explicación sobre ella. Por ejemplo...
Se compró la mejor moto que había en el mercado, moto que, a los pocos meses, acabó olvidada y polvorienta en el garaje.
Compramos manzanas en el supermercado, manzanas que estaban carísimas.
El carro verde se descompuso, carro que compramos al año pasado.
La palabra etcétera se rodea por comas para separarla del resto de la oración. Ya les había puesto un ejemplo parecido al hablar de enumeraciones pero ahora vemos el caso de qué es lo que ocurre si, después de un etcétera, la oración continúa. 
Así es:
Los cítricos como el limón, la naranja, la toronja, la mandarina, etcétera, son muy buenos para prevenir los resfriados.
Así NO:
Los cítricos como el limón, la naranja, la toronja, la mandarina, etcétera son muy buenos para prevenir los resfriados.
También se escriben comas antes de cada una de las oraciones o elementos coordinados en oraciones del tipo: bien..., bien...; ora..., ora...; ya..., ya... He elegido dejar este uso casi al final porque no es muy común y yo, por ejemplo, sólo lo uso al hablar o escribir de manera muy formal. No es muy común en el habla coloquial.
Ejemplos:
Organizaremos la reunión el jueves, bien en tu casa, bien en la mía.
Todos querían a Sara como presidenta de la colonia, ya porque les había prometido beneficios, ya porque de verdad creían en ella.
Ahora, otra cosa importante pero a la que casi no pone atención. ¡FECHAS! Sí, al escribir una fecha completa, con el lugar incluido, el lugar se separa de la fecha. También se separa el día de la semana y el mes con comas. 
Ejemplos:
Distrito Federal, 28 de marzo de 2016.
Houston, Texas, a 13 de febrero de 1994.
Martes, 3 de enero de 1870.
En las direcciones, en España, dato curioso, se pone coma entre en nombre de la calle y el número. Yo personalmente siempre he escrito así: Rosas 24. Pero eso, según la RAE, se escribe así en España (que los españoles confirmen): Rosas, 24. Ahí sí, que cada quien decida cómo poner las cosas, de todos modos las entendemos todas, ¿no? 

Ahora, para seguir y ya casi acabar, usamos las comas para distinguir entre todos los sentidos de una oración. Ya lo he explicado antes con algunos ejemplos, pero aquí me dedicaré un poco más a eso. Pongamos algunos ejemplos:
Me he vestido como me indicaron (me vestí de la manera en que me indicaron).
Me he vestido, como me indicaron (me indicaron que me vistiera, pero no cómo).
Mientras, hizo lo que debía y no hubo problemas (mientras algo más ocurría, él hizo lo que debía).
Mientras hizo lo que debía, no hubo problemas (no hubo problemas siempre que él hizo lo que debía).
Vamos a comer niños (pues van a comer niños, deben estar muy ricos).
Vamos a comer, niños (los niños van a comer y no a ser comidos). 
Bueno, hay más usos de la coma y los pueden consultar en la RAE. La mayoría son más técnicos y subcasos de los que expliqué en esta serie de tres entradas. De todos modos, si tienen dudas, sean muy amables de dejarlas aquí abajo y yo contesto lo que sepa y si no lo sé, pues lo busco. Ojalá que estas tres entradas les hayan servido de mucho y les hayan gustado y las apliquen. Compártanlas si es que conocen a alguien que las necesite. Además, si quieren que haga algo sobre algún otro signo de puntuación (que sepa usar, claro), pueden pedirlo, ya saben. 

¡Diviértanse con las comas! Recuerden que son amigas, no comida. 

 

How the García Girls Lost Their Accents, Julia Álvarez | Reseña

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Sinopsis: Uprooted from their family home in the Dominican Republic, the four Garcia sisters―Carla, Sandra, Yolanda, and Sofia―arrive in New York City in 1960 to find a life far different from the genteel existence of maids, manicures, and extended family they left behind. What they have lost --and what they find-- is revealed in the fifteen interconnected stories that comprise this exquisite first novel. Just as it is a feature of the immigrant experience to always be looking back, the novel begins with thirty-nine-year-old Yolanda's return to the Island in "Antojos" ("Cravings") and moves magically backward in time to the final days before the exile that is to transform the girls' lives. Along the way we witness their headlong plunge into the American mainstream, but although the girls try to distance themselves from the Island by ironing their hair, forgetting their Spanish, and meeting boys unchaperoned, they remain forever caught between the old world and the new. With bright humor and rare insight, Julia Alvarez vividly evokes the tensions and joys of belonging to two distinct cultures in a novel that is utterly authentic and full of irrepressible spirit.

Cómo las chicas García perdieron sus acentos, traducción literal del título de la novela, empieza con el regreso de Yolanda a su isla natal, Republica Dominicada, a los treinta y nueve, después de cinco años de no pisarla. Sus tías la obligan a hablar en español, aunque parece que se le han ido olvidando las palabras y lo único que quiere es ir al campo a comer guayabas, ella sola, en un carro y sin chaperón, lo que resulta un escándalo entre su familia. De allí, empezamos a ir para atrás. Las chicas García ya no tienen sus acentos, más bien su español se ha vuelto diferente, pero el libro nos va condiciendo hacia atrás, hasta antes de que se fueran a vivir a Estados Unidos, obligadas por una situación política en la que su padre se veía amenazado y vamos desentrañando sus vidas. 

Este libro es la vida de Julia Álvarez ficcionalizada. Ella es Yolanda, Yo, Yolo, Joe en los Estados Unidos. Poeta que ha dejado de escribir para frustración de su madre y se ha convertido en maestra, aunque su madre rogaba porque ella fuera la famosa de la familia y dejara el nombre de los García de la Torre en alto. Durante todo el libro, tenemos historias de las cuatro hermanas: el matrimonio de Sofría, Fifi, que hizo enojar a su padre y con el que apenas se está reconciliando después, de, cómo no, darle a su primer nieto varón; los problemas de Sandi, Sandra, que estuvo internada en un psiquiátrico después de una decepción; de como Yolanda se siente extremadamente liberal dentro de su familia, pero frente a la libertad estadounidense sigue siendo más conservadora y finalmente de Carla y los zapatos rojos. 

Latinoamérica es increíblemente diferente entre sí. Diferentes costumbres, diferentes héroes, diferentes fechas. Republica Dominicana tiene una historia particularmente complicada. Pero en esencia, todas las familias latinoamericanas del siglo pasado se parecen un poco. Al menos en los libros. Se nota el contraste de la liberación femenina, al menos entre Yolanda y sus hermanas, que son feministas pero no pueden lograr que nadie en la isla se una a su causa, en especial sus tías mayores, porque creen que no es femenino andar rogando por sus derechos (sí, ese es un argumento normal) y sólo se preocupan por buscarles marido. La dualidad entre su identidad ―estadounidenses y dominicanas a la vez― se hace notar sobre todo en Mundín, su primo, que mientras está en Estados Unidos es parte de ellas, un compañero, pero cuando vuelve a Republica Dominicana cada verano se vuelve un macho de nuevo, intentando encajar. 

A pesar de que el libro va hacia atrás, narrando desde el presente donde Yolanda vuelve a la isla hacia el pasado, cuando se acustumbraban a vivir en los Estados Unidos o aun estaban en Republica Dominicana, no es difícil de seguir. La narración es muy simple y eso ayuda, además de que a pesar de que ya sabemos cómo termina la historia de las chicas García (sin sus acentos), lo de antes es nuevo y es una narración que se spoilea poco a sí misma. Como cualquier libro latino de un descendiente de latinos o inmigrante, está plagado de expresiones en español en todas partes y de modismos en los dos idiomas que lo hacen sentir más cercano. 


De entre los personajes, todos se sienten humanos, con sus contradicciones y esa crisis de identidad que las hace debatirse entre dos países. Como decía la sinopsis atrás de mi ejemplar (escaneado para la OpenLibrary): se rebelan quitándose los chinos, planchándose el pelo, pero vuelven a sus raíces por la fruta, la comida y cada año, volviendo sin sus maridos, al cumpleaños a de su padre, que parece que no le importa tener cuatro hijas mujeres, como insiste en aparentar, pero que sólo accede a reconciliarse con Fifi cuando tiene un hijo varón. Su madre las protege y las defiende de su padre, pero aún así fue criada con otros valores y las aleja de las escuelas públicas para meterlas en internados católicos, donde sabe que sus hijas estarán bien cuidadas. 

Respecto a la trama, tengo que decir que no hay un núcleo fuerte en el libro, lamentablemente, a pesar de lo bien unidas que están las escenas. Es un libro sobre todo de identidad, pero no se concentra en eso, sino en problemas varios. A veces no consigue abarcarlos todos, lo cual es una lástima y deja con dudas y ese regusto a que estamos viendo un montón e historias pequeñitas que se escapan y dicen que les toca ser contadas en otra ocasión, así a lo Ende. Es el único punto malo que le puedo ver al libro y pasa con muchos libros de este tipo. Realmente es una lástima porque el libro es precioso.

¿Lo recomiendo? Por supuesto que sí. Es un libro muy interesante si les gustan estos temas, aunque está algo complicado de conseguir. Ojala, si lo leen, les guste
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