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Channel: Divagaciones de una Poulain
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Hermano Lobo, Carla Maia de Almeida | Reseña

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Sinopsis: En un relato a dos voces, Hermano Lobo muestra la historia de una vida familiar destrozada y un viaje a través de un país que se cae a pedazos. Está narrada por la voz de Bellota, una niña de ocho años, cuando emprende con su padre la expedición hacia el Desierto de la Muerte. Nace de las imágenes de una adolescente cuando recuerda la extraña y última aventura de su infancia. Conmovedora historia de la relación entrañable entre un padre y su hija. Esta obra fue seleccionada por la lista Arcadia como uno de los mejores libros en 2014.

Por alguna razón siento que la gente debería estar hablando más de este libro. Mucho más. Muchísimo más. De hecho, voy a cargar este libro conmigo a todas partes para que cada que alguien diga que algún tema es muy complicado para niños, le voy a estampar este libro en su cara con todas mis fuerzas. Es muy padre que la gente se de cuenta de que los niños no son unos estúpidos (en serio, los niños se dan cuenta de las cosas; quizá no las entiendan del todo, pero las notan) y escriban este tipo de libros. Además, Carla Maia de Almeida no intenta sobre explicar nada; simplemente se pone en los zapatos de una niña y en lo que pensaba y se pone a narrar una historia. 

No sé por dónde empezar a hablar de este libro en sí en realidad. Todo tiene algo importante que ver en la trama. ¡Todo! Es un libro tan bien editado y tan bien escrito (sobre todo bien editado, la edición está de lujo) que realmente este es uno de esos libros que sí se merece un 10. Bueno, o en la escala Goodreads, cinco estrellas. Pero nunca me ha gustado calificar los libros con números y por eso jamás verán una calificación de ese tipo en este blog. Siento que los números son demasiado fríos para valorar un libro y, aunque finalmente es práctico a la hora de catalogarlos (Goodreads) y llevar la cuenta de lo que he leído, siento que un número no le va a hacer justicia como juicio de valor a un libro. Por eso, sí, este libro se merece esas cinco estrellas, pero decir eso no basta para recomendarles el libro, así que... ¿por dónde empezar? 

(Estoy oyendo a alguien en el fondo que dice que deje de escribir paja, mejor le hago caso). 

Here we go...
Bueno, el trabajo de edición le ayuda al libro porque es un libro que está contado a dos voces y a dos tiempos. Y, aunque no lo crean, la historia puede leerse líneal. Primero, tenemos a Bellota de ocho años, en las páginas blancas, contándonos su presente, la expedición hacia el desierto de la muerte. Y  las páginas azules, son de Bellota a los quince años contándonos de su pasado, ese pasado antes de la última expedición y lo que llevó hasta ella. Ve a su familia como una manada de lobos y la explica como si fuera una manada. 

Bellota va contado como poco a poco su familia se hace pedazos en medio de problemas económicos y mudanzas. Su padre va perdiendo la esperanza ―y con ello el buen humor― poco a poco y su madre cada vez se cansa más entre tantos trabajos. De una casa con jardín pasan a un departamento y después a un departamento cada vez más pequeño. Cada vez, el espacio para la manada se va haciendo más pequeño y ellos dejan de salir juntos en las fotos y Malik, el perro, desaparece. Bellota, la menor, alguna vez oye que nació «fuera de tiempo»; uno se da cuenta por qué cuando aparecen sus hermanos en escena. A Fósil no le dice Fósil por nada y Miss Kitty tiene las maneras de una asolescente en plena edad de la punzada (y las dietas vegetarianas, los chamanes y todo ese tipo de cosas). 

Bellota a veces parece más una mera espectadora de los problemas en su casa, pero podemos percibir que está en el ojo del huracán. Es la niña, la pequeña, la bebé. Quizá no entienda del todo que pase ―se puede deducir por su manera de contar la historia― pero entiende algunas cosas y sobre todo, observa a su alrededor y cómo han cambiado las cosas. Para ella, el detonante es la pérdida de Malik, su perro. El ambiente de vuelve tenso, las peleas frecuentes. Y este nunca de ser un libro juvenil con aires infantiles.  


Una cosa muy curiosa sobre el libro son las ilustraciones, obra de Antonio Jorge Gonçalves, que muestran siempre el entorno en el que se desarrollan las escenas, el escenario, pero casi nunca a los personajes (y si los muestra, son desdibujados, al fondo, como simples siluetas). Realmente un detalle curioso que me apetecía mencionar porque las ilustraciones calzan perfectamente con el libro.

Ahora, como rápida conclusión, diré de que es un libro muy bonito, pero más que eso, es una buena historia muy bien escrita que vale la pena. Me da gusto que se traten estos temas en libros infantiles y juveniles y sobre todo, que se haga de esta manera. Creo que es el único libro de Carla Maia de Almeida que ha sido traducido al español, pero sin duda es muy bueno. Ojalá la vuelvan a traducir en el futuro. Mientras tanto, está este pequeño libro


Lo bueno, lo malo y lo absurdo de Torchwood

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Advertencia: Esta entrada puede o no puede tener spoilers de Torchwood... No, la verdad es que los tiene. Todas las de lo bueno, lo malo y lo absurdo los tienen.

Bienvenidos a la sección que casi nunca nadie comenta de blog pero que yo me divierto como niña escribiendo. La parte en la destripo y critico series que he visto, además de recomendárselas. ¿Hoy? Toca Torchwood. Para quien no conozca Torchwood ―es un spin-off de Doctor Who― les tengo unas cuantas definiciones que saqué de Tumblr y que son especialmente divertidas: 
  1. Esa serie sci-fi donde todos son gays. 
  2. La serie con el alien que se alimenta de orgasmos.
  3. Doctor Who para hipsters.

Bueno, a ver, una mejor explicación. En un capítulo de Doctor Who, la reina Victoria es atacada por un hombre-lobo... digo, un alien con forma de lobo que se esconde en el cuerpo de un niño y decide crear el Torchwood Institute para defender a su país de los aliens (y del Doctor, lo cual no tiene sentido, porque el Doctor los salva de las amenazas alienígenas siempre). Torchwood siguió a lo largo del tiempo con métodos que incluían muchas armas y muchos muertos y su sede en Londres hizo la gran cagada y fue destruida y así es como llegamos a Torchwood Three, en Cardiff, Gales, donde la gente tiene un acento chistoso que yo no conocía. Quedan cinco personas en todo el equipo de Torchwood y se dedican a perseguir aliens que aparecen a través de una grieta en el espacio-tiempo... wibbly-wobbly timey-wimey stuff. La verdad es que es una serie que se puede ver sin saber absolutamente nada de Doctor Who (excepto por un par de datos) y tiene aliens y sexo y personajes LGBTI+ y cosas geniales. 

Lo bueno


Tiene relaciones LGTBI+ y literalmente, a nadie le importa. ¿Saben qué es maravilloso? Que literalmente nadie meta homofobia en una serie por convivir y que además muestres un pequeño universo donde a todo el mundo le de igual la orientación sexual de todo el mundo y nadie hace comentarios discriminatorios hacia nadie. En teoría así debería ser el mundo en el que vivimos, pero todos sabemos que no es así. Como quien dice, las etiquetas serán necesarias hasta el día que no lo sean, pero mientras tanto tenemos Torchwood (y a Jack y a Ianto).

Con este gif convencí a alguien de ver la serie
Hay aliens, pero los más terroríficos son siempre los humanos. Por supuesto que hay aliens y por supuesto que los hay dispuestos a asesinar a la raza humana entera (aunque hay unos que se conforman con alimentarse de orgasmos, true story), pero los más aterradores siempre resultamos los humanos. No se puede culpar al espacio exterior. Torchwood tiene desde caníbales (en su, quiza, episodio más terrorífico), todos completamente humanos; científicos que hacen atrocidades con los extraterrestres en nombre de la ciencia; explotadores que mutilan a aliens vivos para ganar un poco de dinero y... tengo más ejemplos, pero no quiero contarles toda la serie. Los humanos en sí son terroríficos.

Sus finales de temporada no incluyen Daleks siendo ridiculizados (como Doctor Who). Todos sabemos que después de The Parting of the Ways ganarle a los Daleks era muy fácil, no importaba que tan bueno estuviera el resto del capítulo, era demasiado fácil y apestaba a deux-ex-machina porque... bueno... parecía que se acababan los minutos.


Los protagonistas son geniales. Todos, casi. A mí al menos me gustan todos (especialmente Ianto, mi bebé), pero cada quien tiene lo suyo. Hay sexo, todo el mundo liga (es Jack Harkness, por supuesto que todo el mundo iba a ligar en la serie). Hay amor, hay relaciones complicadas, personajes complicados. Hay contradicciones humanas, personajes que nos recuerdan que son buenas personas a pesar de hacer cosas horribles, personajes que son personas horribles que nos enseñan que son capaces de hacer cosas buenas... Y hay dilemas morales. ¿Qué pasa cuando la única manera de salvar a alguien es matando a otro aunque no tenga la culpa?  ¿A quién elijes? Y, además, ya que no estamos en Doctor Who, hay armas, muchas y muy grandes.

Lo malo


Todo el mundo muere, a veces incluso repetidas veces. Menos Jack Harkness, claro. Y Gwen, que parece tener un increíble talento para salir viva de todos lados. Me gustan las escenas de las muertes porque te rompen el corazón porque son como una muerte debería ser, rápidas y sin tiempo para decir casi nada (más que lo que importa o ni eso).

Te hace extrañar al cast antiguo a base de pésimos personajes.
(Excepto Vera Juarez, ella era genial).
La cuarta temporada, Miracle Day, apesta a producción yanqui y es absurda y es mala y es aburrida. Todo el planteamiento me desquició totalmente y ver a la CIA metida con Torchwood, más. Además, no salen casi aliens, no sale Ianto (se aplica lo de "Save the coffee boy, save Torchwood", porque sin él es una mierda), los nuevos personajes son terribles y ehm... el final es decepcionante. Ni de donde cogerlo. Por suerte los audios de Big Finish han estado solucionando el desastre que dejaron.

Que Ianto no revive jamás. No debo explicar esto, ¿verdad?

You, precious cinnamon roll.
Hay una cyberwoman por ahí y bueno... en realidad no es cyberwoman como tal, sólo está a la mitad del proceso, pero por alguna razón, lo único que tiene cubierto son los pechos y la vagina, en el resto del cuerpo hay pedazos de metal y piel y está... no sé... demasiado sexualizada. Así no eran los cybermen. Su capítulo es de los mejores de la primera temporada, pero aún así, ese aspecto me hace alzar la ceja.

Lo absurdo


Hay un alien que es gas. Y ese gas, se mete en las personas para poder vivir. Bueno, además, ese alien se alimenta de orgasmos humanos. Si ven las entrevistas, nadie parece saber de dónde salió la idea, pero cada que les digan que Torchwood es una serie... seria, recuerden: sex gas. Hay más aliens raros pero creo que nada superará el sex gas.

A Barrowman se me empezaba a ver la edad.
La última temporada y su final. ¿Qué la inmortalidad de Jack se transmite por su sangre? El Bad Wolf se está revolcando en un universo paralelo. ¿Qué no sé que de los polos de la tierra? ¿Y mientras escarbaban no se encontraron a los Racnoss? ¿Qué eran las familias? Ah, ¿no nos van a explicar nunca? ¿Y Angelo Colasanto al final no tuvo nada interesante qué ver? ¿Sólo fue relleno? ¿Y la familia de Esther? Ah, es que como está muerta ya la olvidaron. Ay. Tiene unos cuantos momentos buenos que incluyen Gwen y armas (con una bazooka y un bebé en brazos, es épico), a Gwen y a Jack discutiendo y a Gwen y a Jack mirando a los dos de la CIA con cara de "pero qué estúpidos son".


Ella trae la lluvia, Martha Riva Palacio | Reseña

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Sinopsis: Calipso llegó a la isla en el peor momento. El calor avanzaba enloqueciendo a los pescadores y lo único que hacía falta era el pretexto para desatar un conflicto. Tras su primer encuentro con ella, en la playa, Teo se ve lanzado todas las noches a otro mundo. Ahí, el amor, la guerra, los sueños y la muerte cobran un matiz diferente. Conforme va descifrando cuál es la historia de su nueva amiga, el chico de doce años cae en cuenta de que en la superficie hay monstruos más peligrosos que los que habitan en las profundidades del océano. Esta es una historia sobre una voz perdida, una bruja de cabello azul que cree saberlo todo y cómo seguir nadando en medio de la sequía.

¿Alguna vez sienten que un libro los llama desde el estante en que está exhibido? Esa es una de las pocas cosas típicas lectoras que me pasan ―los libros nuevos apestan a pegamento según yo, me da igual rayarlos y escribirles en los márgenes y ciertamente no los trato como nada que sea sagrado― en mi vida y eso fue lo que me pasó con este pequeño libro de exactamente 99 páginas ―bueno, quizá unas dos más, pero ahí se detiene la numeración― de la autora mexicana Martha Riva Palacio, con ilustraciones de Roger Ycaza y perfecta edición de el Naranjo, con texto azul, como el mar; si fue a propósito o no, yo ya asumí que sí. No me contradigan, déjenme vivir el sueño.


En la isla las personas se dividen en dos grupos, uno de los cuales culpa al otro por la falta de peces, la sequía y básicamente toda tragedia que les pueda acontecer para demostrar que no los quieren. Los isleños son los oriundos de la isla y llaman criollos a los de afuera; los criollos se llaman a sí mismos la gente del mar y por lo que muestra el libro, son migrantes que se han visto desplazados de sus tierras hacia la isla. Teo es una mezcla entre ambos y le parece que no es bien aceptado en la isla, en donde vive con su tío desde que sus padres murieron, pero tampoco abiertamente rechazado. Como quien dijera, está en un vacío legal. La historia empieza con la llegada de Calipso de la mano de su abuelo, ambos criollos a la isla, mientras Teo nos empieza a explicar sus aventuras junto con la forma de vida en la isla.

Yo soy una optimista de la vida y estoy del lado de Teo: él no entiende por qué los isleños tratan mal a los criollos y yo... bueno, yo ya hubiera empezado a hacer campaña social por sus derechos, pero no estoy en el libro ―¡lástima! Pero si lo estuviera, no sería este libro tan infantil―. Sin embargo, hay quien intenta racionalizar el rechazo y a veces, hasta el odio, por los criollos y admite su discriminación como si cualquier cosa fuera ―cuando, después de incontables libros, películas y noticias deberíamos aprender que no es cualquier cosa y que más bien causa muchos problemas―; hay personajes que sólo repiten lo que otros han dicho ―por encajar―, algunos que intentan cambiar la situación ―pero no se atreven a mucho―, otros que atacan a los criollos directamente y finalmente, los más peligrosos de todos, los indiferentes. 

Teo es un niño y no ha venido al mundo con los prejuicios de los adultos y, como es un poco extranjero, tampoco entiende las peleas. Por eso no tiene ningún problema en relacionarse con Calipso, una niña que no habla, o con su abuelo. Y tampoco, desde que agarró un collar en la playa, encuentra nada extraño soñar con una niña de cabellos azules y ojos dorados, porque desde que murieron sus padres no soñaba. 

Por alguna razón que desconozco, la mayoría de los escritores... no, no esperen, la mayoría de los artistas, tiene alguna clase de fascinación con el mar. Como alguien que apenas recuerda el mar, lo puedo entender. Dicen que sus olas son impresionantes y el mar, por sí sólo, es una de las mayores maravillas de la naturaleza que podemos ver más fácilmente. El sueño de casi todo niño que no nació en una ciudad costera es conocer el mar y de adulto, aunque puedes odiar la playa, el mar sigue teniendo algo: hay a quien le produce calma, a quien le da paz, quien simplemente quiero verlo en los vídeos y de lejos y a quien le produce un rechazo tan profundo que en vez de ser indiferente a él, lo odia con pasión. El mar tiene algo para cada quien y en este libro, el mar y sus peces son como si fueran un personaje más

Las ilustraciones son de Roger Ycaza y el color que predomina es el azul, seguido del naranja, haciendo un tremendo contraste que hace que las ilustraciones sean preciosas. El libro en conjunto es una historia preciosa que involucra temas como la discriminación, a pesar de no llamarla así nunca. Pero nos muestra sus efectos y, como muchos otros libros, nos deja claro que la discriminación no lleva a ningún lado y más bien sólo produce más problema. Algo que haríamos bien en recordar siempre. El Naranjo no deja de sorprenderme con sus libros (para bien) y recomiendo muchísimo este libro. Es la primera vez que tengo el placer de leer a Martha Riva Palacio y estoy segura de que seguiré haciéndolo en un futuro.


Este que ves, Xavier Velasco | Reseña

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Sinopsis: «El de la pintura es un niño desesperado. Necesita salvarse y no imagina de qué. Quiere salir de ahí, no sabe cómo.»
Ser niño es entender que el que lleva al infierno es un camino corto. Se llega sin saber, se escapa sin pensar, se vuelve sin querer.
El niño de esta historia se resiste a contarla. Antes que darle un sitio en su memoria, preferiría darle sepultura. Cuando menos lo espera, ya está inmerso en un juego trepidante que le permite todo... menos dejar morir una historia. Se trata de salvarla, ése es el juego.
No es que la infancia sea en sí difícil, sino que sus fantasmas resultan invencibles y sus muros -horror- inexpugnables. En un proceso inverso al exorcismo, el autor se transforma en personaje, el retrato en fantasma, la cicatriz en tinta: «Se escribe, igual que se ama o que se vive, porque no queda más alternativa, ni se ve escapatoria tolerable.»

Xavier Velasco y yo fuimos niños (y adolescentes) muy diferentes. Yo era tranquila y bien portada en general, aunque cuando los mayores no miraban y tenía influencia de otros niños era capaz de hacer bastantes burradas. Y las hice (con la ventaja de que, como era bien portada, siempre regañaban a todos los demás primero antes de fijarse en mí). Lo que Velasco y yo compartimos, así, lejanamente, son los pedos mentales que te deja el ser hijo único. De veras lo entiendo porque yo también aprendí a jugar sola y cuando jugaba con alguien me tenían que explicar todo mil veces, hasta que entendía. Sabía entretenerme sola, que era imposible para casi todo el mundo; hasta hablaba sola, fingiendo conversaciones. En serio, niños, ser hijo único te deja tocado. (También tener medios hermanos demasiado mayores para vivir contigo y crecer como hija única, que es mi caso).


¿Qué demonios es este libro? No tenía demasiado chiste porque ya me sé el final. O sea, que este libro es como algo anterior a La edad de la punzada (mismo autor, obvio) y La edad de la punzada es más o menos mi biblia de la adolescencia (con todo y lo diferentes que somos Velasco y yo). Pero igual, el asunto del libro no es saberse el final sino lo que está en el medio, junto con todos los pedos mentales de Velasco. Cuando yo era niña era igual de insufrible que Velasco, sólo que de manera diferente. En mi casa no había dinero para tener moto, pero sí para libros y para que yo escribiera historias sin final. (Aunque con el tiempo mejoré en ese asunto).

Probablemente este libro sólo sea de interés para los fanáticos de Velasco. Mi papá empezó a insistir que yo lo leyera casi el año que salió, pero tuve que pasar por Diablo Guardián primero. Si no, quien sabe qué hubiera pasado. Xavier me hubiera parecido insufrible, mimado. Al final, resulta que leer Diablo Guardián primero tiene sus ventajas. Es la historia de su infancia y como la vida no tiene estructura de novela (introducción, desarrollo, clímax y desenlace) este libro tampoco la tiene. Es corto porque no necesita más páginas. Es la historia de la infancia y se corta en cuanto esta acaba. Es la infancia sin aderezarla con nostalgia, es infancia, simplemente. Todas esas horas muertas y aburridas, el suplicio de ir al colegio y de estar en un grupo donde no te quieren,

Al final este libro me gustó porque puedo identificarme un poco con el protagonista, o sea, con Xavier. No en la parte de malcriado, mimado y desordenado del salón, pero si en todo lo demás. Sobre todo cuando hablamos de la soledad y de escribir. Suelo estar muy en paz yo sola porque siempre lo estuve cuando era chiquita. Tenía amigas en mi calle e iba a jugar, pero la mayor parte del tiempo lo pasaba yo sola con diez barbies y tres kens.


¿Que si recomiendo este libro? Claro que sí. Aunque sepa que no a todo el mundo le va a gustar como a mí porque espero que alguien lo encuentre y se sienta como yo, o le guste o recuerde su propia infancia. Qué se yo. Lo recomiendo.

Mis (otras) parejas favoritas | Series de TV

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Hay veces que me gusta escribir posts por el fangirleo y esta es una de esas veces que quiero recomendarles algunas de las relaciones que mejor escritas me parecen en la televisión y que más adoro que me hacen sacar mi lista de feels de lo más profundo de mi ser. Ahí es cuando hablamos de el amor (ah, el amor, el amo) y bueno. No estamos a 14 de febrero, pero les voy a meter tanta miel en los próximos minutos que como si lo estuvieramos, chicos. ¿Por qué me gustan las parejas que me gustan? Pues porque están bien escritas, porque verlos hasta darse una mirada me hace ponerme en modo fangirl extrema y... bueno eso. ¿Qué tienen que saber sobre las parejas que voy a poner aquí? Bueeeeeeno, que son canon y que probablemente haya spoilers del tipo quien se queda con quien, evitaré el resto de los spoilers cojonudos. (¡Es muy difícil hablar de parejas sin eso!)


D'Artagnan & Constance (The Musketeers)



En realidad los shippeo desde que leí Los Tres Mosqueteros (versión resumida 1, versión resumida 2 y versión menos resumida 3, todas para niños porque mis papás nunca consiguieron nada mejor), pero realmente fue la serie The Musketeers de la BBC la que me hizo considerarla en mis parejas favoritas de toda la vida gracias a lo bien que los desarrolla y lo bad-ass que hace a Constance (recordando siempre que vive en un mundo de hombres, por y para hombres). Me encanta la tensión sexual que hay desde el primer momento, lo mucho que abofetea a D'Artagnan y a los demás mosqueteros por ser unos imbéciles que piensan con la entrepierna, me encanta que le haga notar a D'Artagnan que las mujeres no pueden hacer lo que quieran. Los adoro a los dos.


Mucha gente se quejó de que en la última temporada no son uno de los grandes enfoques, pero en realidad, de las escenas que podemos ver de los dos, nos damos cuenta de qué tanto han cambiado en cuatro años y como ha cambiado su amor. Y, sinceramente, los guionistas suelen meterse con las parejas casadas y felices para poner drama innecesario y tonterías así que prefiero que no sean el foco de atención y sean tan geniales que los pueda seguir adorando.

Jack Harkness & Ianto Jones (Torchwood)



¿Ustedes creen que empecé a ver Torchwood así de la nada? No, ya iba medianamente spoileada (gracias a Doctor Who en parte y gracias a... bueno... Tumblr). Pero realmente no sabía nada de nada sobre la serie. No sabía lo bien escrita que estaba la relación entre los dos, no sabía que era una serie donde lo menos importante era la orientación sexual de los personajes y en ningún momento ese es un rasgo definitivo de ninguno de ellos. Y que Ianto Jones es absolutamente genial. Eché de menos ver un poco más de él en su etapa más emo, pero la verdad es que siempre le quedó un rastro de eso... Y me encanta con Jack (aunque no estoy segura de que sea lo más sano para su vida o para la vida de nadie, Jack no tiene la cara de ser la persona más emocionalmente estable). 

Bueno, no quiero soltar spoilers. De hecho, me estoy conteniendo bastante para ello, pero si todavía no los he convencido de que vale la pena perder su tiempo con Torchwood tengo algo que igual puede ayudarles a ver la increíble química entre estos dos (mientras yo sigo jurando que su relación es de las mejores cosas que he visto actualmente y que si no están conformes con la serie, hay un montón de audios de Big Finish y libros).



Poussey & Soso (Orange is the New Black)



Bueno, acabo de ver la temporada de Orange is the New Black y además de contenerme para no soltar spoilers más importantes, pues esto ya casi lo teníamos cantado después del final de la tercera temporada. A Poussey le hacía falta una novia (yo adoraba a la alemana, pero su papá se merecía el infierno y más... o mejor el cielo, que yo voy al infierno que vuelo y no quiero mala compañía) y era obvio que necesitaba ser alguien que le correspondiera... (además de que implican que Soso es pansexual o algo parecido o yo qué sé, lo cual es absolutamente genial). 

Oh, my god, vean como la mira
Me encanta ver parejas felices en la serie, porque esta es una serie que suele tener un montón de... bueno... drama (y comedia a partes iguales) y es bonito ver a una pareja que no pelea por estupideces todo el tiempo en la serie. Sigo conteniendo muy fuerte para no soltar spoilers (por el amor de dios, no entren a Tumblr) pero debo decirles que me encantó como desarrollaron su relación en la serie y que apenas del poco tiempo en pantalla que había por toda la cantidad de personajes nuevos y viejos, les dieron el tiempo que necesitaban. Y esto fue todo por esta entrada de fangirleo, chicos.

Libros LGBTIQ que valen la pena | #Pride2016

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Hoy, 28 de junio, es oficialmente el día del orgullo LGBTIQ, también conocido como el día de que los idiotas pregunten por qué no hay un día del orgullo heterosexual. Si les preguntan eso, por favor respondan que no hay un día del orgullo heterosexual porque a un hetero nadie jamás le ha cuestionado su orientación sexual, ni los matan por su orientación sexual, ni los insultan, ni... etcétera. Hay miles de ejemplos de por qué no hay uno. En la ficción, que haya libros sobre el colectivo sigue siendo como un tabú. Hasta hace pocos años, me resultaba imposible encontrar libros juveniles sobre el tema, porque la literatura LGBTIQ se asociaba con la homoerótica y se asumía que toda literatura LGBTIQ era erótica o porno. Ni les cuento de los cuentos infantiles LGBTIQ

Hoy voy a recomendar varios libros para todas las edades, desde novelas para los más grandes hasta para cuentos para los más pequeños.

Two Boys Kissing, David Levithan


Este es, quizá, uno de mis favoritos. David Levithan le da voz a las víctimas del SIDA cuando nadie entendía la enfermedad y había un gran prejuicio contra ella y hace de esas víctimas los narradores de esta novela que nos presentan a personajes diferentes. Dos chicos que quieren romper el récord del beso más largo del mundo, una pareja ya establecida de dos chicos, dos chicos que acaban de conocerse, un chico que está más perdido que nada y que está en el closet porque su familia lo odiaría si les dijera quién es realmente. Este libro, además, involucra a un personaje transexual, que suelen ser uno de los grandes olvidados en los libros de esta temática. ¿Por qué me gusta tanto? Primero, porque es juvenil y segundo porque es optimista sin olvidarse de los problemas que deben enfrentar muchos chicos como los protagonistas. Me gusta ese optimismo, me gusta que exista. Sin decir más, les dejo la reseña (que es viejísima) y se los recomiendo.

¿Te gustaría ser mi sol?, Sofía Olguín


Nunca había recomendado este, pero como me van a decir que siempre recomiendo los mismos de Bajo el arcoiris (una editorial que publica libros LGBTIQ para niños y los pone a su disposición en internet de manera gratuita), pues hoy voy a cambiar. En este cuento, Moncho recupera a su perro después de haberlo perdido años atrás con un nuevo nombre y de la mano de una chica que se llama Sol. Al principio, todo parece muy común, pero lo que él no sabe es que en realidad Sol no fue asignada como una chica al nacer, sino que es una chica transexual. El cuento también es optimista, es para pre adolescentes y adolescentes y habla de la transición, de la aceptación y, en parte, deja ver la suerte que tiene Sol con sus padres, que la aceptan tal como es. Les recomiendo mucho este cuentito que no es muy largo y que además cuenta con las maravillosas ilustraciones de Lita Gómez.

Carol, Patricia Highsmith


Llegué a este libro a través de la película y lo que me conquistó fueron las palabras que Patricia Highsmith le dedica al libro en el prólogo y en el afterword. Las protagonistas aquí son dos mujeres y esta es una de las primeras novelas de la temática que tuvieron un final que no era trágico. Patricia Highsmith habla de ese fenómeno y de las consecuencias que le trajo, pues ella misma dice que recibía cartas y cartas de personas que le estaban dando las gracias. Thérese es una joven que está trabajando temporalmente en unos grandes almacenes y allí es en donde conoce a Carol, el día que va a comprar una muñeca. Las dos se hacen amigas rápidamente y es entonces cuando Thérese empieza a cuestionarse lo que siente en realidad hacia Carol: ¿sólo amistad o es algo más profundo? La novela es muy muy muy recomendable y definitivamente me encanta. Para convencerlos, les dejo la reseña por aquí para que la lean entera. En un sólo párrafo, aunque sea tan largo, no le voy a hacer justicia a este libro.

Todos mis sueños, tuyos, Sofía Olguín


Este es mi favorito. Sin duda. Es mi libro preferido cuando hablamos de esta temática porque el protagonista aborda muchos problemas sociales sin muchos tapujos. En general se puede adivinar la voz de la autora, pero aun así no deja de ser increíble. Decir que está novela es sobre Alexis y sus relaciones con dos chicos distintos (Daniel, un estudiante yanqui de intercambio en la UBA) y Franco es simplificar demasiado el libro. El libro es Alexis, es su historia. Podríamos decir que este es un libro coming of age, pero en cierto modo es mucho más que eso: es la crítica social de Alexis, su inexperiencia ligando, su pasado, su mamá internada en el Moyano, sus amigos, sus relaciones, su vida entera. Uno de los detalles que más me gusta es el uso del español argentino y sus modismos: un libro ambientado en argentina no se vería real sin ellos. Sin más que decirles, les dejo la reseña y la recomendación.

El beso de la mujer araña, Manuel Puig


Esta es una de mis últimas lecturas, un libro que está todo contado en diálogo y con diversos documentos que nos ayudan a centrarnos (como las narraciones de grabaciones y cosas así). Molina y Valentín comparten una celda: el primero es homosexual (eso dice, aunque yo quedé confundida y creo que más bien tiene un problema de identidad de género, pues se siente mujer) y Valentín es un rojo comunista. Molina le cuenta películas y platican de muchas cosas: de sus mamás, de sus amores, de su vida un poco... El libro tiene lugar durante la dictadura argentina y quizá aquí todo el contenido LGBTIQ sea mucho más sútil, pero defintiviamente esta ahí, junto con un montón de pies de página explicando lo que se entendía por la homosexualidad en la época. Es uno de esos libros que no dejan de ser vigentes aun cuando el tiempo pasa y que, además, nos muestran todo el camino que ya hemos recorrido y el que nos falta por recorrer. Les dejo la recomendación aquí y la reseña para que la lean y se convenzan. 

Aristotle & Dante Discover the Secrets of the Universe, Bejamin Alire Sáenz


Este libro quizá no está entre mis favoritos de nada, pero me parece que es una buena recomendación aquí. Primero, porque está escrito de manera preciosa, segundo, porque sus protagonistas son latinos... chicanos, en realidad, o sea, mexicanos que viven y nacieron en los Estados Unidos. No es algo que suela ver en los libros de esta temática últimamente, está lleno todo de protagonistas blancos. En fin, Aristotle es difícil para hablar de sentimientos, la mitad del tiempo no sabe que siente con nada y Dante es mucho más abierto, llora mucho y admite que es gay sin ninguna dificultad para él (además de que tiene la suerte de que sus papás lo acepten). El libro está ubicado temporalmente varias decadas hacia el pasado, en una época donde la aceptación era aun menor que ahora y a Alire Sáenz no se le olvida ese detalle. Habla de la discriminación y de los prejuicios, pero dándole un tono optimista a su libro. Les dejo la reseña para que se acaben de convencer.

Nobel de literatura | Mini reseñas

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Bueno, hay libros en los que dejo pasar lo de hacer las reseñas una y mil veces porque no sé que decir, me da pereza o realmente no tengo tanto por decir porque ya mil personas han dicho lo que yo antes y siento que la entrada quedará muy corta para una sola reseña. Así que hoy pretendo hacerle justicia a unos cuantos de esos libros que se han quedado sin reseñas a lo largo de la historia y hacerles unas mini reseñas con el sólo propósito de recomendarlos y hablar de ellos. Los elegidos de hoy son todos premios Nobel de literatura y, dicha sea la verdad, es que pocas veces un Nobel de literatura me ha decepcionado. Sí, algunos libros se me han hecho más pesados que otros y algunos temas quizá no me han parecido tan interesantes... pero todos están bien escritos. 

Todo lo que tengo lo llevo conmigo, Herta Müller


Sinopsis: En enero de 1945, cuando el ejército ruso había ocupado Rumanía, se decidió que todos los hombres y mujeres entre 17 y 45 años de las comunidades alemanas asentadas desde hacía mucho tiempo en aquel país, fuesen deportados a campos de trabajo forzoso en la Unión Soviética.
Se trataba de una especie de castigo a Alemania por las atrocidades que el régimen nazi había cometido en el frente oriental.
La novela cuenta la historia de Leopold Auberg, un adolescente que es llevado a un campo de trabajo en lo que hoy es Ucrania, y sometido a durísimas condiciones, incluyendo hambre, frío, labores insalubres y, sobre todo, humillaciones. Allí permanece durante más de 4 años.

El título de este libro tiene una historia curiosa. En alemán es Atemschaukel, que significa algo como «osculación de la respiración» (es una de esas expresiones difíciles de traducir) y en inglés es The Huger Angel. En español, los editores decidieron mantener el título como la primera frase del libro que es Todo lo que tengo lo llevo conmigo. A lo largo de libro, esa frase hace perfecto sentido. Leopolg Auberg, el protagonista, pasó cuatro años en un campo de trabajo forzoso en rusia, el mismo destino que sufrieron miles de hombres y mujeres de familias alemanas asentados en Rumania y, según tengo entendido, el mismo destino que sufrió la madre de la escritora. 

El libro es un libro de esos descorazonadores, que te hace preguntarte a dónde llega la raza humana. ¿Los rusos tenían sus razones? Problablemente, los alemanes los atacaron en la guerra y mataron a muchos (con todo y que el General Invierno ayudó a los rusos). ¿Y estos alemanes Rumanos qué culpa tenían? En fin, la moral de este libro es bastante gris y el narrador no hace ningún juicio sobre nadie o nada. Se limita a narrar su día a día en el campo, entre el frío y el hambre que son mayores enemigos que los rusos. Es un libro lento y pesado, quizá por momentos hasta monótono, como la vida en los campos, pero en conjunto es un libro que cuenta una historia descorazonadora de una manera muy sencilla. 


Para Leopold Aurberg el problema no son los soldados rusos ni sus humillaciones, sino la constante hambre y todas las peripecias que hace para olvidarse de ella, o el frío y como lo sufre. Lo más descorazonador, quizá, es lo cambiado que está a su regreso a Rumania. Después de una experiencia así, nunca vuelves a ser el mismo. Leer este libro me costó sangre, sudor y lágrimas porque yo lo empecé hace muchos años, cuando no estaba acostumbrada a libros de este tipo y de esta temática, pero con todo y eso, lo recomiendo. Vale la pena. 

La escapada, William Faulkner


Sinopsis: Las aventuras y desventuras de un joven de principios de siglo: un niño de once años, que anda por el mundo con el chófer de su abuelo y un criado negro. El niño y el chófer roban el coche del abuelo y marchan rumbo a Memphis, sin percatarse de que en el automóvil se les ha colado el criado negro. Esta es la última novela de William Faulkner, ganadora del Premio Pulitzer en 1963, también es conocida como Los Rateros (The Reivers), fue llevada al cine en 1969 por Mark Rydell con Steve McQueen y Sharon Farrell como protagonistas principales

Por alguna razón con este libro empecé a leer a Faulkner y no recuerdo exactamente qué me llevó a escogerlo. Creo que porque con este libro ganó un Pulitzer o algo así. El libro es un libro que se trata de coches y carreras de caballos, por lo que hay un montón de conversaciones sobre caballos y cómo hacerlos correr y cómo funcionan las carreras y las apuestas y también hay un montón de cháchara sobre los primeros coches, esos que iban a una velocidad que no pasaba de los treinta kilómetros por hora y les fallaba absolutamente todo. Divertidísimo.

Pero aunque no lo crean, dejando de lado la cháchara del asunto si es que los temas no les interesan, es también un libro sobre la pérdida de la inocencia y cómo un niño de once años empieza a meterse poco a poco y antes de tiempo en el mundo de los adultos, acompañando al chofer de su abuelo a Memphis junto con el criado negro de la familia. Es un libro cortito e interesante, que habla además mucho sobre la sociedad sureña de aquellos tiempos en los ojos de un niño de once años. Como nota al margen diré que a Faulkner, además, se les olvidó presentarle el punto y seguido. Todos sus libros, tengo entendido, tienen esa particularidad: sabe usar la coma y el punto y coma como un experto para hacer oraciones larguísimas.


Se los recomiendo, sí; no tan ampliamente como el primero, pero definitivamente es un libro que vale la pena y para conocer como escribe Faulker, hasta interesante. Si lo leen y no les gusta, siempre pueden recomendárselo a sus enemigos.

Sula, Toni Morrison


Sinopsis: Esta es la historia de Sula y Nel, dos niñas que crecen juntas en un barrio de negros, compartiendo sus sueños e ilusiones. Ambas son precoces y curiosas, hijas de familias pobres. Pero el tiempo pasa y cuando Nel se casa, Sula se marcha del suburbio para ir a la universidad y viajar por el país. Diez años después, Sula regresa e involuntariamente destruye la familia y la felicidad de Nel. A partir de entonces, los pintorescos habitantes del suburbio la consideran una bruja malvada... Ambientada en los EE.UU. en el período de entreguerras, Sula es un portentoso retrato del poder de lo femenino en una comunidad pobre y rural de negros, donde las mujeres reinan como madres, hechiceras y depositarias de la tradición oral. 

Toni Morrison fue la primera mujer negra en ganar un Nobel de literatura. También, por lo que pude ver en las fotos de la lista que estaba revisando, la única. Quien me la recomendó también me dijo que si quería leer algo de ella, Sula era un excelente lugar para empezar. Y lo es. Sula es una novela cortita, la historia de dos mujeres negras pobres con destinos muy diferentes: mientras que Sula va en busca de mundo y estudios, Nel se queda en casa, se casa, tiene hijos y se vuelve una mujer respetada en la comunidad. 

El libro es un buen retrato de como vivían los negros antes, de lo que tenían que pasar y la pobreza en la que vivían muchas familias. También  los prejuicios que existían hacia las mujeres (algunos de los cuales siguen allí) y, por supuesto, del poder de las mujeres en sociedades como esas, en las que son vistas como seres misteriosos (brujas o hechiceras), veneradas por ser madres y por sacar adelante a sus familias. Definitivamente, si quieren conocer un poco más de Toni Morrison, este libro es un muy buen lugar para hacerlo y además no les muy largo (aunque ese argumento no debería contar mucho en este caso, es un libro que se lee rapidísimo por lo dinámico de los personajes). 


Por supuesto, muy recomendado. No todos los días recomiendo tres libros tan buenos y tan interesantes de un tirón, así que espere que les haya gustado esto y que se animen con alguno si es que su lista no es demasiado larga

Aya de Yopougon, Marguerite Abouet & Clément Oubrerie | Reseña

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Sinopsis (del primer tomo): Aya, Adjoua y Bintou son tres amigas del barrio de Yopougon, en Costa de Marfil. Son jóvenes, guapas y tienen ganas de hacer cosas: una prefiere bailar, otra salir con chicos, y otra estudiar para ser algo más que un ama de casa. Lo único que quieren es vivir sus vidas, y eso ya es mucho.

¡Sí, otra novela gráfica! Bueno, más bien, en este caso, es un comic dividido en seis tomos que cuenta la vida de Aya, sus amigas y algunas cuantas personas cerca del círculo familiar. La historia tiene lugar en un país africano llamado Costa de Márfil (si no lo conocen, los invito a ver Google Maps), concretamente en el barrio de Yopougon, hace algunas décadas y es una historia normal, común y corriente, de antes de la guerra. La autora explica que quería retratar a una Costa de Marfil que no fuera la de la guerra, para que la gente viera que Africa significaba otras cosas que no eran sólo desgracia, sangre y niños soldado (sin olvidar que esa es la realidad de muchos países) y definitivamente, lo logró. Aya de Yopougon es una historia muy normal, común y corriente, que podía suceder en cualquier país del mundo y que además parece una telenovela. 

Pero ey, una de calidad, divertida, que no romantiza el acoso o perpetua el machismo. Es una telenovela que, de hecho, hace reivindicaciones sobre la mujer y sus derechos, aun narrando en un entorno que dominaban los hombres. Aya, Adjoua y Bintou son tres chicas que, como dice la sinopsis, quieren vivir su vida. Sin embargo, siempre tienen algún descalabro o problema entre manos: desde padres que no las dejan salir porque las vieron bailando con otro hombre, hasta padres que no están seguros de si quieren que sus hijas sigan estudiando. Hasta padres que, por ejemplo, tienen ganas de tomar en matrimonio a una segunda esposa sin tomar en cuenta la opinión de la primera y, además, ignorando que no tienen dinero para mantenerla. 

Tiene una película y si saben francés la pueden buscar
En fin. La cosa es que es un comic sobre la vida cotidiana en Costa de Marfil. Para que no se nos olvide que África es algo más que guerra y desgracia y niños soldado. Que África es algo más que hambre y mujeres sufriendo terribles destinos (en países como Somalia, la mutilación genital aun se practica). Que África son muchos países y, sobre todo, muchísimas tradiciones. Yo, que me enojo cuando la gente cree que Latinoamérica es una, y que de aquí a la patagonia hacemos y comemos las mismas cosas, me puedo imaginara un africano cualquiera y su frustración cuando la gente cree que de Marruecos a Sudáfrica todo es igual. Varios libros y artículos y cuentos me han dado una perspectiva un poco más amplia y este cómic además ha ayudado. Nunca había leído nada en Costa de Marfil y era buen momento para empezar.

Lo que más me gusta es que es una historia acerca de mujeres reales interesantes. Ya sé que esto puede sonar raro pero estoy muy acostumbrada a encontrarme a la misma mujer en muchas obras de ficción... o al menos al mismo protipo: mujeres misteriosas y seductoras si escriben los hombres y mujeres fuertes (pero también enamoradizas) si lo hacen las mujeres. ¿Y saben qué? Esas mujeres son interesantes, ¡pero quiero más! En un mundo donde el 90% (o más) de la representación se lo llevan los hombres (blancos), escribir sobre mujeres siempre será sufuciente, sobre todo sobre mujeres africanas con distintos tonos de piel (desde el tono oscuro oscuro de Rita, hasta lo más "clarito" de Bintou), con distintos gustos, con distintas aspiraciones y distintos deseos. Así que no es que no quiera yo historias sobre mujeres fuertes, pero fuck it, yo quiero historias de mujeres interesantes.

El comic tiene seis tomos de más o menos entre 110 y 140 páginas. Al final de cada uno viene información sobre Costa de Marfil, recetas de platos típicos, información sobre las prendas de típicas y como puedes usarlas (cosa que me pareció interesantísima porque últimamente se debate mucho lo de la apropiación cultural y yo apoyo totalmente que la cultura se comparte con respeto y con conocimiento; sí, no somos un disfraz, quizá, pero una mujer que no es de mi país vestida de Adelita un 20 de noviembre o cualquier otro día patrio qué sepa quienes fueron las adelitas no me va a molestar casi nada. De hecho, probablemente a mí me saque una sonrisa). De hecho, la autora se esfuerza por sacar a Costa de Marfil del mito que une a África y a la guerra como dos cosas inseparables

La autora que no es por nada, pero se me hizo guapa ;)
Bueno, la verdad es que les recomiendo el comic y les recomiendo la historia. También les recomiendo ampliar la perspectiva y sacarse los ojos del ombligo... o de las historias ambientadas en Estados Unidos. De esas tenemos muchas, nos sobran. Pero historias como estas, hay pocas. Puede que el comic sea simplón, pero sabe como contar historias sobre mujeres con un abanico de personajes inmensos y eso es muy importante en un mundo donde todavía luchamos para tener representación justa en los medios. Ya sé que no me callo nunca sobre ese tema últimamente, pero es que tanto leer me ha hecho darme cuenta de lo ignorante que todavía soy y de lo mucho que puedo aprender. 

Total, Aya de Yopougon son historias de África. Historias de mujeres, de amores, de embarazos, de abusos, de injusticias, de pelear por lo que crees justo. Muy recomendado. Y para que vean que soy buena gente, les voy a decir cómo carajos lo conseguí porque parece que Norma Editorial lo tiene abajo de las piedras (al menos en México): está en la biblioteca feminista. Si lo veo un día en librerías, no duden que voy a ir corriendo al menos por un tomo.



Recuento de los daños | Junio 2016

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Yo estaba muy tranquila con mi bloqueo lector de mayo, sin ni siquiera intentar quitármelo porque esas cosas pasan y es mejor no forzarlas, además de que no leer no me afecta en nada cuando me acordé que muy probablemente yo estaría en la India a partir de agosto y ninguno de mis libros en físico (o casi ninguno) me iba a seguir hasta la India. Así que me puse a leer como si se acabara el mundo. Y no, mis días no tienen 30 horas (ya me gustaría que los tuvieran) y no tengo un giratiempos ni una TARDIS, aunque realmente me gustaría tenerla. Así que aquí va la lista de lecturas, sin contar audiolibros (porque esos los escuché, obviamente) ni comics (porque si no esto se hace eterno). Y por favor, antes de decirme que quisieran leer tanto como yo, recuerden que como cinco libros de aquí apenas si pasan de las 100 páginas porque me gusta leer muchos libros infantiles... y otros simplemente son pequeñísimos (excepto un par de tochos respetables).

El fuego en el que ardo, Mike Lightwood


Buena intención, mal libro. Intento de buena moraleja, quedó un poco agradable popurrí de drama. En fin, ya saben lo que opino de este libro. realmente espero que el autor siga escribiendo y que, por favor, por favor, por favor, pague una revisión extra de lo que escribe y esas cosas porque igual pueden salir cosas buenas... ¡pero esta no es una de ellas! O sea, la idea de fondo es decente y buena. La de fondo. Luego la cubrió de clichés, una redacción un poco (bastante) pobre y demasiado explicativa y todo se fue al carajo por un tubo. Ya leyeron mi reseña y bueno, hacen falta muchos más libros LGBTIQ en el mundo, pero si este es El Libro LGBTIQ, apaga y vámonos.

Una habitación propia Virginia Woolf


Virginia Woolf dice que una mujer necesita, para poder escribir en paz, una habitación propia y dinero. Es curioso para mí, que escribo en la sala de mi diminuta casa y tengo enfrente a la cocina, donde siempre hay movimiento. Pero al final del día tiene razón, porque siempre soy muy más productiva cuando estoy sola. Dejando de lado mis cavilaciones, fue la primera vez que leí a Woolf y me sorprendí bastante, me gusta como analiza lo que escribimos las mujeres (o habían escrito las mujeres hasta su época) y los consejos que da. Porque es cierto. Las mujeres no hemos hecho muchas cosas en el mundo pero no es porque no hayamos querido, es porque no hemos podido, no nos han dejado y hasta hace poco, la educación de la mujer era considerada un desperdicio. Buena lectura, aquí les dejo la reseña y el hangout en el que participé.

Hermano Lobo, Carla Maia de Almeida


Ay, que bonita es Ediciones el Naranjo. Adoro esa editorial. Creo que es mi favorita, pero no le digan lo mucho que le hago la pelota últimamente. Hermano Lobo es un libro impreso en páginas blancas y en páginas azules, nostánlgico y de alguien modo, un libro sobre la decadencia de una familia y el final de la infancia. Me agrada que temas como estos se traten en libros para niños, porque ahí es cuando más sincero y sencillo tienes que ser. No puedes adornar tu prosa con palabras inútiles que a los niños no les interesan y a la vez tienes que dejar claro el conflicto de la novela para que cualquiera lo entienda. Hermano Lobo me encantó, como ya lo dije en su reseña y lo recomiendo muchísimo. Además, me parece que es la primera vez que leo a una portuguesa.

El beso de la mujer araña, Manuel Puig


¡Este libro lo elejí yo para el club de lectura de La Noble y Ancestral Casa de los Black y es uno de los mejores libros que he leído en la vida! Ok, quizá exagero. Pero quiero que por favor piensen en cuántos libros hay escritos sólo con diálogos, sin ninguna descripción, ni nada por el estilo y los lectores pueden entenderlo todo, hasta lo que no vemos directamente. Este libro es de dos prisioneros en una cárcel argentina durante los años de la dictadura, que se la pasan platicando. Uno le cuenta películas al otro, se preguntan cosas, se hablan sobre sus vidas. Un libro precioso y que me encantó haber escogido. Escribí una reseña para recomendarlo por todo lo alto y pues se los recomiendo, qué más.

Ella trae la lluvia, Martha Riva Palacio


Otro libro precioso de el Naranjo. Sí, voy a seguir haciéndoles la pelota porque publican libros preciosos que a mí me encantan y así no se puede. Además, tuve la oportunidad de conocer a la escritora en la presentación del libro y es una persona muy agradable. Como quien dice, esta fue una lectura redonda. El libro viene con páginas naranjas e increíbles ilustraciones en donde, lo que más resalta, es el mar y los peces. Es un libro para niños que trata temás como la discriminación y la segregación, además de los prejuicios y como los aprendemos sin darnos cuenta. Por eso, y mucho más, es un libro maravilloso y que nadie se debería perder. Escribí la reseña, ya saben, porque el libro es preciosísimo.

Carol, Patricia Highsmith


¡Carol! Llevaba queriendo leerlo desde que la película estuvo nominada al Oscar y junio fue finalmente el mes en el que lo leí. Patricia dice, en el afterword, que tiene la impresión de que fue la primera novela publicada con una pareja homosexual (Carol y Thérese) que tenía un final feliz. Fue publicada al principio de los años cincuenta, cuando la mayoría de las novelas de esta temática tenían un final trágico, con suicidos, separaciones, vueltas al "camino correcto". Escribí la reseña para recomendarlo también por todo lo alto y espero que si no la leyeron en su momento, ahora sí le hagan un poco de caso a mi recomendación. 

Foro Rinascimento, María García Esperón


Este libro me lo regaló la autora porque fue publicado en Colombia, no aquí y obviamente María, a quien conozco desde que tengo trece o catorce años, es una persona increíble. Además, la portada también tiene a la Sibila Cumana que tiene uno de sus primeros libros, Sibila (no les quiero contar lo que sufrí yo para encontrar ese libro). ¿Alguien se acuerda de los foros de internet? Todavía existen, pero cada vez van quedando más en el pasado. En este libro, por medio de un foro, se comunican varias personas en todo el mundo y una joven en México, accidentalmente pone a varios en alerta por descubrir un misterio en los ojos de la Sibila. Es un libro entretenido, corto, misterioso y con varios personajes interesantes. Recomendado, si es que lo encuentran, que debe estar complicado.

Este que ves, Xavier Velasco


Otro de Xavier Velasco. Creo que ya nada más me queda un libro de él que no he leído pero que, si soy completamente sincera, no me quedan exageradas ganas por leer. Este me ha gustado porque es la historia de la niñez de Xavier y, como hijo único, entiende mis pedos mentales en eso de crecer en una casa sin quien jugar y con padres que pueden prestarte atención todo el maldito tiempo. Quizá a los que no sean muy fans el libro no les aporte absolutamente nada, la verdad, pero está entretenido, lo admito. Xavier era un poco odioso de niño y de adolescente (en La edad de la punzada), pero aún así lo quiero porque tenemos los mismos pedos mentales. Hice la reseña y todo.

Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, Octavio Paz


En realidad este libro no es de este mes, sólo lo acabé en este mes. Leerlo me tomó desde enero hasta acá. No, no es broma. Mientras que la primera parte (historia de la colonia y contexto social de la Nueva España) se me fue rápido, igual que la vida de Sor Juana, el análisis literario me costó meses porque no soy experta en eso y todo me sonaba a chino. Pero recuperé el ritmo al llegar al ensayo de restauración y los últimos escritos de Sor Juana. Sor Juana Inés de la Cruz es una escritora que me encanta y Octavio Paz igual, así que el resultado de este libro es bastante bueno... pero sólo si te interesa Sor Juana de verdad; sino, te recomiendo que te alejes. 

El segundo sexo, Simone de Beauvoir


Otro libro que me tomó varios meses igual, pero ni lo había marcado como empezado a leer. De hecho, es porque leí la mayor parte en este mes, leyendo diario y constante al menos medio capítulo. El Segundo Sexo si es un tocho de respeto y hay quien lo considera la biblia feminista. Puedo entender por qué aunque, miren ustedes, Simone de Beauvoir no se consideraba feminista cuando lo escribió. Este libro es sólo un análisis de la mujer en la sociedad de Simone y una recapitulación que abarca gran parte de la historia mundial. La verdad, se lo daría a leer a todo el mundo. Pero quizá su cantidad muy respetable de páginas no es para todo el mundo, así que ya saben, leer con discreción.

Soma. La tumba de Alejandro, María García Esperón


Este libro también me lo regaló la autora y es de sus temas preferidos: los griegos, los romanos y las civilizaciones de aquella época. En una historia contada a dos tiempos (el pasado, la muerte de Alejandro) y el presente (la búsqueda del Soma), llena de enigmas y personajes complicados. Me gustó un poco más que el otro que me regaló la autora y no pude evitar compararlos porque los leí casi juntos, aunque cada uno resalta por sus propios méritos. En el caso de este libro, también está publicado sólo en Colombia y es tan feo porque se hizo un concurso de portada en varias escuelas y mi ejemplar, obviamente, todavía no tiene portada. Espero que el ganador sea precioso. Ya saben, recomendado si lo encuentran, porque no dudo de que sea difícil de conseguir.

Demonia, Bernardo Esquinca


¡Un libro de cuentos de terror mexicano! Sí, mi emoción es de verdad. Y además lo tengo firmado porque conocí a Bernardo Esquinca y es realmente un tipo genial. Pero bueno, a Bernardo Esquinca lo conocí como por abril y a estas alturas del partido apenas voy leyendo el libro. Es el segundo que leo del autor (el primero fue Mar Negro) y no puedo más que decir que realmente me encanta ver un soplo de aire fresco en la literatura de terror mexicana. Ya. Bastante tengo de Carlos Trejo y Cañitas y que me intenten vender que esas basuras eran terror. Pero esto sí lo es, de verdad; había cuentos en los que podía sentir como se me erizaba el cuello. Recomendado

El eterno femenino, Rosario Castellanos


Este libro es la lectura conjunta de este mes que realicé con otras chicas y es una obra de teatro. Perdí la cuenta de cuando fue la última vez que leí teatro y creo que fue con Oscar Wilde y la importancia de llamarse Ernesto. Obviamente, leerlo no es lo mismo que verlo, pero igual esta obra es magnífica y puesta en escena debe de ser una preciosidad. Iría a verla si la anunciaran en cualquier lugar de la Ciudad de México en algún futuro cercano. En fin, debo decir que Rosario Castellanos hace una crítica a la mujer de su época y a las pocas opciones que tenía usando una buena sátira. Muy recomendado. Yo lo compré baratísimo porque lo edita el FCE (aunque también hay un pdf en la biblioteca feminista al que pueden recurrir si en su país no está el libro). 

Colaboraciones


Si llegaron vivos hasta acá, aquí les van mis colaboraciones en otros blogs, que ya saben que siempre las hay.

Plusbits Mx:


La hora del té:

Lo bueno, lo malo y lo absurdo de Orange is the New Black, season 4

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Advertencia: este post tiene spoilers y no tiene spoilers bonitos. Tiene destripes, te cuenta el final, tiene imágenes que te pueden contar el final. Así que si no has visto la temporada 4 de Orange is the New Black y no quieres enterarte de nada, cierra esta pantalla. El que avisa no es traidor. Hay spoilers.


Yo estuve todo junio, absolutamente todo junio, marcando los días en el calendario, lista para el Día D... digo, el estreno de Orange is the New Black. Soy muy buena fan. Vi todos los trailers y me pregunté qué carajos estaban planeando los escritores (a.k.a hijos de puta). Me pregunté cuándo más lograría odiar a Piper por ser una idiota (respuesta: not enough). Y cuando empezó la temporada, la vi de un tirón, como se deben ver estas cosas. La vi más o menos en este estado:


Lo bueno


Las latinas, obviamente. Esta temporada estuvo bastante centrada en las chicas latinas que hasta ahora sólo habían sido un poco relleno en las tramas de Aleida, Daya y Gloria. Maria y Blanca brillaron especialmente, sobre todo Blanca, que ha pasado de ser la loca que hablaba con Diablo en el único baño funcional a una mujer que la verdad no me gustaría encontrarme por la calle. Me gusta. Y me gusta que hable español todo el tiempo. Me gusta la backstory de María, de Maritza y de Blanca. Mi favorita es la de María porque estoy muy enamorada de Yadriel y de ella. Y me gusta que la de Blanca y Maritza no tenga que ver con drogas, que parece que todo lo que hacemos los latinos en las series estadounidenses es ser la servidumbre, las mujeres locas y los capos de la droga.

Poussey y Soso. Ya se veía venir, pero es que son tiernísimas. Sobre todo Poussey, que es todo un cinnamon roll para estar en la cárcel y obviamente es de mis favoritas, como del resto de los fans. Me encanta que tengan una relación tan buena, con todo y sus fallos, pero es que yo ya estaba hasta la mismísima madre de lo poco sano de la relación entre Alex y Piper. Necesitaba lesbianas en una relación bonita. 


Lolly. Oh, dios mío, Lolly entera. Ya me olía yo que no estaba en sus facultades mentales, pero la verdad me da pena lo que sufre porque literalmente nadie se toma la molestia de ayudarla. Me pareció tierno que Healy hiciera un esfuerza con ella, pues en cierto modo le recordaba a su madre (y miren que Healy me parece un creepy). Lo que me parece más triste aun es que Lolly es sólo ficción, pero debe de haber personas allá fuera en su situación que no reciben ayudas suficientes y no se toma lo suficientemente en serio la salud de la gente, parece que sólo hay un montón de estigmas. En fin, espero que podamos volver a ver cosas de Lolly más adelante en la serie, porque la verdad es que Psych se me bastante... feo.

La serie muestra lo ridículo que es cada que alguien dice White Lives Matter. Porque, para empezar, ser blanco no hace que nadie te mate por serlo, no en Estados Unidos. Que lo haga, además, dejando en ridículo a Piper, me gusta más porque odio a Piper y necesito verla darse cuenta de su estupidez crónica.

Cada segundo de Frieda en pantalla. A ver, por lo que yo sabía, le había cortado el pene a su marido o algo así dijo en la segunda temporada. Y ahora sale como asesina. Cuatro asesinatos, probablemente más por la expresión que hace, preguntándose si la procesaron por asesinar a un policía con su propia arma. Necesito verla más en pantalla, de verdad. En serio, cada segundo de ella es completamente oro.

Judy King diciéndole a Luschek: "you're a white straight man, you don't get to be the victim". Literalmente el único segundo de Judy King que me gustó en toda la serie. Por lo demás, me pareció una persona exageradamente creepy, racista (o sureña típica, estoy como las chicas negras: indecisa sobre eso) y muy aprovechada. Y me dejó a Yoga Jones irreconocible. Dios. O sea que sólo me gustó cuando le dijo eso a Luschek.



Abdullah siendo genial, Cindy siendo Cindy, Suzanne siendo tan interesante como siempre, Taystee con una oficina y un reloj y Janae teniendo un poco de más pantalla. Esas chicas son geniales y las adoro, de hecho, adoro cada momento que tienen en pantalla y me gustaría que fueran muchos más. Mi favorita es Janae y cada que dice algo soy feliz. Estoy desde la primera temporada rogando que le vuelvan a dar importancia. Y ahora, con Abdullah, me gusta la relación que tienen todas con ella. En fin. 

¡Nicky mi amor! Desde que salió dos segundos en un capítulo donde salía Sofía, reviví mis esperanzas. Me encanta. Y que esté fuera de max me hizo increíblemente feliz, pero también me dio mucha pena que esté de vuelta en las drogas. Sobre todo me rompió el corazón cuando Red le pregunta qué ha hecho mal y cómo puede ayudarla. También soy muy fan de su amistad con Pennsatucky y la shippeo muy fuerte con Lorna. No puede ser sano lo suyo con Lorna, peor el shippeo es fuerte.

Lo malo


Donuts y Pennsatucky. El principio fue glorioso, sobre todo cuando Tiffany le dijo que sólo quería asegurarse de que no estuviera violando a Maritza y el muy cabrón ni siquiera había sentido que la hubiera violado. La intenta convencer de que le dijo que la quería, entonces ya no es una violación y ella le contesta de manera gloriosa que no se sintió diferente. Pero la cosa no quedó allí, sino que Donuts intentó redimirse. Y al final todo acaba en perdonarlo y una horrible escena en el último capítulo. No sé, siento que estaba todo tan bien hecho la temporada pasada para dejarlo como lo han dejado esta... Me dejó hasta incómoda. 

Todos los nuevos guardias. Los odio a todos, eso no es misterio. Especialmente a Piscatella y al sádico. Sólo me caían bien la mujer (no mucho, pero no era una idiota completa) y Bailey. Así que ahora sólo me cae bien a medias la mujer. Extraño a todos los antiguos, Pornstache incluido. En serio, Mendez queda como un angelito de Dios al lado del sádico y de Piscatella. Y créanme, odiaba demasiado a Mendez.

El MCC. Especialmente la que se acuesta con Caputo. Hace que acostarse con Natalie Figueroa sea mucho mejor. Los odio y necesito verlos caer, como jenga.


El maldito final. A ver, está escrito de puta madre pero me rompió el corazón. Y ya dijo Samira Wiley que le gusta que la gente esté enojada porque eso es algo que está pasando y que parece que nadie se da cuenta. Y lleva años pasando y la comunidad negra lleva años gritándolo. Así que es irónico que un personaje negro (y queer) tenga que morir en una serie para que la gente empiece a reaccionar. Pero como dijo Samira Wiley: está bien que estén enojados, ahora que enfoquen ese enojo en lo que de verdad está pasando. La muerte de Poussey nos jodió a todos sus fans, porque eran muchos. Sobre todo porque Poussey es uno de esos personajes que se merece todo lo bueno en la vida. Pero no es así. Y Bailey es un pobre idiota en el lugar equivocado que se ganó mi odio. Necesito verlo castigado, pero junto con él, también necesito ver caer al MCC (porque son los principales responsables). Me dolió el corazón ver a Taystee junto a su cuerpo, llorando. A Brooke en los brazos de Norma. A Janae de tan mal humor y tratando mal a todos los que le daban el pésame y dándole un golpe bien dado a una de las nazis blancas. El cabello de Abdullah en un intento de animar a Cindy y a Janae. Está escrito de puta madre el final, porque se nota que Poussey importaba, que no sólo es una muerte más. Y que el hecho de que ni siquiera digan su nombre haga que se desate un desastre en la prisión me encanta. 


En fin. Que sí, que ese final me dejó el kokoro hecho pedazos. Quiero volver el tiempo atrás y que eso nunca pase. Pero la vida sigue y espero que todos los del MCC se pudran en el infierno y sean obligados a caminar descalzos sobre legos. También necesito que el papá de Poussey tire Litchfield, ladrillo por ladrillo. 

Lo absurdo


Lorna, esa mujer es una caricatura. La verdad, a mí me parece muy creepy la manera en la que espanta a todos los hombres, porque justamente ella tiene la culpa. Quizá por eso me gusta con Nicky, las dos son unas cabronas. Pero bueno, a su pobre marido le deseo que no le vaya mal, aunque el hombre también es increíblemente patético. 


Piper creyéndose gagsta'. Piper haciendo cosas. Piper siendo inútil. Piper siendo racista. Piper creando un grupo nazi por idiota. Piper completa. ¿Quedó claro que la odio? Es sólo por si acaso. Es que viene un gangster de verdad y Piper se caga en los pantalones. (Por cierto, necesito que Stella vuelva a aparecer y le joda la vida a Piper porque los dos segundos que sale esta temporada, se nota que Piper la dejó jodida). 

Y creo que ya. Esta temporada no hay tanta absurdez. Ah, no, sí, Cindy diciéndole a los Janae que los negros también son racistas. Sí, es cierto, pero nunca a nivel estructural. Igual faltó clarificar eso porque he visto a mucha gente usar las capturas de ese episodio para todas las cosas equivocadas en el mundo. 

Y ahora sí, eso es todo. A esperar la temporada que viene


Libros mexicanos | Mini reseñas

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Esto de poner mini reseñas, cosa que ya había hecho antes, pero no con frecuencia, me están ayudando a recomendar libros que nunca reseñé porque no encontraba qué decir como para llenar una entrada entera. Esta vez quiero hacerle honor a los libros mexicanos. ¿Por qué? Bueno, últimamente, me doy cuenta de que todos los blogs tienen una cantidad exagerada de libros que vienen de Estados Unidos, Inglaterra, a veces Australia, a veces Irlanda. A veces, reseñan libros chinos, japoneses, coreanos. A veces, español (especialmente si el blog es español). Rara, muy rarísima vez, hay africanos, latinoamericanos, o escritores del oriente medio. En un intento de solucionar eso, esta vez voy a recomendar tres libros mexicanos con sus respectivas mini reseñas.

Estos en especial son libros que definen a México y son parte de nuestra historia, no libros cualquiera. Hay algunas omisiones (lamentablemente) pero no podía ponerlos todos. Ya habrá otra ocasión. 

Pedro Páramo, Juan Rulfo


Sinopsis: Años cuarenta del siglo pasado. Alentado por su madre en el lecho de su muerte, Juan Preciado viaja cargado de ilusiones en busca de su padre, a quien no conoce. Pero al llegar a Comala, el lugar donde le dijeron que vivía, sólo encuentra recuerdos... Los recuerdos de todo un pueblo en torno a ese hombre, Pedro Páramo: de cómo se convirtió en el patrón de la hacienda más importante de la región; de cómo mató, extorsionó o utilizó a todos sin escrúpulos; de cómo se enfrentó a la revolución; de cómo, por culpa de su frustrado amor por Susana San Juan, terminó por pudrirse en vida... y Comala entera con él. 

Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo

Esa frase es mítica. Así empieza la búsqueda (¿búsqueda?) del padre de Juan Preciado, un tal Pedro Páramo. Pero parece que ya no queda ningún Pedro Páramo, sino sólo una leyenda. Un hombre que usó, abusó, extorsionó y mató. También embarazó. También amó a Susana San Juan. Juan Preciado va poco a poco buscando entres los recuerdos y la leyenda del que fue su padre, en Comala, que parece estar podrida en vida (¿vida?). Más bien, parece que Comala es un pueblo lleno de almas en pena.

Con esa frase de arriba empieza una de mis novelas favoritas. Pedro Páramo debería ser lectura obligatoria en las escuelas, pero ya si quieren me conformo con que sean cuentos de El llano en llamas (también de Rulfo) sólo que sin censurar (alguno lo censuraron en un examen). Más que nada porque me acuerdo de Aura y me imagino que si Pedro Páramo fuera un libro obligatorio, igual un día le toca leerlo a la hija/o de un funcionario. Igual y, quien sabe, al niño no le gusta. Igual y alguien le va con el cuento al papá/mamá. Igual y no saben de que es el libro o igual y sí. Pero igual y lo consideran malo para los niños y pasa lo que Aura y lo prohíben. 

Aunque viéndolo así, se pondría de moda. Las ventas subirían como la espuma (como las de Aura de Carlos Fuentes en su momento) y todos querrían leer Pedro Páramo (ahora sí, de a de veras). Pedro Páramo es la historia de muchos pueblos de México, hundidos en la pobreza y en la miseria, manejados por terribles terratenientes dispuestos a todo. Pedro Páramo es una historia de almas en pena y un poquito de amor (por Susana San Juan). Es salir a buscar un padre (si es que alguna vez lo fue) y encontrarte con su leyenda. Pedro Páramo es México. Y por eso, sólo por eso, por favor, léanlo.

Hasta se los paso gratis si hace falta. Casi como que se los regalo. Pero lean Pedro Páramo, por favor. 

La región más transparente, Carlos Fuentes


Sinopsis: La región más transparente es la primera novela mexicana a la que podemos aplicar el término cosmopolitismo, debido a la tesis que sostiene sobre la conformación de la ciudad a partir de diversos orígenes, ideas y clases sociales. Su título proviene de una expresión de Visión de Anáhuac, ensayo que va y viene de la crónica a la viñeta histórica, del poema en prosa a la estampa costumbrista, escrito por Alfonso Reyes, y que sirve como punto de partida a la novela, ya que utiliza la Decena Trágica (acontecimiento histórico con el que culmina el ensayo) como inicio del rumbo que tomará la vida de los moradores

Este libro también es México. Pero es un México diferente. Pedro Páramo es la miseria de los pueblos y la pobreza. La región más transparente son los nuevos ricos después de la revolución y es la clase media. Es, además, la ciudad de México después de la revolución y un montón de historias entrelazadas unas con otras, de la revolución para adelante. Es esa resignación perpetua de que aquí nos tocó vivir, en la región más transparente del aire. (Sí, de ahí sacó Cristina Pachecho el título de su programa). 

Este libro lo leí en la prepa. Teníamos dos meses, porque todos saben que no tiene poquitas páginas. Lo leí en cuatro días, antes del día de revisión. A mi profesora no le interesaba qué habías entendido o qué habías analizado. Hacía cinco preguntas medio estúpidas a los que se quedaban a la mini evaluación (nombres de personajes, parentescos obvios) y al final te preguntaba tu opinión. Podías ponerle que era el mejor libro de tu vida o una mierda putrefacta, no importaba, pero ya te había hecho leerlo. 

Desde ese día hasta entonces, no me he cansado de decir que sí, La región más transparente es en parte el México post revolucionario. Como que nunca salimos de la revolución, como que nos atacaron los caudillos, el gobierno, los nuevos ricos, los viejos ricos que, milagrosamente, seguían ricos. Como que ahora, en nombre de la revolución, hablan unos y otros. Pero ¿qué significó realmente? Quien sabe. Aquí la protagonista es la ciudad. La región más transparente del aire, qué le vamos a hacer.

La noche de Tlatelolco, Elena Poniatowska


Sinopsis: La noche de Tlatelolco es el testimonio más completo y más emocionante sobre el movimiento estudiantil que cambió la historia de México y sobre el crimen de Estado que le puso fin. A partir de su aparición en 1971, década tras década y generación tras generación, ha sido la fuente primordial para quienes quieren saber qué sucedió en 1968, pues recoge y transmite el clima de enorme alegría que reinó durante el movimiento, su cauda de asombrado dolor y la decisión compartida de no olvidar. El libro de Elena Poniatowska, leído y releído por cientos de miles de personas, es uno de los mayores clásicos en la historia de nuestras letras y su inigualable prestigio se debe a sus extraordinarias virtudes. Bajo la modesta apariencia de una simple reunión de voces recogidas por una periodista, se esconde una inusitada perfección en el arte del tejido, una notable capacidad para transmitir, mediante el recorte y el entramado, Estados de ánimo, ritmos crecientes, gritos y silencios, colores y gestos. En la sencilla prosa coloquial con que la autora toma nota de lo que le dicen sus testigos, late y es perceptible aún hoy, a más de cuarenta años de los hechos que narra, la valentía y la emoción de la cronista y de las voces que recoge; esa valentía y esas emociones encienden las páginas rebeldes, resistentes, de este libro entrañable: un riquísimo y enorme mural de voces que vienen de todos los rincones de la sociedad y que dio vida para siempre a esa noche de sangre y fuego que el gobierno en turno quiso ocultar a toda costa, uno de los momentos más dolorosos de nuestra historia.

Muchos historiadores, intelectuales y pendejos comunes dicen que hay un México antes del 2 de Octubre de 1968 y un México después del 2 de Octubre de 1968. No sé si sea verdad. Yo nací en el '95 así que no tengo ni idea. Dicen que es algo así como antes de Cristo y después de Cristo. Sí, ejemplo pendejo, pero qué quieren, a estas horas mi cerebro está pensando en otras cosas. Bueno, Elena Poniatowska escribió un libro dedicado al 2 de octubre. O más bien, compiló una serie de fotografías, entrevistas y las puso en un libro hablando del movimiento y de la noche de Tlatelolco. Incluso hoy, las cifras exactas de muertos son estimaciones.

Cuando Octavio Paz añadió Postdata al Laberinto de la soledad, tuvo que recurrir a diaros extranjeros para encontrar una cantidad que se asemejara a la realidad, pues en México los muertos no eran más de veinte. Los Bichir aparecieron en una película que se grabó sin permiso y que estuvo prohibida muchísimo tiempo; aún hoy, si quieres ver Rojo Amanecer te tienes que resignar a la mala calidad de las copias que quedaron. El 2 de octubre es como un tabú y Elena lo rompe todo. Entrevista a los que estaban a favor del movimiento, a los que no, a los que no tenían ni idea de nada. A los que lo traicionaron y a los que no. Los que huyeron y los que acabaron en la cárcel. Los periodistas que lo vieron. A todos los que pudo. 

Así que este libro que es más periodístico también es impresionante. Es el primero y el único (#VergüenzaSobreMiVaca) que he leído de Elena Poniatowska. Recomendadísimo, pero eso no hace falta decirlo. Si hice estas mini reseñas es para recomendar libros mexicanos que valieran la pena, no les iba yo a poner aquí a Carlos Cuauhtémoc Sánchez o a Trejo. No, puro libro de calidad.

Indiaventuras de una Poulain

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Noe me dio el título
y Cris me corrigió la entrada
(Las dos quieren ser famosas)

Me subí un avión en la Ciudad de México el 31 de Julio de este año y aterricé en Nueva Dehli casi el 2 de Agosto. Sin embargo, una ciudad no es su aeropuerto y yo salí por fin a la India al día siguiente, a eso de las dos de la tarde, con el pleno sol, en Chandigarh. De vivir en una de las aglomeraciones humanas más grandes de latinoamérica, pasé a vivir en un pueblo tres calles al oeste de Chandigarh, en Punjab, India. Prometí que iba a escribir lo que me pasara y que iba a subir fotos al blog, pero más bien en dos meses lo único que he hecho ha sido dejar de lado todo. Olvidarme un poco del blog, de los libros, de las reseñas y tomarme un tiempo. Sin embargo, se acerca el cumpleaños número 7 de mi blog y no quería dejarlo pasar de nuevo. No quería que me agarrará otra vez de vacaciones bloggeras.

Así que vamos a empezar.

Dos meses es algo que se dice fácil pero no lo es tanto, más si nunca has viajado y lo más lejos que conoces son los altos de Jalisco. Nunca había salido de México, nunca había ido al norte, nada más conozco una playa. No conozco más de cinco estados de la República. Y, por alguna razón, ahora estoy en la India. Ayer hice dos meses. La expresión «me fui al otro lado del mundo» nunca había sido tan literal. La India y México estan en el mismo paralelo, cuando aquí es de noche allá es de día. ¿Y saben qué? Lo estoy disfrutando como nunca antes.

El camino no ha sido fácil ni ha sido rápido. Ha sido. He tenido y no he tenido suerte. He querido matar a todos de frustración y he aprendido a reírme de esa mala suerte que hay días que me sigue a todas partes. Porque de repente estás en el aeropuerto de Nueva York y son las cinco de la mañana y estás en una fila para que te den un nuevo horario para el vuelo que acaben de cancelar. No hay taxis, no están dando hoteles porque es imposible, no hay nadie y además tú vas a perder un vuelo al día siguiente. Y te preguntas que más puede salir mal.

Y llegas a Chandigarh y te siguen pasando cosas. Has perdido clases, no importa que la carta dijera que todo empezaba el 4, resulta que están desde el 25 de Julio. Igual no importa. Conoces gente maravillosa. Descubres que la India puede ser tanto caótica como hermosa y te empiezas a enamorar de ella al mismo tiempo que la odias. Detestas el sentido de la higiene, porque no existe. La comida, porque en el norte todo tiene masala y eso en grandes cantidades sabe terrible. Descubres que habla inglés nada más la gente de la universidad y aun así sobrevives. Tomas fotos. Te preguntas mil veces qué te trajo a la India.

Y conoces gente.

Un día estás a las doce de la noche comentando algo que estás viendo en Netflix y alguien dice: «¡Reykjavic University, yo intenté aplicar allí!». Yo también intenté acabar en Islandia. Y un francés te dice lo mismo. Y de repente te estás pregunta qué hubiera pasado si los hubieras conocido en un lugar diferente porque, como están las cosas, parece que siempre estuviste destinada a conocerlos. Así que la India me eligió ―yo no la elegí a ella, me cayó enfrente y yo sólo tuve que decir que sí― y aquí estamos, dos meses después, queriéndonos y odiándonos al mismo tiempo.

Les podría contar curiosidades de la India, que las hay a montones, pero las salvaré para otra ocasión. Esta entrada que no tiene que ver con libros ―ya vendrán las que sí tienen que ver con libros― es para contarles que estoy en la India, por si todavía no lo sabían y que la India es maravillosa y que probablemente, venir a la India es lo mejor ―y lo peor― que hice en mi vida. No podría pedir mejores amigos para ver Netflix a las doce de la noche y quejarme al día siguiente que no me puedo levantar. Para tomar millones de fotos de paisajes increíbles y quejarme con la boca abierta ante lo que la India tiene que ofrecer. Así que aquí vamos. Estos son dos meses en la India y esta entrada va a ser muy larga. (¿Ya les parece? Eso fue sólo la introducción)


No hay cosa más icónica de la India, fuera del colorido y la ropa tan hermosa, que los rickshaws de las películas de Bollywood. Y si no han visto una, ya deberían estar viéndola. La foto es en Chandigarh, cuando un buen conductor decidió que se iba a tomar una siesta en el trabajo. No he explorado Chandigarh demasiado bien porque esta lejos e ir y volver es una odisea. La primera vez que fuimos casi morimos de regreso porque se nos hizo tarde. Y ni que decir de que, como casi nadie habla inglés, casi morimos doble.


La Independencia de la India es el 15 de Agosto (un més antes que la de México) así que hubo actos en la universidad y una amiga y yo decidimos que lo mejor que podíamos hacer, obviamente, era salir a pasear por la universidad en pijama. Si me buscan, estoy al fondo, con mi amiga (afgani, estudia MBA y oye a One Direction). No nos enteramos de nada porque hablaron en hindi y en punjabi todo el rato, así que sólo nos regresamos a nuestro cuarto a poner el aire acondicionado después de caminar bajo el sol.

A principios de septiembre decidimos viajar a Jaipur y creo que es uno de los lugares más bonitos que he visto en mi vida. Sin exagerar (perdón San Miguel de Allende, pero creo que ya te ganaron unos cuantos lugares). Chandigarh es una ciudad nueva y tiene algunas curiosidades, pero nada como los sitios turísticos como Jaipur, llenos de palacios, templos y fortalezas. Porque además, en Jaipur me subí a un freaking elefante. ¡ELEFANTE!

Exhibit A
Exhibit B
Para quien tenga curiosidad, primero se sube quien lleva al elefante, por la trompa (haciendo que el elefante se siente) y luego lo lleva hasta unas escaleras para que puedas subirte. Cuando camina, te balanceas y lo ves todo desde arriba. Se siente maravilloso y si vienes a la India tienes que hacerlo al menos una vez, al menos de que le tengas miedo a los elefantes o que se yo.

Backstreet Boys versión India
Uno de los lugares más icónicos de la India es el Hawa Mahal ―Wind Palace― un palacio donde vivían todas las princesas reales y que tiene muchísimas ventanas ―Wikipedia sabe cuantas― y que fue la primera cosa que visitamos en Jaipur. Por favor, que no se note mi cara de «pasé 14 horas en un sleeper bus con un aire acondicionado que congelaba, mi cabello se pegó, está desordenado, pero esto es maravilloso». (Sí, pasé 14 horas en un autobus).

Más del Hawa Mahal
Si por algo se distingue Jaipur es por sus Forts. Fuimos a tres en el mismo día, acabé muerta y casi deshidratada pero valió la pena. Sentir que estás tan arriba, que puedes verlo todo, que mucho años atrás hubo soldados y guerreros defendiendo esas fortalezas. Y ya estoy pensando demasiado todo, que al final son sólo un montón de piedras y edificios pero a mí me encanta ver piedras porque todas tienen historia.

Alguien me dijo que eramos artistas de gira
La verdad, no podría pedir por un mejor squal
Hasta arriba de la Amer Fort. Porque somos los reyes den mundo, pero no es lo más arriba. Así que después de caminar un buen tramo y no morir en los túneles llegamos a la siguiente. Tiger Fort.

Best photo someone ever taken to me.
(It was the french angle)

Como dato curioso, en Jaipur hay monos como en la ciudad de México hay perros callejeros. Nada más que a la mayoría de los perros callejeros les puedes dar comida y a los monos, bueno... la verdad es que son muy agresivos y que aunque les tomes fotos y se queden tranquilos un rato eventualmente sentirás que intentan matarte. De hecho, fuimos al templo del mono y oscureció mientras estábamos allí y parecía película de terror. Si van a la India y van al templo del mono en Jaipur, por favor, no se lleven nada porque los monos son bien pinches ladrones. 

La verdad es que no se podría pedir por mejor compañía. Y miren donde nos venimos a encontrar. En la India, al otro lado del mundo para mí, en una ciudad bien al norte... bueno, en un pueblo bien al norte, en una universidad que nos hace gritar de frustración. No sé, se siente ver al final del viaje, además de llevarte todas las cosas bellas que viste en la cámara y en la memoria, poder decir que también te llevas las amistades y que una de las mejores cosas fue la compañía.


Les debo una segunda parte de Indiaventuras. Pero ya será en la semana. Hasta aquí llegamos por hoy.

Indiaventuras de una Poulain (bis)

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Sí me quedaron pendientes fotos, pues no podia dejar de contarles de más cosas de la India. La India tiene lo bueno, lo malo, lo mejor, lo pésimo. Tiene el poder de ponerme feliz y bajarme a la tierra en segundos y acabar riéndome de mi desgracia y de mi situación. No sé. Dicen que la India es una Madre, que por eso tú no la escoges, sino que te escoge ella a ti. Sabrá el Dios en el que no creo porqué acabe en la India, porque ni yo lo sé.  Les juro que yo quería acabar en Islandia o en Polonia y de ahí reboté para acá. Sin embargo, a pesar de que nunca pensé en acabar en a India cuando veo fotos como la que les voy a poner abajo me acuerdo por qué estoy en la india. 

La foto en cuestión es de la Amer Fort y me la tomaron después de verme mirando total y completamente embobada esos jardines y esos arcos. De hecho, si notan, mi cara tiene esa expresión de «todavía no puedo creer que estoy aquí». Para entonces llevaba ya un mes en la India, así que pueden estar seguros de que todavía no se me ha quitado esa cara. La pongo seguido. 


La India me ha hecho darme cuenta de que toda la gente que conoces la conoces por casualidad. Al final les puede acabar gustando lo mismo o no, pero aquí lo que nos unió fue la India. Compartimos algunos gustos, no nos entendemos la mitad del tiempo. Dicen que el truco es hacer y dejar hacer. Total, ya preguntaras por sus cosas raras y ellos preguntarán por las tuyas. Igual te preguntan cómo haces plátanos fritos o igual se horrorizan al ver como pones plátanos con arroz y te los comes como si nada. (¡ES NORMAL EN MÉXICO, CARAJO!). Al final, lo que nos acaba uniendo es el perpetuo asombro por la India y la necesidad de tener a alguien que entienda por lo que estás pasado. 

Así que ahí estamos, contra el barandal, viendo Jaipur hacia abajo, quizá preguntándonos como podemos estar en ese mismo momento en un lugar tan hermoso. O yo que sé que estaban pensando los demás. Pero lo cierto es que es imponente. 


Por alguna razón que no acabo de comprender, a los indios les encantan los pavo reales. Tengo una bufanda verde (oh, que sorpresa, nadie veía venir ese color) que tiene, en cada orilla, un majestuoso pavo real. La mitad de las cosas están decoradas así. A mi me fascina porque los pavo reales, aunque son animales cuya actitud me pone de nervios, me encanta como se ve la decoración basada en ellos. O sea. Por favor. Miren la foto. 



Esta foto además tiene una historia chistosa. Logramos que un hombre nos la tomara, aunque hubo que enseñarle a usar la cámara. Y ya que nos la tomó, sin decir nada ni pedirnos nada (probablemente porque no hablaba inglés), nos hizo señas para que no nos moviéramos, sacó su celular, se lo dió a alguien y fue a posar con nosotros. Y luego otros dos hicieron lo mismo. Nos sentíamos pinches super estrellas. A veces piden selfies. A mí sólo me las han pedido dos veces, las dos veces en el hostal donde me estaba quedando. 

Bueno, bueno, ya me estoy quejando sin fotos de Jaipur, una de las ciudades que no deben dejar de visitar si andan en el norte de la India. Bueno, no está tan al norte como Chandigarh, pero deben ir. Es preciosa, tiene palacios por todas partes y lugares a donde ir. Les dejo un par de fotos más porque son fantásticas (y yo estoy alimentando mi ego).

Notese la bolsa y la backpack en la espalda.

Ahora vamos a hablar de Chandigarh, de verdad, de la buena, lo juro. Hubiera empezado en orden cronológico, pero contarles y decirles mil veces que Jaipur es hermoso pudo conmigo. Total, este no es un blog de viajes y yo no tengo ningún instructivo para escribir ninguno. Así que antes de que divage más les contaré cosas de Chandigarh: es de las ciudades más ordenadas de la India. No, esperen, creo que es la más ordenada. Al menos tiene semáforos y, aunque cruzar la calle sigue siendo un deporte extremo, es menos deporte extremo que en otros lugares. Está limpia para los estándares del país y no la he explorado mucho, la verdad. 

Si vienen (y lo digo como si la India estuviera a la vuelta de la esquina) en la misma época del año que yo, pueden saltarse el Rose Garden porque igual se encuentran esto nada más:

Miren cuantas rosas
En serio, qué cantidad de rosas
Por otro lado, cuando la India te frustra demasiado y quieres volver al mundo occidental del consumismo, hay malls donde puedes sentir que estás, que se yo, de vuelta en occidente. Exceptuando el hecho de que te catean en la entrada y que si eres mujer te catean detrás de una cortinita. Nada como cuando vas a los conciertos y la única diferencia entre mujeres y hombres era que te cateaba alguien de tu mismo sexo. Y resulta que por alguna razón la comida mexicana es algo que tiene fama por aquí y hay un Chilis. Claro que si en México quieres comida mexicana no vas a pun puto Chilis, pero aquí si quieres algo que dizque parezca pues vas ahí a dilapidar tu dinero. Por ejemplo.

Nuestras caras de éxtasis son reales
Bueno, volvamos al tema. El punto de la India no es acabar en los malls, excepto cuando quieres comer proteína de verdad. Si no eres vegano o vegetariano antes de venir, la India te jode la dieta, tu cuerpo no está acostumbrado a vivir así y adelgazas. Bueno. Volvamos al punto. Volvimos a Chandigarh para conocer el Rock Garden y es, definitivamente, uno de los parques más bonitos que he visto en toda mi vida. Igual y no le gana a la Ciudad Universitaria con su serpiente y su zona escultórica, pero es precioso. Miren: 




De hecho, si se fijan en la gente en las fotos, como uno de mis roomies hizo notar, se dan cuenta de que la India es uno de los lugares más coloridos del mundo. Es increíble cuando de hecho te encuentras entre toda esa manera de color y ves como la gente sigue visitando los parques de su ciudad, tomándose selfies, yendo en familia, en pareja o con amigos. Es precioso y si el paisaje es igual de bonito, pues el buen día está asegurado. Ay, India, préstame tantitos de tus colores, ¿no?

En una de las partes del Rock Garden había columpios y, bueno, acabamos como niños de cinco años. La India va a resultar buena hasta para reconectar con tu niño interior. Aquí la prueba:


Ya no tengo mucho más que contarles sobre el lugar, creo que dije que es precioso las suficientes veces, pero creo que todavía no he mencionado lo maravilloso y divertido que es mi squad. Pero por si acaso, vamos a recalcarlo de nuevo:

Brandon, what the fuck are you doing?
Un poco Backstreet Boys sí somos
Happy People
Bueno, en fin, no sé, todavía me falta contarles un chingo de cosas sobre la India, sobre todo sobre ser mujer en la India, los mitos, las realidades, las frustraciones, el mal chiste que es mi universidad. Pero quería que las dos primeras entradas sobre mi vida en la India fueran de cosas felices y tuvieran cosas padres. Además de que quería que conocieron a mi squad que es maravilloso. Así que ya saben, si vienen a la India alguna vez, déjense llevar. No hay otra manera de sobrevivir a la India. Tengan paciencia, sonrían, no intenten entender nada. No hay modo de entender este lugar, pero hay muchas maneras de disfrutarlo y asombrarse de sus magníficos paisajes, palacios, templos, fortalezas. Todo. 

Sonrían. Aprendan cultura. Pregunten si quieren. Abran su mente. No todo funciona como funcionen las cosas en el país de donde vienen. La India es única. A la India no la entiendes, a la India sólo la puedes disfrutar.

Estoy en, casi, el punto más alto de Jaipur

Siete años de divagar en internet

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Estoy escuchando música de Lila Downs. Es cinco de octubre. Se me está acercando la fecha. Tengo que escribir algo. Tengo que poner mis manos sobre el teclado y escribir algo. Tengo que hacerlo. Y en vez de eso, estoy escupiendo todo esto sobre el pedazo blanco. ¿Qué escribo, por Quetzalcoatl? ¿Qué escribo? Son siete años, carajo. 

Cuando salió la última película de HP, tomarse foto con el libro era ley
Hace siete años yo tenía trece años y muchas ganas de tener una página de internet que, según yo, iba a tener un chingo de visitas instantáneamente. Mi contenido era pésimo y yo no lo promocionaba en las redes sociales y además no me conocía nadie, así que a nadie le interesaba mi blog. Pero yo seguía escribiendo porque tenía esperanzas, aunque me daba pena que la gente que de verdad me conocía supiera que yo escribía en internet. Mi familia o mis amigos. Ahora hasta les hago tarjetitas de «tengo un blog en internet, léelo». Bueno, pongamos que hace siete yo tenía trece años. Así estaba:

Medio emo, sí
Yo, trece años, quería ser escritora, pero estudiar algo con matemáticas, estaba en secundaria y escribía fanfiction de Harry Potter en clase. Todavía me pregunto qué pensaba mi profa de matemáticas cuando me los quitaba. También tenía nulos conocimientos de informática y apenas si había aprendido a poner acentos. De poner comas ni hablemos. Ahora mando a la gente a aprender a ponerlas, pero en ese entonces no era que me las comiera, es que las ponía en todos los pinches lados. Ha pasado el tiempo. Un poco. Tengo veinte años, vivo en la India, estudió Ingeniería en sistemas. Voy a cumplir veintiuno, digo groserías a veces (más de las que mi mamá quisiera y menos de las que dicen mis malhablados amigos), escribo mucho, leo mucho. Sé más cosas. Estoy menos pendeja, como quien diría. Renombre en internet todavía no tengo. Me conocen cuatro gatos de los que me comentan dos y uno me avisa por whatsapp que me leyó. Mi familia me apoya tanto que le da like a mis entradas en Facebook y leen una de diez, si la leen. 

Pero aquí sigo. Porque mientras cuatro gatos me lean, no planeo irme. Aunque me tome vacaciones de dos meses y luego me de topes en la cabeza para, bueno, volver a conseguir el mismo nivel de visitas. Debo ser la única loca que, aunque cuenta las visitas, no se preocupa por el SEO, el marketing ni nada de eso. Quizá así me leerían diez gatos en vez de cuatro. Pero bueno. 

Ahora estoy así:

La última foto que me tomé yo sola en el DF

Veinte años. Siete escribiendo en internet. ¿Saben qué? El tiempo pasa volando. Y de ese tiempo, hay unas cuantas cosas que quiero recordar. Como, por ejemplo, mis siete entradas favoritas. No les pongo las más vistas porque, sinceramente, la gente que busca mi blog tiene mal gusto. O sea, es una de fanfics que ya ni siquiera me gustan. ¿Qué están pensando, gente?
No se pierdan esas entradas porque fueron las que más me gustó escribir. Objetivamente no sé si son las mejores, pero son algunas de las que disfruté más. Este blog me ha abierto muchas puertas a otros blogs, a conocer a algunos de mis autores favoritos, a compartir mis hobbies. Divagaciones de una Poulain no es sólo un blog sobre libros. Es un blog sobre mi viaje a la India, sobre mi vida, sobre lo que pienso, sobre las series que veo. Es un blog sobre mí. Es un blog que tiene tutoriales y a la vez entradas sobre feminismo. Es parte de mi vida.

Y hoy, esta pequeña, pequeñísima parte de mí cumple siete años de existir y de estar ahí. ¡Por que cumpla muchos más y por que yo siga escribiendo!

Siempre tendremos Manali (día 1)

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Para D.A.M.B, por todas las aventuras que hemos vivido
y todas las que aun nos falta vivir.
Ellos, principalmente, son la razón por la cual esta
entrada es bilingüe.

(We'll always have Manali, day 1)
For D.A.M.B, for all the adventures we've lived,
and all the adventures we still need to live.
They are the main reason to this post to be 
in two languages.

Somos #SquadGoals // We are #SquadGoals
Manali es un pueblo ubicado en Himachal Pradesh, al norte de la India, en un valle en el medio de los Himalayas. No, no cerca del Everest, ese está en Nepal. Pero Himalayas igual. Es un lugar donde gracias a dios hace frío, los paisajes son hermosos y hay marihuana por doquier. Sí, esa es la mejor descripción que se me ocurrió, perdón, es que no tengo palabras todavía para hablar de cómo es exactamente Manali. Hace falta estar ahí, en el techo de una casa, alumbrado sólo por la luna y las estrellas, mirando al cielo, para entender realmente lo hermoso que es Manali.

Manali is a village in Himachal Pradech, North India, in a valley in the middle of the Himalayas. No, it is not near the Everest, that is in Nepal. But hey, still Himalayas. Manali is a place where there's cold weather ― thanks god ― the sights are beautiful and there's weed everywhere. Yes, that's the best description I have right now, sorry; I still don't have the words to describe how Manali really is. You only get how beautiful Manali is when you are there, in the roof of some house, just with the light of the moon and the stars, looking at the sky.

Manali está más a o menos a ocho horas de Kharar en camión... o más, si de regreso te toca en el peor camión del mundo que se desvía y se para trescientas veces aunque nadie se baje y nadie se suba. Pero esa es otra historia para otra ocasión, total, todo es parte de la aventura, cosas buenas y malas incluidas. Llegamos a Manali el sábado en la mañana, nos instalamos y nos dispusimos a salir a caminar después de un chai y «descansar» un rato. Como no era exactamente lo que se dice temprano y estabamos muertos, caminamos todo el camino hasta Old Manali.

Manali is, more or less, eight hours away from Kharar by bus... or more, if in the way back you get the worst bus that has ever existed and it takes another route and stops three hundred times even though nobody goes up or down, But that story is for another occasion; all is part of the adventure, bad things and good things. We arrived to Manali on Saturday Morning, we left our stuff and we got ready to go out wlaking after drinking a chai and *resting* for a little while. As it wasn't early-early and we were almost dead, we just walked all the way to Old Manali.

La vista y el lugar eran preciosos. Las pruebas, abajo. 

The view and the place were beautiful. Prooves, just below.

Himalayas

Cosita bonita // Cutie 
Vaquita // Little cow

Squad walking



Caminamos mientras Brandon ―el otro mexicano en el squad― les enseñaba español a dos chicos que eran sorprendetemente rápidos en él. Uno intento enseñarnos a contar del uno al cinco en árabe, pero fracasamos porque las palabras eran muy largas; en hindi es más fácil y además se parece un poquito al español (egg, do, ti, uno, dos tres). Llegamos a Old Manali, nos sentamos a recargar energías con comida chatarra y una bebida de mango que también puede ser llamada diabetes instantánea y es deliciosa y tomamos algunas fotos. Manali es colorido y pintoresco, en cierta manera me recuerda a los pueblos de México. Al final mi mamá tiene razón: todos los pueblos se parecen a su manera.

We walked while Brandon ― the other mexican in the squad ― taught English to two guys who were incredibly fast at it. One of them tried to taught us to count from one to five in Arab, but we failed because the words were so long; it is easier in hindi and it sounds like spanish (egg, do, ti, uno, dos, tres). We arrived to Old Manali, we sat down to recharge energies with junk food and a mango drink that can be called instant diabetes and it's delicious; we alsa took some pictures. Manali it's colorful and it reminds me to Mexican villages. My mom was right all the way along: all the little towns look alike in its own way.

International squad

River!
Squad caminando // Squad walking


Tanta marihuana... // So much weed

Después, cuando ya estábamos medio muertos de sueño y de hambre, decidimos que, como buenos extranjeros viviendo en la India por dos meses, íbamos a ir a buscar dónde comer. Comida Occidental. Lo sentimos, India, tu comida es rica, pero diario aburre y no es que encontremos comida italiana todos los días. Comimos en un lugar llamado Cafe 1947 ―un lugar que probablemente deben probar si van a Manali, pero sin pedir vino tinto, que lo ponen en el refri―, estuvimos ahí un rato antes de regresar a casa para relajarnos, revisar nuestras fotos, dormir, descansar...

Then, when we were almost dead of hunger and lack of sleep, we decided that we were going to look for occidental food. India, you're great. Your food is great. Seriously. Just not everyday, it just gets boring and we don't get to eat italian everyday. We ate at a place called Cafe 1947 ― a place you can try if you go to Manali, but please, don't ask for red wine unless you want your red wine directly from the fridge ― we just chilled there for a while before going back home to relax, check our pictures, sleep, rest...



¿Fotos del regreso? Claro que hay, tomamos fotos de todo. 

Pictures of the way back? Of course we have them, we take photos of everything.

Sol en Manali // Sun in Manali 



Mantras en el puente //  Mantras on the bridge
Ya en casa dormimos, descansamos y cenamos. Además, como era el cumpleaños de Maxime a.k.a chico francés compramos unos pastelitos y cantamos el Happy Birthday en al menos tres idiomas diferentes porque somos unos cabrones multiculturales. Vimos un capítulo de Stranger Things supuestamente antes de dormir y cuando menos lo esperábamos, estábamos viendo las estrellas en el techo. Las estrellas de Manali son las estrellas más luminosas y más hermosas que he visto. Nunca he visto tantas estrellas en otra parte. Nunca he visto un cielo que, como ese, me deje sin palabras. Aunque, para ser justos, también es la primera vez que me acuesto en la azotea de una casa a ver las estrellas. 

Para dejarlo claro: valió la pena.

At home, we slept, rested and had dinner. Also, it was Maxime's birthday a.k.a french guy (if you're reading this, and I bet you're gonna be reading this sometime, joyeux anniversaire !) so we bought pastries and we sang the Happy Birthday in at least three different languages because we are multicultural motherfuckers. We watched one episode of Stranger Things before going to sleep ― supposedly ― and then, we ended watcheng the stard in the roof. Manali Stars are the brightest and the most beautiful stars I've ever seen. I've never ever seen so many stars before in any other place. I've never ever seen a sky like that one, I didn't ― don't ― have the word to describe it. But, still, it's the first time ever I lay down on the roof of a house while freezing just to look at the stars.

For the record: totally worth it.

Half dead, half amazed by the stars
Así que todavía no estoy segura si creo en el destino, pero si creo que acabamos en la India por alguna razón. Que estamos en la misma universidad por una razón y que, de todo lo que hemos pasado, no me arrepiento de haberlos conocido y de tener un squad tan genial. Igual ya me estoy poniendo sentimental, pero estoy segura de que la serie de casualidades que nos trajo a la India pasó por algo y que nos conocimos por algo. Aunque sólo nos hayamos conocido para acabar en los Himalayas viendo esas estrellas, sé que valió la pena. 

So, I'm still not sure if I believe in destiny, but I do believe we ended up in India for some reason; that we are in the same university for some reason and I don't regret having met them ― you, in case you're reading ― and certainly I don't regret having this awesome squad. Now I'm getting really emotional and all, but I'm sure that all the coincidences that brought us to India happened for something, mayve it happened because we needed to be there, in that roof, watching at the stars in the Himalayas. It's all worth it. Just for that sky and that company, it's all worth it.

Orgullosa de haberlos conocido, D.A.M.B.

Proud to have met you, D.A.M.B.

(Rompí el inglés y el español tantas veces que ya no quiero ni releer)

(I broke English and Spanish so many times I don't want to re read this)

Siempre tendremos Manali (día 2)

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... o cómo despertar después de dormir a las 4am. Historia de nuestras vidas.

... or how to wake up after sleeping at 4am. Story of our lives.

Love you, guys
Después de haber roto el inglés y el español suficientes veces la entrada pasado todavía no me doy por vencida y sigo escribiendo en bilingüe. De hecho, si no rompiera tanto el francés y supiera como conjugar sin hacer que mis maestras de francés se horrorizaran, igual y era trilingüe. Pero bueno, bienvenidos a Manali, día 2. Si todavía no se aburren de leer mis indiaventuras, muchísimas gracias. Si sólo vienen aquí porque hablo ―escribo― de libros, vuelvan luego.

After having broke English and Spanish enough times in the other post, I haven't give up and I'm still writing in two languages. Yay for me. In fact, if my writing in French was a little better ― if I didn't suck at usding verbs ― maybe I would try. Well, so..., welcome to Manali, day 2. If you're not tired of reading my indiadventures, thank you so so mucho. If you only come here because I talk ― write ― about books, try another day. 

Yo me desperté considerablemente temprano, si consideran que me dormí como a las dos de la mañana con algo de minutos, todavía oyendo a los otros dos chicos hablar en su balcón. Hablaron hasta las 4am, así que en la mañana parecían más cadáveres que personas vivas (lo siento, es verdad). Nuestros anfitriones nos hicieron el desayuno ―huevos revueltos y leche o chai calientito―. La idea de ese día era ir a tirarnos al vació en parapente, pero el clima no nos ayudó, había demasiado viento y nubes, así que lo dejamos para el día siguiente y decidimos caminar de nuevo por el mismo camino del día anterior, sólo que esta vez, con dirección a un templo. Hadimba Temple en Manali, de hecho.

I woke up considerably early, if you consider I slept at 2 am with *x* minutes, still hearing at the other two guys talk in their balcony. They talked until 4am, so in the morning they looked like corpses instead of alive human beings (I'm really sorry, but it's true). Our hosts prepared us the breakfast ― scrambles eggs and hot milk or chai. The plan that day was to do paragliding, but the weather didn't help: there was too much wind and too many clouds in the sky, so we just left it for another day and we decided to walk in the same road the day before, headed towards a temple. Hadimba Temple in Manali, in fact.


Mexicans in India
El squal completo // The complete squad




Casi todos los niños en Manali eran amables y nos decían hola, algunos preguntaban nuestro nombre. Los de la última foto nos dijeron hola, que bajáramos y, cuando uno lo intentó, le gritaron que no. Niños raros. Pero bueno, ahí tienen las fotos del camino que recorrimos ese día... que fue exactamente el mismo que la vez anterior, pero con distintas tomas. ¡JÁ! Por si no se han aburrido de ver fotos, aquí tienen más.

Almost every kid in Manali was nice to us and they said "hello!" every time, some of them asked our names. The ones in the last picture said hello to us and then told us we should go down with them; when one of us actually tried, they shouted "don't come!" Weird kids. Well, there you have the pictures of the road we walked that day... Yes, it was the same road as Day 1, but the pictures are different. HA! In case you still want to see more pictures, here they are.




Llegamos al mismo lugar que la última vez, donde compramos algunos snacks y botellas de agua y de ahí tomamos otro camino hacia el templo. Para ese entonces uno de mis pies dolía bastante y por alguna razón estaba más muerta que viva. Imaginen mi cara al darme cuenta que para llegar al Hadimba Temple tenía que subir unas escaleras demasiado empinadas y demasiado largas para mi dolor de pies (aunque no tan largas como las de Malinalco, su zona arqueológica tiene más de 400 escalones). Pero, al llegar al templo y descansar un poco, todo valió la pena. 

We arrived at the same place the last day, we bought some snacks and bottles of water and we took the road to the temple. At that moment, my right foot hurt a lot and for some reason I was more death than alive. Just imagine my face when I saw the stairs I needed to climb in order to reach the Hadimba Temple: too many steps for me ― although Malinalco is worse, its arqueologic zone has more than 400 steps. But, we reached the temple and we rested a little while, I discovered, it had been worth it. 

Escaleras del infierno // Stairs from hell



Justo afuera del templo había un yak al que te podías subir y tomar fotos. Le tomamos una foto al yak y pagamos la increíble cantidad de nada. 

Just outside the temple there was a yak, to take photos with. We took a picture of the yak and pay nothing. 


Además, hay mujeres cargando tiernos y gordos conejos. No los toques, no los cargues si te los ofrecen, no hagas nada. Te cobrarán si lo haces. Te puedes tomar foto con una serpiente, pero cuesta 100 rupias y igual yo odio las serpientes, así que no hay problema. Intentamos entrar al templo, pero la fila era demasiado larga y en vez de eso sólo merodeamos afuera de él y vimos a la gente.

Also, there is women with fat and cutie rabbits. Don't touch them, don't carry them if they offer to you, do nothing. The women will charge you. You can take pictures with a snake, but it cost 100 rupees and I hate snakes, so no problems there. We tried to go inside the temple, but the queue was too long, so insted of going inside, we just roam around a little watching the people.

Grabando un vlog // Recording a vlog
Hadimba Temple



Después caminamos un poco por los alrededores y encontramos unas bonitas rocas para posar y tomarnos fotos, porque sí, nos gusta mucho tomar fotos y tomarnos fotos. Por esto de documentar la vida en la India y esas cosas.

We walked a little and we found *beautiful* rocks to pose and take photos, because yes, we like to take photos of ourselves and the things we see in India. Just to document out life in India and that stuff.

Squad photo!
Dog, look at the camera, godammit!
International cuties in India

Teníamos hambre así que decidimos volver a casa. Decidimos que nosotros cocinaríamos algo porque, después de todo, nuestros anfitriones nos habían hecho el desayuno. Pero claro, entre decidir ir a casa y llegar a casa hay un trecho largo y bastantes aventuras qué contar. Resulta que íbamos caminando por la calle en dirección al sitio de taxis cuando nos topamos con una bonita estación de bus en el camino. Muy rústica, miren. 

We were hungry, so we decided to go back at home. We decided we wanted to cook ―Maxime y yo, que sabemos cómo― because after all, our hosts prepared the breakfast for us. But of course, deciding something and actually doing it it's a different think and I still have a lot of adventures to tell. We were walking towards the taxis when we found this cute bus station in the road. Very rustique. 


Nos paramos allí y alguien perdió una botella del otro lado y Brandon saltó y todos acabamos saltando y entrando en el parque del otro lado. Nos tardamos un poco y nos encontramos a nuestro vecino del piso de arriba en nuestro departamento, lo saludamos, caminamos por ahí, Brandon tomó fotos raras y después nos salimos. Nada más que contar, excepto que Maxime abrazó a un árbol. 

We stopped there for a while and someone lose a water bottle in the other side and Brandon jumped and we all ended up jumping and entering the park in the other side. It took a little while, so we met our neighbor in the floor above us in our apartment, we said hello, we walked around there, Brandon took weird pictures and then we went out. Nothing else to say, except that Maxime hugged a tree. 


Después de eso, en vez de dirigirnos a casa, nos detuvimos en el centro de Manali, lleno de gente, de luces, de restaurantes y tiendas. También de niños y adolescentes que estaban allí en viajes escolares, familias de turistas comprando cosas y un restaurante de comida punjabi que le dio pesadillas a Maxime. Acabamos comiendo snacks en una tienda curiosa donde encontramos cosas que nunca antes habíamos visto en la India: té inglés de verdad ―Earl Grey y English Breakfast Tea―, Toblerone y un intento de baguette que, por supuesto, no era una baguette y sólo logró que Maxime tuviera más pesadillas ―y eso que todavía no les he contado nada sobre la cara que pone cuando ve que en una tienda ponen English Wine.

After that, instead of going home, we stopped in Manali's downtown, full of people, lights, restaurants and shops. Also, full of kids and teens in school trips, tourists buying souvenirs and a restaurant that served punjabi food and gave nightmares to Maxime. We ended up eating snacks in a store where we found stuff we have never seen in India: real english tea ― Earl Grey and English Breakfast Tea ― Toblerone and a failes baguette that, again, gave Maxime nightmares ― and I haven't told you yet about the face he makes when he sees a store that sells *English Wine*. 

Brandon y un pastor alemán
¡Parece navidad! // Looks like Christmas!
El squad caminando, como siempre // Squad walking, as always.
La tienda // The store
Después de eso fuimos definitivamente a casa y ya no tengo más fotos, pero hay videos que algún día verán en Youtube, lo prometo. Todavía teníamos mucho por hacer. Como ponernos a bailar en medio de la sala. Disha, de hecho, demostró sus habilidades para bailar todo: árabe, bollywood, kpop, Shakira, Enrique Iglesias y hasta twerking. #SquadTwerkingInManali. ¿Quién de nosotros hubiera pensado que iba a acabar bailando así en los Himalayas algún día? Yo, por ejemplo, soy la primera persona de mi familia que viaja a Asia, al menos que yo tenga conocimiento. No, todavía no acabo de contar este día... si supieran la resistencia que tenemos para no dormir...

After that we went home, definetively and I have no more photos but there are videos that you are going to see sometime in Youtube, I promise. We still had plenty stuff to do. Like dancing in the living room. Disha, in fact, showed her talent to dance absolutely everything: arab, bollywood, kpop, Shakira, Enrique Iglesias and twerking. #SquadTwerkingInManali. Which one of us had ever thought we were going to end up partying in the Himalayas? I am the first one in my family who has ever travelled to Asia, for example. No, I still cannot finish with the second day in Manali... If only you knew how much time we can be awake...

Vimos Whiplash, una película que me causa estrés, cocinamos unas cuantas papas fritas de la manera en que mi mamá las hace ―no estuvieran tan mal― y unos huevos sin casi aceite ―cómo lo logramos es casi un misterio―. Y luego fuimos al techo de nuevo a ver las estrellas y hablar, pero esta vez llevamos sillas y cobijas para protegernos del frío. Hablamos. Descubrimos un montón de cosas acerca de los demás. Descubrí que tener amigos en la India es genial y que los voy a extrañar como loca cuando vuelva a México. Además, vimos una estrella fugaz ―muchas, pero esta fue especial― y pedimos un deseo. Y hablamos de como, si en millones de años alguien está allá afuera en el cielo viendo directamente hacia la Tierra, probablemente va a vernos en esa azotea, hablando de cosas profundas. Y luego nos fuimos a dormir.

We saw Whiplash, a movie that actually stresses me, cooked some fried potates the way my mom does it ― wasn't so bad ― and some eggs with almost no oil ― how we managed to do so is still a mistery. And then we went on the roof again to see the stars and talk, but this time with chairs and blankets to protect us from the cold. We talked. We discovered a lot of things about each other. I discovered that having friends in India is awesome and that I gonna miss them like crazy. Also, we saw a shooting star ― many, actually, but that one was special ― and asked for a wish. And talked how, if in million years someone out there in the sky if looking directly to the earth, maybe it's going to see us, in that roof, talking about deep shit. And then we went to sleep.

No, estaba bromeando, nada de dormir todavía.

No, I was kidding. No sleep yet. 

Hubo una pelea de tacos con Brandon y Maxime envueltos en cobijas. Maxime ganó, just for the record. Y sí, hay un video de ello. Porque lo mejor que puedes hacer en la madrugada es ver una taco pelea. Hablamos hasta las cuatro de la mañana y luego nos fuimos a dormir. Tengo que hacer una compilación de todas las tonterías que decimos, sería un éxito.

There was a taco fight with Brandon and Maxime wrapped in blankets. Maxime won, just for the record. And there's a video documenting it. Because the best thing you can do at that time is watch a taco fight. We talked ultil 4am and then we went to sleep. I have to make a compilation of al the shit we say, it would be a success. 

One last squad picture // Una última foto del squad

#NiUnaMenos

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No sé cuando empecé a ser consiente de que a las mujeres nos mataban por ser mujeres. Crecí escuchando las noticias de las muertas de Juárez sin saber exactamente por qué eran noticia o por qué era tan importante remarcar que eran mujeres. Crecí también, creyendo que si un chico te molestaba era porque le gustabas. Todos juraban que eso era verdad, que estaba bien que un chico te jalara las trenzas porque eso significaba que le gustabas. No importaba que tuvieras cinco años, estuvieras en pre primaria y no supieras lo que significaba gustarle a alguien. Pero también tuve suerte. Tuve padres que me dejaron tener los juguetes que quise sin decirme que algo era de niñas o de niños. Me dejaron tener espadas, carritos y a todas las princesas que quise. Pero mientras yo crecía en esa burbuja, a las mujeres ya las estaban matando por ser mujeres. 

Así que perdonarán que hoy haga un pequeño paréntesis en mis aventuras en la India y hable de un tema que nos afecta a todas. Y a todos. Porque somos la mitad de la población y nos matan por ser el sexo débil, por decir que no, por rechazar a alguien, nos matan porque ya nos violaron, nos matan porque igual creyeron que lo íbamos buscando como íbamos vestidas, nos matan porque cortamos con alguien. Busquen las historias, los nombres. A las muertas las mataron sus ex novios, sus ex maridos, sus parejas, sus violadores.

Ayer explotó algo y hoy declararon paro de mujeres. Total, si no importamos, que produzcan sin nosotras, ¿no? Si la gente se indigna más por un graffiti en una pared (vandalismo, sí, si quieren) que nuestras vidas yo también quisiera ser pared para que la gente se escandalizará así cuando me toquen sin mi permiso. En vez de eso, me dicen exagerada, loca, feminazi. Todo eso, si quieren, pero me da miedo caminar sola de noche, me cambio de acera si me sigue algún hombre y siempre tengo el celular en la mano por si algo pasa. Pero de repente ayer me detuve a ver a la gente, sobre todo a los que estaban sorprendidos de que fuéramos tantas mujeres enojadas y de que lo estuviéramos tanto. ¿A poco no se dieron cuenta de que nos están matando?

Los números son claros. Al día, en México, siete mujeres son víctimas de feminicidios al día. Feminicidio es considerado como tal si la víctima presenta signos de violencia sexual, si tiene lesiones o mutilaciones, si existen antecedentes de violencia familiar, laboral o escolar de su agresor, que haya existido una relación sentimental o amenazas, entre otras características. En el Estado de México, durante los primeros meses de este año, ya había 121 casos de feminicidio. Y la cosa no es sólo en México. Es un problema que está afectando a toda latinoamérica, a todo el mundo. Nos están matando y a la vez están sorprendidos de la rabia, del enojo. Están indignados porque en Argentina rayan paredes, pero no porque nos matan todos los días. En fin, no juzgo. Cada quien tiene derecho a indignarse por lo que le de la gana. Nosotras también.



Si nos están matando, lo lógico es que alcemos la voz.

Ya me han explicado que en vez de indignarme por los feminicidios, debo de indignarme por las niñas en Somalia o las mujeres en Arabia Saudí. Por ellas también me indigno. También son mujeres, también sufren la violencia ―mucho peor que yo, porque ellas no tienen las oportunidades que yo, no les tocó mi vida medio privilegiada, no les tocó mi familia, ni mi educación y mucho menos mis oportunidades―. Me duelen. Pero reclamar los derechos no es algo excluyente. No le estoy negando nada a nadie, no estoy atropellando la libertad de nadie. Porque la verdad es que tengo miedo. A mí me dijeron que en la India tuviera cuidado y lo he tenido ―aunque me da rabia, todavía, decirle a un hombre que le conteste al chico que me está acosando o que no me pierda de vista en una fiesta porque tengo a un stalker a cinco metros o no andar sola muy de noche― pero donde vivo en México, donde está mi casa, zona supuestamente segura donde no pasa nada, van más de seis chicas desaparecidas y encontradas muertas en menos de dos meses. ¿Cómo no voy a tener miedo?



A pesar de todo, todavía hay quien insiste que en vez de #NiUnaMenos debería ser #NadieMenos. Mire usted, cuando ande caminando de noche en la calle, con miedo, con celular en la mano, o con las llaves, cuando mejor no salga porque le podría pasar algo, cuando a usted le digan que se lo andaba buscado por la ropa que traía o cuando la sociedad entera insista que cuando una mujer dice que no, en realidad quiere decir que sí, pero se está haciendo la difícil, entonces viene y me dice #NadieMenos. Porque disculpe usted, pero nos están matando.

Es que es bien chistoso. Nada más se les ocurre venir a reclamar sus derechos cuando a las mujeres nos da por reclamar los nuestros. Yo ya entendí que me van a decir exagerada y feminazi, que algunos hasta se atreveran a decirme que las mujeres calladas se ven más bonitas, pero ya no puedo entrar a ese juego y ya no quiero. Hoy la cosa se trata de las mujeres, de nuestras historias, de que no seamos un número. Decir que asesinan a 7 mujeres en México al día por el hecho de ser mujeres es impactante, pero no deja de ser un número. Póngales cara, nombre, edad e historia a las víctimas. Pueden encontrar una recopilación en Facebook, de donde la mayoría de los casos son de Argentina, si no, sólo sigan las noticias.


En fin, hoy quiero que piensen que ya ha sido suficiente y que si nosotras no gritamos por nuestras vidas no lo va a hacer nadie. #NiUnaMenos. Aunque haya a quien le duela.

Siempre tendremos Manali (dia 3)

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¡Sigamos rompiendo el inglés! (Al menos yo no digo "How'z you?")

Let's break English again! (At least I don't say "How'z you?")

#SquadSelfie
Esta es la historia del último día en Manali y mi última entrada rompiendo el inglés por ahora. Van a descansar de mí, ¡por fin! O no, porque la verdad es que me voy de viaje mañana otra vez y, evidentemente, van a tener que oír más de mis aventuras. Qué importa que este no sea un blog de viajes, lo será de momento. Bueno, mi último día en Manali empezó con sueño. También un paisaje hermoso en la ventana, pero sobre todo con sueño y con Disha grabando un vlog con mi cara medio viva y media muerta. O al menos eso recuerdo, porque el día anterior nos habíamos dormido a las 4am de la mañana. 

This is the story of the last day in Manali and my last post breaking english for the moment. You are going to rest, finally! Or not, because the thruth is that I'm going on a trip again tomorrow and, obviously, you're going to read my advendtures. It doesn't matter that this is not a blog about travels normally, it's going to be a blog about travels right now. Well, my last day in Manali started really sleepy and with Disha recording a vlog with my half-dead face in it. At least, that's what I remember, because we went to sleep the day before at 4am. 

Después de despertar y sufrir despertando a los chicos (que parecían pegados a su cama), teníamos ante nosotros un hermoso... medio día por delante. No digo ya día porque no es cierto. Así que salímos de casa, compramos fruitcake, lays y nos dispusimos a caminar con rumbo a tirarnos de un parapente. A ver, yo que tiemblo cada que me voy a tirar de la tirolesa, aunque me gusta, y que soy completamente inútil para hacer trekking pero igual lo hago (¿no les he contado mi experiencia en e Tepozteco? Todavía no sé si eso va en los mejores o en los peores día de mi vida), estaba ahí dispuesta a tirarme de un parapente porque no importa lo asustado que estés en ese momento, es algo que no te vas a perder nada más por miedo. Es literalmente volar.

After our diffucult waking up and all the time we spent waking the guys up because they were actually pasted to their bed, we had a beautiful... half day in front of us. I cannot say day because it would be inaccurate. We just left the house, bought some fruitcake, lays and we got ready to do paragliding. Picture me ― and I'm scared of everything like that, even though I like the experiences and me, as I'm useless for trekking, but meh, I still try; have I told you about my day in the Tepozteco? I'm still don't know if that day can be categorized in the best or the worst days of my life. But I was there, ready to do paragliding because it didn't matter how scared I was, that was a experience I was not going to miss only for that. It's flying in the sky.


Bueno, ya hablando de cómo es volar en parapente, en serio, de verdad, no tengo palabras para describir la sensación. Ya estando arriba, sentados y esperando a que el viento nos fuera favorable, no me acuerdo en qué estaba pensando. Yo fui la tercera, grité un montón porque, bueno, correr hacia el vacío requiere de un poquito de adrenalina y me estrellé un poco al aterrizar. Volar y ver todo tan lejos es una sensación que todavía no puedo describir, así que se conforman con las fotos.

Well, talking about how is really paragiding, really, for sure, I have no words to describe the sensation. Being in the top of a mountain, waiting for the wind, I don't remember exactly what I was thinking. I was the third that jumped, I screamed a lot because you need a little adrenaline if you're going to run towards the border of the mountain. Also, I crashed a little in my landing. To fly and to see everything from the top is a sensation I cannot describe, so the photos will do. 



Para un lado

Mejor pa'l otro


Esa soy yo, ¡mamá, estoy volando!

Also me flying

Dabbing in the air


Después regresamos a la casa y nos dirigimos en taxi al Mall Road de Manali para, quizá, buscar algún souvenir y comida. Sobre todo comida. Nosotros, no importa qué, siempre tenemos hambre. En la búsqueda de souvenir, Disha nos compró unos llaveros y casi nos rompe el kokoro de los feelings y nosotros nos compramos una placa para nuestra casa que probablemente ya vieron en en el blog. Pero igual voy a volver a poner la foto para que la vean. 

After that we walk again to the house and, from there, we took a taxi to Manali Mall Road in order to, maybe, search some souvenirs and buy some food because we are always hungry, no matter when you ask. We are. While looking for the souvenir, Disha bought us three keychains that says #Squad and she broke our fragile kokoros. We bought a plaque for our house that you have probaby already seen in the blog. But I'm still going to put the photograph again so you can see it. 

#SquadGoals
Nos tomamos esa foto en un restaurante que, según Brandon, tenía un aura japonesa. Comimos allí. Bandon tomó un montón de selfies estúpidas y, antes de volver a casa, compramos snacks para el camino. Para variar, nos dormimos temprano ―Disha y yo, los chicos directamente no durmieron― y despertamos a las cuatro de la mañana para tomar un camión muy muy temprano. Es el peor camión que he tomado en toda mi vida y miren que los he tomado malos, así que en realidad no quiero hablar de eso. Quiero quedarme con las cosas buenas, como las estrellas en Manali que vimos mientras casi nos congelábamos, la sensación que tienes cuando estás volando, la idea de que estabamos fiesteando en los Himalayas, las vistas, las montañas. Quiero quedarme con eso, para siempre.

We took that picture in a restaurant, that, according to Brandon, had a japanese feeling. We ate there. Brandon took a lot of silly selfies and then we went back, after buying snacks for the way back. We slept early, for a change ― Disha, me, the guys didn't sleep at alll ― but we woke at 4am to take a bus in the early early morning. That bus was tragic, the worst bus I've ever taken and I've taken pretty shitty buses, so I don't to talk about it really. I want to keep the good things, like the stars in Manali that we watched almost freezing in the roof, the idea that we were partying in the Himalayas, the sights, the mountains, the feeling you get when you're flying, the good company. I want to keep that, forever.

Diwali (parte 1)

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¡Hola! Debería estar estudiando para los exámenes finales. No, de hecho, estoy estudiando para mis exámenes finales. Pero en un momento de inspiración divina decidí que ya era hora de contarles de mis aventuras en la india (las indiaventuras) y lo que hice en Diwali porque fue ¡hace más de un mes! Así que ya saben, o deberían, la entrada es bilingüe y si rompo el inglés o el español me lo dejan en los comentatios o me lo perdonan, una de dos. 

Hi! I should be studying for my finals. No, in fact, I am studying for my finals. But I have a moment of divine inspiration and I decide that it was about time to tell this story about my adventures in India―the indiadventures. This time, is about what I did during Diwali because it was more than a month ago! So, you should know now: the post is bilingual and if I break English or Spanish you say it on the reviews or you forgive me, one out of two.

Diwali es un festival hindú también conocido como el festival de las luces y es la entrada del año nuevo hindú. Lakshmí, consorte de Vishnú es quien precide esta festividad, pues es ella quien otorga prosperidad y riqueza. Pero bueno, más explicaciones luego, que será más fácil explicar como es cuando les cuente qué hicimos exactamente durante el festival. Todo lo que tienen que saber ahora es que el 27 de octubre tomamos un camión con dirección al distrito de Una, al sur de Himachal Pradesh y que nos costó como tres horas.

Diwali is a hindu festival that is also known as the light's festival and is the Hindu New Year. Lakshmi, consort of Vishnu is the goddess that precides this festivity because she is the one that provides prosperity and wealth. But I'm going to leave all the explanations for later because it's far easier if I try to explain when I tell you exactly what we did for Diwali. All you need to now for now is that we took a bus on October 23rd to Una District, in the south of Himachal Pradesh and that only looking for the bus was three hours of our time because... well... this is India.

Squad picture!
Se suponía que íbamos a tomar el camión a las nueve de la mañana en Kharar. Esa era la teoría. En la práctica todos los autobuses venían ya llenos y ninguno se quería parar, así que después de perder el tiempo por allí, acabamos tomando el camión directo en la base, en la estación del sector 43 en Chandigarh. Los últimos seis lugares, al fondo, pero al menos teníamos asiento. ¡Una, allá vamos! Bueno, en realidad después de una sigue Amb y luego el pequeño pequeñito pueblito a donde íbamos. A la casa de Disha, que ya deben de conocer después de las entradas de Manali. 

We were going to take the bus at 9 o'clock in Kharar, the village where we live. That was the theory. In the practice, all the buses were completely full and they didn't want to stop, so, after spending three hours there, we jus took a rickshaw directly the sector 43 in Chandigarh, to take the bus directly from the bus stand. We got the last six places, at the end of the bus, but at least we had seats. Una, here we go! Well, in reality, after Una, it was Amb and after Amb... a little village that was our final destination. To Disha's house, and you now her after all the posts about Manali. 

Ese día y el que siguió, que aun no eran Diwali, tuvimos la oportunidad de hacer varias cosas... Como... comer. Comer mucho. Y tomar chai. Y fingir que estabamos buscando un refugio perfecto en caso de apocalipsis zombie. Como mi memoria me falla y no recuerdo que pasó cada día entre esos dos, vamos a hablar de todo un poco.

That day and the next one weren't Diwali and we had the opportunity to do a lot of things like... eat. Eat a lot, actually. And drink chai. A lot of chai. And pretend we were looking a place that could be a refuge in the case of a zombie apocalypsis. My memory is failing me, se, let's talk about everything. 

¡La comida! Food!


Me quejo mucho de la comida; pero mucho. Pero eso es porque como comida india en el hostal de mi universidad en la india (ilegalmente, porque no vivo en el hostal) y esa comida es mala comida india. Pero tan pronto como pruebo comida india de verdad buena, la amo. No le digan a mi mamá, pero probé paneer con una salsa de espinaca y no estaba mal. Y yo odio la espinaca.

I complain a lot about the food. Like... a lot. But that is because I eat indian food in my university hostel (illegally, because I am not a hostler) and that food is bad Indian food. But as soon as I can taste the real thing, I love it. Don't tell my mom, but I even tasted paneer with a spinach sauce and it was tasty. And I hate spinach. 

También me enamoré del Masala Paneer, del Daal amarillo bien hecho y hasta probé un arroz que tenía zanahorias y chícharos, como el arroz en México. De hecho, eso junto a un buen rooti, que es casi como una tortilla) me hizo sentir como en México por un momento. Sólo le faltaban los plátanos fritos (o sin freír). 

I also fell in love with the masala paneer, the yellow daal and I even tasted rice with carrots and peas, like the rice in Mexico. In fact, that with a rooti (which is like a tortilla) made me feel like if I was back in Mexico for a moment. I only missed the fried bananas in the rice... or not fried. (Maxime, HI! You need to try it at least ONCE!)

La mamá de Disha también hace unos maravillosos dulces caseros, pero volveremos a ello después.

Disha's mom also make the best homemade sweets, but we'll come back to that later.

Apocalipsis Zombie! Zombie Apocalyse!


El segundo día, si no me falla la memoria, fuimos a explorar las montañas ahí cerca y el río. Y el chiste usual era que estabamos buscando un refugio para el apocalipsis zombie. En el camino visitamos un río que estaba un poco seco de momento, una cascada preciosa y protagonizamos una muy madura pelea lanzando piedras al agua para mojar a  los demás. 

The second day, if my memory is not wrong, we went to explore the mountains near there and we were pretending to look for the perfect place to survive a zombie apocalypse. In the way we found a river with not to much water, a precious waterfall and we protagonize a fight throwing rocks to the water.
Squad!

I just posted this picture to say: Brandon failed modelling classes!!

This waterfall was gorgeus!
Después siguieron todos los preparativos para Diwali y el Diwali, pero como no encuentro todas las fotos ahora mismo, van a tener que esperar un poquito más para ello.

Then it came all the preparations for Diwale and the Diwali, but as I don't have the photographs right now, you will have to wait a little longer for that.

Hasta la siguiente!

Iniciativa #AdoptaUnaAutora

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¡Hola! Obviamente me uní a esta iniciativa que lleva ya tiempo pululando por la blogósfera porque, bueno, soy yo, ¿qué esperaban? A mí no me pueden decir de iniciativas así sin que tarde o temprano me acabe anotando, pues. Así que vengo a contarles más o menos de qué va la cosa y a quien adopté y a animarlos a adoptar a la suya. De hecho, tengo a muchas autoras en mente, seguro cuando acabe con una me mudo con otra y así hasta el infinito. Peor bueno, empecemos por lo primero. 


¿De qué va la iniciativa?


Eliges a una autora. La das a conocer. Fin. 

Bueno, eso es la explicación simple, pero por otro lado...  ¿por qué es necesario darlas a conocer si se supone que cada vez hay más y tenemos nombres monstruosos como J. K. Rowling, Jane Austen, las hermanas Brontë y hasta, si quieren, Stephenie Meyer? Bueno, por la misma razón que J. K. Rowling escondió su nombre de mujer en las iniciales ―¿qué tal si por ser una mujer escribiendo fantasía no la leían?― o también la razón por la cual el nombre de Jane Austen nunca apareció en sus publicaciones sino que los libros eran escritos por "una mujer" o por la razón por la que las hermanas Brontë publicaron, originalmente, con pseudónimos masculinos ―Currer Bell, Ellis Bell y Anton Bell. 

Aunque no nos demos cuenta, la literatura femenina aún va un poco detrás. las escritoras se están poniendo a la par poco a poco, conforme la industria les va dando entrada, pero todavía hay que pelear mucho por ese lugar y por ese reconocimiento. J. K. Rowling no fue la regla cuando publicó, fue la excepción. Por ejemplo, si buscamos las listas de los diez mejores escritores de todos los tiempos, las listas están llenas de hombres ―blancos en su mayoría― y si acaso, alguna mujer por ahí, a veces a simple vista, a veces escondida bajo un pseudónimo masculino, como George Elliot, por ejemplo. 

En fin, que todavía creo que es necesario dar a conocer las joyas que escriben las mujeres. 

No es que les de prioridad o que crea que por ser mujeres escribirán mejor. No, es simplemente que creo que si se encuentran en desventaja en la industria editorial, hay que darles una oportunidad de darse a conocer y que mejor que apoyando iniciativas como esta. 

Ahora sí, ¿a quién adopté?


Tengo muchas ideas de autoras sobre las que hablar, pero para empezar elegí a una mexicana: Elena Poniatowska. Me podrán decir que es famosa hasta las trancas, pero me duele lo poco que la veo en los blogs y en booktube. Necesita que más gente la conozca. Como esta entrada no es para darla a conocer, sólo voy a dejar una pequeña semblanza de ella para que quien sí no tenga ni idea de quien es sepa un poquito y les cuento que planeo hacer con ella. 

Elena Poniatowska Amor, hija de padre francés de origen polaco, Jean E. Poniatowski, y madre mexicana, Paula Amor, nació en París, en 1932. Primera mujer en recibir el Premio Nacional de Periodismo, entre sus obras se cuentan “La Noche de Tlatelolco”, un clásico desde su publicación, al que se le otorgó el Premio Xavier Villaurrutia que rechazó preguntando quién iba a premiar a los muertos. Sus novelas y cuentos son “La flor de lis”, “De noche vienes” y “Tlapalería”, “Paseo de la Reforma” “Hasta no verte Jesús mío”, la vida de una soldadera mexicana, “Querido Diego, te abraza Quiela”, “Tinísima” ganadora del Premio Mazatlán (1992), “La piel del cielo”, ganadora del Premio Alfaguara de novela 2001 y “El tren pasa primero”, sobre la vida de los ferrocarrileros mexicanos, Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos (2007). “Leonora” obtuvo el Premio Biblioteca Breve Seix Barral (2011). “El Universo o nada” (2013) es la biografía del astrofísico Guillermo Haro. “Rondas de la niña mala” es su primer libro de poesía, y cinco libros de cuentos para niños. “Boda en Chimalistac”, “La vendedora de nubes”, “El burro que metió la pata”, “Sansimonsi” ilustrado por Rafael Barajas El Fisgón y “El Niño Estrellero” por Fernando Robles.
Así que aquí encontrarán reseñas y otras cosas diferentes sobre ella. ¡Ya verán! Que es una mujer que ha marcado escuela en México y que merece muchisisimo más amor de la blogósfera del que está recibiendo, así que me encantaría cambiar eso. ¡Bienvenidos a #AdoptaUnaAutora!
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